THE BOY WHO CRIED SHIT © 诗

~• ¿Cuál es la finalidad de este proyecto? •~

"Mi poesía es una mierda"

Eso fue lo que dijo mi mejor amigo tras leerme uno de los poemas más pasionales, desgarradores y bellos, en términos generales, que he tenido la oportunidad de conocer en mi vida. De su autoría, claro. Y no, no exagero.

El pasado verano me reuní una tarde con unos viejos conocidos del Instituto y recuerdo que un amigo me chivó: "Hey, parece que no, pero a X le gusta leer y componer poesía. A Y también. No lo dirías por su actitud, ¿verdad?". Ahí estaban ambos, bebiendo, hablando de fútbol y contando chistes verdes. Pues no, jamás lo hubiera predicho.

Quizá vosotros tampoco intuíais siquiera que podría dedicarle parte de mi tiempo a la prosa. Apenas comencé a los 16 años por pura curiosidad (o más bien, casualidad). Estudiar poesía en secundaria fue horrible. No trataba de componer, sino de memorizar. Era todo tan sumamente teórico que me agobiaba. Veía los poemas como problemas matemáticos, sólo que su métrica no se medía con escuadra y cartabón. Pintaba sobre el arte con carboncillo para averiguar su estilo, o evaluar su ingenio.

¿Sería por eso que comencé tan tarde a enfrentarme a ella?

Y es que reconozco que no soy un gran poeta, que mi poesía ha estado mucho tiempo guardada bajo llave y que hasta me daba respeto (miedo) el mencionar siquiera que la escribía. Pero en esta época tan convulsa en que las conversaciones por chat se han acentuado casi demasiado, he podido comprobar que ese miedo era compartido. Podríamos decir que no somos buenos y que por ello lo ocultamos, por temor a la vergüenza o el rechazo. ¿Pero no somos buenos comparados con quién?

Porque los poemas que escribí hace un par de meses son muchos mejores que aquellos con los que empecé, objetiva y subjetivamente. Entonces ya soy mejor que mí mismo, ¿no? ¿Ya puedo compartirlos, exponerlos?

Mi relación con la poesía siempre ha sido frívola. Me mostraba reacio a leerla y en parte criticaba a quien la escribía. Una gran amiga, Ave_azul, me recomendó hace tiempo un artículo sobre el que escribí al acabar de leerlo:

«Una cosa es tratar de comprender el arte, debatirlo, interpretarlo... El arte debiera, por sí sólo, evocar una imagen o pensamiento. Ahora bien, si desmenuzas esa imagen; es decir, la analizas. ¿No queda el arte en la nada? ¿No estás desintegrando la obra en cachitos hasta desaparecer?

Cuando comencé a leer "El arte como artificio" me pareció justo eso: yo puedo disfrutar la poesía como creación artística, pero analizarla de forma tan objetiva, tan fría, hace que, para mí, pierda todo su significado; como cuando repites una palabra muchas veces en voz alta: te quedas con un sin sentido entre los labios».

Y es que no me producía ninguna sensación el leer un poema más que rechazo, porque mi mente había sido alterada para evaluarla. Entonces encontraba fallos; decía: "Este poema es pomposo y recargado. Justifica la falta de técnica diciendo que es verso libre. La rima es vaga y predecible...". Cosas así.

Bukowski, en su relato "Ojos como el cielo" describía esta desazón:

«Pero es una poesía torpe, muy torpe, tan torpe que la torpeza se toma por significado oculto... el significado está oculto, no hay duda, tan bien oculto que no hay ningún significado. Pero si TÚ no puedes encontrarlo, careces de alma, de sensibilidad, etc., así que es MEJOR QUE LO DESCUBRAS O NO ESTAS EN EL AJO.  Y si no lo descubres, NO MOLESTES»

Todas estas opiniones son igual de válidas y por ello no veo sentido a analizarlas ni juzgarlas. Pero para mí, el arte, cualquiera que sea su modalidad, trata sobre sentir. Y mi mejor amigo leyéndome ese poema me conmovió. Y mucho. Empecé a echar una ojeada por Wattpad y con algunos logré empatizar. ¡Quién lo diría! ¡Que la poesía sirviera para no sentirse tan sólo! Admito, eso sí, que me encontraba un poco perdido tras tanto tiempo obviando su existencia. Por ello agradezco a mis compañeras Stars @MaryEstuardo2112 y @GrenadeMoon toda la ayuda brindada.

Me recomendaron poemarios cargados de sensibilidad que me dieron ese empujoncito que necesitaba para publicar el mío. Porque si esos poemas me habían hecho sentir bien conmigo mismo, o simplemente sentir, ¿por qué los míos no podrían causar las mismas sensaciones en la gente? La verdad que disfruté mucho escribiéndolos. O me sirvieron como desahogo, que no es poco.

El Taller Literario de WattpadPoesiaES  (https://www.wattpad.com/story/167955912) me hizo evocar aquella enseñanza teórica que tuve en mi preadolescencia, pero ahora podría ponerla en práctica en mi propio beneficio. Sin exámenes donde demostrar una u otra cosa. Sin presión.

Y entonces me encontré con un montón de poemas en español y en inglés que decían mucho de mí. Porque, quieras que no, cuando llevas años escribiendo, tu experiencia se refleja en tus escritos. Y cuando estaba deprimido y a punto de estallar mis poemas eran oscuros y turbulentos, pero cuando estaba enamorado y cargado de esperanza, apenas hacía otra cosa que tratar de evocar la belleza que veía reflejada ahí fuera.

@Poisonganger recomendó en su blog (La script de los libros) un poemario de Gatta Cattana titulado: "La escala de Mohs". No sin razón. Es rompedor. Muy vanguardista. Me transmitió muchísima fuerza y conseguí sentirme a gusto leyendo poesía, a pesar de saberse casi prohibida, como una violación a la intimidad de la autora. Sobre la escritura, nos cuenta:

Lamentablemente,
sólo es otra forma de descoserse,
de desangrarse.
Tal vez la mejor.

Podría ser por eso que creamos poesía. O narramos e inventamos historias y relatos. A mi amigo electromasterzero le dije una vez que quizá necesitábamos algo más sencillo que un cuento o novela para expresar lo que sentimos en nuestro interior. Supongo que cada uno tendrá sus propios motivos para expresarse, y eso está bien. Compartir ya es de por sí un acto de caridad.

Yo sólo sé que hay muchas personas que me han hecho muy feliz al compartir conmigo algo tan íntimo como su arte. Sólo espero poder haceros sentir igual de felices (o tristes, o eufóricos, o desesperados, o esperanzados, lo que queráis).

Para ello pretendo compartir poco a poco todos los poemas que guardé en un escondite secreto, y con ellos, mostraros una parte de mí. Quiero que seamos cómplices, ¿vale? Y detrás de esas palabras hay anécdotas y música y obras de arte, recuerdos y personas. Yo te enseño los míos.

¿Prometes mostrarme los tuyos? Creo que es un pacto justo...

V.M.