FRIENDS • Terminada [Sin Editar].

046

Hee-Sook fue con su padre, el cual al verla llorar tan desconsolada no dudo ni un segundo en querer  lastimar al responsable.

— Hee háblame cielo, — ella negó escondida en su pecho. —dile a papi que ocurre, lo solucionaré. Lo prometo.

— Nadie puede hacerlo — sollozo.

—Por favor amor —la separó de su cuerpo y limpió las lágrimas de su rostro, ella siguió llorando de la misma manera hasta que sus piernas flaquearon y su padre tuvo que sostenerla —. Hee, háblame por favor — el hombre estaba a punto de llorar de la impotencia de ver a su hija de esa manera. — ¿Te hicieron algo? ¿tr lastimaron? ¿Qué paso?

— No puedo tener un bebé. ¡Nadie puede ayudarme! — comenzó a gritar de rodillas en el suelo.

— ¿¡Jungkook no te cumple!? Hablaré con ese... —apretó los puños lleno de rabia, pero su hija lo interrumpió sacudiéndolo de su camisa con bastante desespero.

— ¡NO! No es eso... yo soy el problema. Yo no puedo embarazarme. — comenzó a alterarse y a llorar.

— Con un tratamiento, ya sabes que el dinero no es problema para nosotros... — ella volvió interrumpirlo con un tono de voz elevado.

—¡Papá! Esto va más allá de algo tan simple como el dinero. Dicen que el dinero compra la felicidad... Pero yo no puedo comprar ninguna de las cosas que más deseaba.

— ¿Qué deseabas? Tu puedes tener lo que desees mi vida.

— No puedo tener bebés. Tampoco puedo traer a mi madre de regreso y mucho menos puedo estar junto a Jin... Él ahora tendrá un bebé con Tae-ha. — el hombre abrazó a su hija intentando consolarla, mientras su cabeza ideaba algo para evitar el sufrimiento de la única razón de su existir.

— ¡Yuna! —la chica apareció, estaba embarazada y bastante pálida debido a las complicaciones que presentaba. — por favor acompaña a mi hija a su recámara y prepare un baño.

— No papá, ella está... — está la interrumpió y la más bajita no sabía que hacer.

— Por supuesto, sígame señorita Hee-Sook.

— Anda, ve. 

Jungkook no tardó en llegar a casa de quien ahora era su suegro, el hombre le había llamado con urgencia y corrió hacia el lugar.

Hee-Sook seguía en su cuarto, había sacado del lugar a Yuna para poder llorar a gusto.

Se miró en el espejo y la imagen de Tae-ha junto a Jin comenzó a hacerse presente en el objeto. Cansada, lastimada y muy herida en el alma, Hee lanzó un adorno de su recámara al espejo.

Miles de trozos de vidrio esparcido en el suelo con el rostro de Sook distorsionado estaban siendo el protagonista de la escena que observaba Jung.

— Hee — sin esperar que se opusiera corrió a abrazar a su esposa, quien comenzaba a pelear con los trozos rotos en el suelo, hiriendo sus manos. — tranquila — acaricio su cabello y la acurrucó en su pecho.