Un incidente

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Dos meses habían pasado desde el día en que Orfeo y su amada Eurídice habían visitado el hermoso jardín.

Ese día es especial no era Orfeo el que preparo el desayuno lo preparo Eurídice y el hijo de Apolo había descubierto que era una excelente cocinera.

Después del desayuno Orfeo se dirigió a su habitación para ducharse y cambiarse ya que Eurídice decidió bañarse en el lago, era una Ninfa después de todo.

Al terminar su ducha el hijo de Apolo toma a Eurídice de la mano y la lleva a un hermoso bosque cercano.

Se sientan y pasan el rato encima de una rama de un hermoso y largo arbol.

De repente Orfeo escucha un crujido y logra sostenerse de otra rama pero no logra sostener a Eurícide y está cae del árbol de una considerable altura.

Orfeo baja rápidamente y intenta reanimar a Eurídice la cual no se mueve ni un poco.

Asustado la carga y la lleva rápidamente a su casa llamó a una Ninfa que conocía que era experta en curación y está le dijo que despertaría en unas horas y curo las heridas de Eurídice.

Habían pasado horas y Eurídice no despertaba Orfeo daba vueltas de un lado a otro mientras decía en voz alta

Soy un estupido debi protegerla y lo repetía una y otra vez.

De repente escucha un quejido y se sobresalta

Ve que Eurídice está despertando y va a su lado  la besa por toda la cara y dice

-Que bueno que despertaste me tenías muy preocupado, ahora vuelvo te traigo la cena.

Al llegar pone la bandeja en sus piernas y ve cómo ella come lentamente al terminar dice

-Gracias, me gustó mucho.

-No es nada, dioses me asustaste ¿Quieres algo más?

-No gracias responde con dulzura Eurídice.

-Oye no temas pídeme lo que sea

-¿Porque haces esto por mi? dice la Ninfa en voz baja pero no lo suficientemente baja para que Orfeo la escuche.

-Porque ya no me siento solo, dijo y se acercó a ella y la besó apasionadamente.

Orfeo y Eurídice: una historia de amor como las de antesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora