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JULIEN NAMJOON MEESTER
El sentimiento se había calmado desde ayer por la tarde, mi deuda moral había sido saldada plenamente con la salida. Así que esperaba todo volviese a la normalidad en poco tiempo.
He llegado antes que el resto de los miembros al estudio. Necesitaba recuperar el tiempo donde mi mente parecía solo girar a la "disculpa" hacia la princesa tragona.
Sonreí ante el nuevo apodo.
Esa faceta que he conocido de ella ha sido totalmente una experiencia. Terminó con todo lo que pedí para ambos, dándome cuenta que quizás no era solo una cara bonita con una cartera colmada de oro. Sino parecía tan normal que por un momento olvidé el hecho de estar frente a alguien de su apellido y disfrutar de la compañía silenciosa mientras ella devoraba cada platillo de comida chatarra.
Era fin de semana, no había mucho que hacer pero he solicitado la presencia del grupo para disculparme en primer lugar ante mi incompetencia en días pasados y la segunda poder compensar ese tiempo donde mi mente me traicionó.
– El perdido finalmente está entre nosotros. – Taehyung fue el primero en ingresar al estudio con una lata de energizante.
– Perdido pero no con un rostro de mierda. – el rió ante mi comentario. El castaño sabe a lo que me refiero, el solía salir a fiestas cada viernes y no me extraña que este no fuese la excepción.
– No me arrepiento de nada. – levantó los hombros.
Su filosofía de vida era ridícula mientras intenté sonreírle.
– ¿Dónde has estado?. – ambos volteamos al reconocer la tercera presencia. Min Yoongi ha ingresado dejando su chaqueta en uno de los sillones.
– Por allí. –
No podía decir que he pasado la mayoría de la tarde, un viernes, en compañía de esa mujer porque empezarían a hacer teorías que van muy lejos de la realidad. Soy amable por naturaleza y quizas mi conciencia a veces solía ser un jodido dolor de cabeza.
