Atracador y ladrón de corazón...

Las llaves y un plan

El momento de salir del almacén a llegado. Normalmente, dentro de algunas horas seré con Sergio y estos días solo serán pasado.

Subo en un furgón blindado y ángel y Alicia suben detrás de mi. Después algunas minutas, nos vamos por fin.
No sé qué hacer durante el trayecto. No sé también cuánto tiempo vamos a estar aquí encerados sin ventanas para admirar el magnífico paisaje argentino.

- ¿ Don pimpón que has echo para que Raquel nunca se acosté contigo ? Pregunto.

Estoy aburrida entonces intento divertirme como puedo. Al parecer, a Alicia le gusta mi pregunta porque no puede retenerse de reír.

- Estoy hablando en serio don pimpón. Mira si quieres consejos puede que podría ayudarte. Añado.

- Que estoy casado. No quiero engañar a mi mujer. El repuesta.

Esta vez, el reír de Alicia está más fuerte.

- ¡ Como que no quieres engañar a tu mujer !¿ Cuantas veces has propósito a Raquel de subir a tu apartamiento cuando Mari-Carmen no estaba allí ? Ángel porfa toda la policía madrileña está al corriente de que te enamore de ella. Aún Mari-Carmen debe saberlo. Alicia dice.

Al parecer va a ser un poco más divertido que lo pensé.

- No, quiero a Mari-Carmen. Hicimos el amor antes de que me fui a argentina para arrestar a esta hija de puta.  El añade.

- ¡ Eh eh eh ! Un poco de respeto porfa. Y por favor, se que mi madre fue la mayor puta del país pero yo soy diferente entonces dejadme con mi madre.

- Los prisioneros como tu no merecen respeto. Ángel dice.

Estoy a punto de responder pero el furgón frena y travieso el camión, aplastándome contra las puertas.

- Hijo de puta ! Has tenido tu permiso de conducir en una piñata o que ! Digo enfadada.

Alicia habla en la radio :

- ¿ Garcia todo está bien ?

- Si un gato a cruzado la calle. Responde la radio.

-Vale. 

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Después dos horas en este furgón, llegamos finalmente en un pequeño aeropuerto. No sé cómo Sergio va a sacarme de allí y a cada minuto que pasa, pierdo un poco más esperanzas de volver a verle.

Camino hasta el edificio con cadenas que me lían las muñecas y los tobillos. En camino, un agente se avanza y habla con Alicia. No puedo oír lo que dices porque se han alejándose.

Cuando Alicia vuelve, me dice :

- Bueno hay cambios en el plan, vas a ser transferida por helicóptero. Ángel te vas en el avión y nos reunimos a Buenos Aires donde un avión nos espera. Espinoza, tu vas a ir con ángel pero ayúdame a subirla en el helicóptero.

Avanzamos en frente de un helicóptero militar. Subir con las cadenas es difícil y aprovecho para fingir una caída sobre el agente Espinoza. En mi caída, me recupero agarrando su cintura. Es especialmente allí que están las llaves de mis cadenas. Con la técnica de un carterista, uso diversión para sustituir algo importante a los demás.

Subo finalmente en el helicóptero. Hay tres policía conmigo  además del que pilota el aparato de hélice. No sé cómo voy a salvarme con la llaves a no sé cuántos metros de altura pero veremos eso más tarde.

Durante el viaje en el cielo, el pilote nos invita a beber un poco porque según el la climatización es muy mala para la hidratación. No me gusta que la gente me dé órdenes entonces no bebo nada.

En algunas minutas, los policías parecen cansados. Alicia hace parte de uno de ellos. Es la única mujer en el hélicoptère conmigo. No sé si este détaillé es importante.

Diez minutas más tarde, todos los policías están durmiendo. Tengo que admitir que Alicia parece mucho más inofensiva así durmiendo con una pequeña sonrisa en la cara.

Con discreción e intentando hacer el mínimo de ruido posible, salgo las llaves de mis manos me libero de mis cadenas.

Pongo la pistola de Alicia y en silencio me acerco del piloteo.

- Vas a hacer todo lo que te diré. Y sin avisar nadie. Digo.

Pego la pistola en su mejilla.

- Baja el arma. El responde.

- No es tu que vas a hacer lo que te pregunto. Y primero vas a bajar. Añado.

- Lima soy yo. Mario.

- ¡Mierda ! ¿Que coño estás haciendo aquí ?

- He venido a buscarte. Vamos a escaparnos. Todo está planeado no te preocupas. Ah y muy bien para las esposas no pensaba que consiguieras escaparte sola.

- Pero que estoy independiente. En situaciones extremas tengo que saber actuar sola en caso de problema de vuestro lado. Respondo.

Aterrizamos en un campo sin nada al rededor.

- Ayúdame Lima vamos a atarlos.

Ahora puedo ver a los tres policías en frente de mi. Al parecer Alicia va a despertarse pronto entonces nos fuimos rápidamente. En algunos minutos caminamos en una pequeña carretera y aprovechamos de que un autobús pasa para subir y alejarnos un máximo del lugar donde hemos dejado todo.

Me siento y el transportador va detrás de mi. Mira fuera, los paisajes me tranquilizan y me recordaba el trayecto que tuvo que hacer cuando fui una niña y que tenía que ir a la escuela. En esta época mi mayor preocupación fue salir de mi casa para encontrarme con amigas y correr a través los campos españoles donde robábamos uva o maíz para comer.

De pronto las imágenes de los últimos días vuelven a mi mente.

Pienso a Alicia que me susurraba que para que parren el agua en mi boca o los golpes solo tenía que decirle dónde estaba el profesor.
Cada vez más violentas, los golpes han sido remplazados por hierro caliente y quemaduras en la espalda. Después de esto, el ahogamiento.

De pronto siento una mano sobre mi hombro. Ma alejo de esta presencia y giro la mirada hasta el. Me toma algunas segundas para darme cuenta de que es Sergio que está en frente de mi.

Salto y voy en sus brazos. Sus manos acaricia mi espalda lo que me hace venir al mismo tiempo que mi mano derecha sube hasta su mano para que se aleja de todas mis cicatrices por culpa de las quemaduras.

- Que pasa cariño ? El pregunta.

- Nada grave no te preocupas. Te has echo de menos. Digo para cambiar de discusión pero al parecer Sergio no lo quiere.

- Date la vuelta porfa. Para que puedas ver tu espalda. Sergio dice.

- No te aseguro que estoy bien no hace falta de...

- Lima muéstrame.

Me doy finalmente la vuelta y muy lentamente subo mi camisa, haciendo visibles un montón de cicatrices rojas.

- Son estos hijos de puta que te han echo esto ? Sergio pregunta.

- Es el pasado. Ahora estoy contigo y solo quiero olvidar estos días en el infierno.

Sergio me abrazo y une sus labios con las mías con mucha dulzura. Ya estoy en mi casa.

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Hola a todxs !

Espero que estéis bien.

Os ha gustado este capítulo ? Que habéis pensando del reencuentro?

Buenas noches.

Lima_lcdp.