CAPÍTULO 22

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Ni Suk ni Paola se dieron cuenta, pero mientras ellos estaban en su burbuja donde se miraban intensamente, había alguien con los ojos fijos en sus acciones, un corazoncito se sentía herido al ver aquella escena donde Suk tomaba la mano de la rubia mientras ella le dedicaba la más bonita de las miradas. Kurt iba a llevarle una lata de soda a la muchacha, pero se detuvo en cuanto los observó, tragó saliva tratando de tragarse también el nudo en su garganta que dolía.

- ¿Te gusta verdad? –una voz detrás suyo lo hizo reaccionar

- ¿Ah?, no sé de qué hablas –respondió no muy convincente, a lo que Diana hizo un bonito mohín con su cara infantil.

- Eres pésimo mintiendo y yo soy muy buena leyendo a la gente, no te preocupes que tu secreto está a salvo conmigo, aunque dudo que tu cara de bobo pueda disimularlo por mucho tiempo –dijo riendo y Kurt se ruborizó un poco

- De acuerdo, pero por favor no digas nada, si eres tan buena leyendo a la gente supongo que te habrás dado cuenta que esos dos se gustan.

- De hecho... Paola gusta de tu amigo desde hace mucho tiempo antes de conocerlo, ella lo admira y lo ama desde que tuvo su primer libro en sus manos.

- Tal vez debí haber sido escritor en lugar de actor, quizá de ese modo hubiera tenido un lugar en su corazón.

- No digas tonterías, eres perfecto como eres, es sólo que a veces no estamos destinados a la persona que queremos, hay que aprender a aceptar ciertas cosas de la vida y esperar aquello que sí es para nosotros.

- Apenas me conoces y ya estás diciendo que soy perfecto.

- Te lo dije, soy muy buena leyendo a la gente –dijo con una sonrisa

- Pareces una niña hablando de dulces

- Y tú pareces un anciano que ya se amargó y piensa que ya no hay chance para ser feliz, deja la amargura y sonríeme un poquito.

- No tienes remedio ¿eres así de directa siempre?

- Sí, especialmente con la gente que me cae bien –y Kurt no pudo hacer más que sonreír porque vamos, Diana era como una niña chiquita y adorable, nadie podía decir que no cuando ella actuaba tierno o en todo caso hacía un berrinche, con cualquiera de sus dos métodos ella se salía con la suya.

La última parejita en salir del agua se acercaba a ellos, entre bromas y charlas almorzaron sus sándwiches y de postre comieron fruta fresca. Demás está decir que los hombres (los tres), admiraban de reojo las bellas figuras de las muchachas, porque no era común verlas en tan poca ropa, a pesar de que se habían envuelto las toallas en la cintura para cubrirse un poco, definitivamente tenían una muy buena vista. Lo que no sabían era que ellas también los miraban sólo que eran más discretas y menos evidentes.

Luego de comer jugaron un poco más en el agua, Paola conversó con más soltura, ya no se sentía tan cohibida, incluso se atrevió a sumergirse al fondo para halarles los pies a sus amigas y salía a la superficie muerta de risa por provocarles un susto. El juego les pareció tan divertido que los varones también lo hicieron. La rubia sintió un jalón en su pantorrilla tomó una bocanada de aire y se hundió, grande fue su sorpresa que casi suelta el aire al sentir unas manos sujetarla por la cintura, abrió los ojos y se topó con la vista de ese rostro que la miraba a través del agua cristalina, tan cerca... que aquellos ojos profundos parecían hipnotizarla, la invitaban a mirarlo sin voluntad para huir.

Suk sentía que sus manos quemaban al tacto con la piel de Paola, verla tan cerca, con esa piel de porcelana descubierta, era demasiada tentación para su pobre naturaleza de hombre, no lo resistió más y la tomó por la cintura, tan delicadamente como si ella fuera una muñeca de cristal que pudiera quebrarse al menor indicio de brusquedad, y pensar que la había maltratado al principio, se sentía un idiota, había actuado como uno, pero no más... ésta vez estaba decidido a hacer las cosas bien.

Su momento mágico no duró mucho, pues la falta de aire los obligó a salir a la superficie, Paola salió primero y Suk la siguió, salió tan cerca de ella que sus caras estaban a un par de centímetros.

- Hagamos una fogata y acampemos en el claro, trajimos tiendas –dijo muy alegre Jong Hwa, a lo que todos estuvieron de acuerdo y empezaron a secarse y vestirse.

Las chicas improvisaron un vestidor, sujetando una manta entre dos mientras la tercera se vestía, copiando la idea, los hombres hicieron lo mismo un poco más alejados.

- ¿Qué onda con Suk?, los vi muy juntitos ¿ya se besaron?–preguntó Alejandra levantando las cejas con picardía mientras Paola se vestía.

- ¿Cómo se te ocurre Ale?, ¡por supuesto que no! –respondió totalmente avergonzada y con las mejillas encendidas como un semáforo –él solo...estaba jugando como todos, supongo.

- Uuuyy, yo creo que más bien te estaba coqueteando descaradamente –dijo Diana, directa como siempre.

- En serio chicas, él solo se disculpó conmigo por haber sido tan grosero antes.

- Pues sí que se veía arrepentido ¿eh?, no te quitaba los ojos de encima, un poco más y hubiéramos tenido que nadar en baba de Suk –dijo Alejandra

- Iugh –dijo Diana, la miró y echaron a reír a carcajadas imaginándose la cómica situación.

Por otra parte, los chicos también cuchicheaban al oír las risas femeninas.

- ¿De quién creen que se estén riendo? –dijo Kurt divertido

- Supongo que del menos proporcionado ¿no? –respondió Yong Hwa riendo

- Es tan bonito e inusual escuchar reír a Paola –soltó Suk embelesado de oír por primera vez una carcajada de la rubia.

- Suk, la cara de idiota enamorado es demasiado evidente, yo creo que se están riendo de ti.

- ¿De qué hablas?, n-no estoy enamorado, es sólo que... mírenla, cualquiera se sentiría atraído.

- A mí no me menciones, muy bella tu rubia pero estoy hasta los huesos por Ale –dijo con un suspiro

- Pues tienes razón, cualquiera se fijaría en Paola –dijo Kurt con seriedad –si estás convencido de que no estás enamorado y que sólo es una atracción, entonces supongo que alguien más podría cortejarla ¿no?

- ¿Cómo quién por ejemplo?, ¿le conoces algún pretendiente? –dijo Suk sintiendo una incómoda punzada en el pecho.

- No sé, tú lo dijiste, cualquiera podría sentirse atraído, incluso yo –y se alejó de ellos para tomar su mochila.

Aquello había sido muy directo y Suk estaba sorprendido, cayó en cuenta de que su propio amigo podría de repente ser un rival, ¿desde cuándo le gustaba Paola?, ¿era tan bobo que no se había dado cuenta?, ¿será que Kurt ya había empezado a cortejarla?, ¿acaso estaba ya en desventaja con respecto a su amigo?

No, no podía darse el lujo de ser idiota nuevamente, no podía perderse la oportunidad de acercarse a aquel bello ángel que con sólo una mirada le había calado hasta el alma, que lo hacía sentir en paz y al mismo tiempo lo volvía loco, no ahora que su corazón volvía a latir con la calidez de ese sentimiento ¿amor?

❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️❤️

Hola hermosas, les traigo nuevo capítulo, espero que les guste. 

Dedicado a las bellas damitas que me comentaron en el capítulo anterior:

PorcelainDollOn

Daisy_3run

Jung-Hanna

@KimNormal



MI ÁNGEL, MI INSPIRACIÓN /Jang Keun Suk♥️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora