XXVII. ATRACCIÓN ESPIRITUAL

207 23 3
                                    

Nevra


Desperté por el ruido de la puerta cerrándose, la noche anterior nos quedamos hablando horas sobre sus libros favoritos, ella repetía una y otra vez que le gustaba algo llamado fantasía, mientras me contaba algunas de sus tramas favoritas. Cuando amaneció ella se quedó dormida cuando hablaba de sus amores literarios, su rostro lucia una pequeña sonrisa y el mío también.

Jamás pensé que pasar una noche tan sana en compañía de una mujer seria tan maravilloso.

Por lo tanto casi no había dormido nada y despertaba recién a estas horas cuando ella llegaba de ducharse. Con los ojos entrecerrados me apoyé en mis brazos y la observé sacudirse el cabello mojado para luego peinarlo frente al espejo, llegado el momento me enderecé fingiendo despertar para no quedar como un raro cuando se diera cuenta que la miraba.

-Despertaste, bello durmiente-alargo volteándose a verme.

-¿Cuándo tenias pijamada con tus amigos al otro día sentías como si te hubiese aplastado un edificio?-pregunté con la voz ronca rascando mi nuca.

-Todo el tiempo-asintió entre risas-La mayoría de veces porque bebíamos mientras hablábamos y eso empeoraba la situación.

-No pienso volver a hacerte caso-suspiré agachando la mirada.

-¿No te gustó? A mi me pareció muy divertida la pijamada-dijo sentándose junto a mi.

-Si, fue divertida-asentí sonriendo.

-Tu voz en las mañanas suena linda-dijo señalándome con una sonrisa de lado.

La mire sonrojado, esto quizás era una de las cosas que me molestaba de ella. Decía cosas tan repentinas que no sabia como reaccionar y me gustaba, que es lo peor de todo.

-Podría decir lo mismo si me hubieses levantado cuando despertaste.

-Es que te veías tan adorable dormido-sonrió pellizcando mi mejilla-Hasta no parecías el vampiro egocéntrico que eres.

-Lo tomare como un halago-suspiré quitando su mano.

-Bueno, apresúrate a cambiarte así vamos a comer algo-insistió jalando mi mano-Krima se fue con Shaitán a comer hace rato.

-¿Desde cuando se llevan bien?-fruncí el ceño quitándome las sabanas.

-No lo se. Son casi de la misma raza, supongo que es normal-respondió parándose mientras se encogía de hombros.

-Supongo-repetí quitándome la remera-Entonces, me supongo que no sabes que hora es-dije girándome.

Nevae estaba apoyada contra un pequeño buro cruzada de brazos sonriéndome, sin ningún pudor ni nada sus ojos iban de arriba abajo por mi anatomía.

-Ya veo por que le gustas a las chicas-señalo sonriéndome.

-Pensé que ya no te quedaban dudas de mi encanto-dije colocando una mano en mi cadera.

-Las dudas con respecto a tu persona surgen solas-rio caminando hasta mi.

-No te acerques demasiado, no quiero enamorarte en estas condiciones.

-Cierra la boca-frunció el ceño-arruinas el momento, inútil.

Sonreí de lado enarcando una ceja, demostrando una seguridad que no creía poseer y justo cuando iba a decirle algo sus manos sujetaron mi cara y volvió a besarme.

Entonces supondré que nuestra amistad es algo rara y especial, y que los humanos tienen un concepto de amistad bastante raro.

Se separo de mi riéndose mientras iba a buscar algo en el buró, solo entonces me di cuenta que le había sujetado la cintura y que mi cara enmarcaba una enorme sonrisa que borré de inmediato.

♤Inside      《Nevra/Eldarya》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora