LI. RELEVACIONES

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Nevae


Han pasado dos días, dos días desde que vi partir a Nevra de la isla y desde que Lance se ha comportado como el verdadero imbécil que es. Desde ese entonces entreno con Syn, estaba harta de tener que verle la cara y oír sus lloriqueos todo el tiempo.

Cerré los ojos con fuerza esquivando su daga una vez más, extendí la mano derecha canalizando la energía que fluía dentro de mí para que brotara por mi palma. De repente, dejé de oír los jadeos de Syn y abrí los ojos satisfecha.

El fuego violeta se extendía en un círculo debajo de ella, mientras poco a poco la elevaba envuelta en aquella materia oscura y parpadeante.

Sonreí con malicia girando lentamente la muñeca para que la nebulosa me imitara hasta dejarla de cabeza, entonces cuando su cabello platinado colgaba a dos metros de altura, mi mano izquierda subió logrando hacer crecer el círculo de llamas.

-¡Ya acabó la práctica, Nevae, bájame!-exclamó roja cerrando los ojos.

-¿No te gustan las alturas, Syn?-cuestioné con una carcajada.

-¡No es chistoso, estoy por orinarme encima!

Chasquee la lengua soltando un suspiro, balancee la mano izquierda apagando las llamas mientras la derecha la bajaba de golpe logrando que se golpeara la espada.

Solté una risa mirando hacia otra parte en lo que la ninfa se ponía de pie molesta caminando hacia mi.

-¡Casi muero! No te rías.

-No te ibas a morir, estaba todo controlado-negué rodando los ojos.

-Ya veo... he notado cuanto control has tenido en tus poderes últimamente-asintió levantando la daga del suelo-Creo que ya estas lista.

-¿Para qué? ¿Para ser poseída por esa cosa?-alargué con sarcasmo-No le digas a nadie de esto, sigamos entrenando. Es divertido.

-No lo veas de esa forma-suspiró colocando una mano en mi hombro.

-¿Por qué te has unido a ellos?-pregunté de repente mirándola de reojo.

Syn curveo su boca a un lado mientras su mirada descendía al suelo con lentitud. Había tocado un recuerdo sensible, estaba segura de ello, pero ella no tenía nada que ver con el ideal de aliados de Lance. Syn era amable y divertida, tenia poderes estupendos y aun podía tener una vida sin esta guerra, pero aquí seguía.

-Había un chico...-inició con voz trémula-me enamoré de él y bueno, me relacioné con personas que no debía.

-¿Entonces...?

-Él destruyó a mi familia y me destruyó a mí-acotó mirándome a los ojos-Para ese entonces había hecho un trato con Leiftan, para que me ayudara a vengarme. Pero todo volvió a salir mal, por eso estoy aquí. No puedo librarme del trato.

Parpadee estática, sentía mi cuerpo nervioso por preguntar aquello pero mi curiosidad iba más allá de toda compostura, necesitaba saber quién era aquel mal tipo que había destruido a la ninfa y la había atado a esta horrorosa vida.

-¿Puedo... puedo ver quién es?-balbucee buscando su mirada.

Syn apretó los labios incómoda, parecía dudar un poco, hasta que al fin asintió extendiéndome su mano. Estiré mis dedos nerviosa antes de envolver su mano con las mías en un incomodo aprieto de manos.

♤Inside      《Nevra/Eldarya》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora