Otra de las ventajas de vivir en el mundo muggle, era que nadie los conocía, por decirlo de alguna forma.
En el Londres Mágico muchas personas solían reconocerlos y saludarlos, abrazarlos en incluso pedirles autógrafos, tanto a Harry por ser el salvador del mundo mágico, como a Draco, por ser un gran Medimago y el novio del salvador del mundo mágico.
Ese sábado estaba anocheciendo, decidieron salir juntos a hacer unas compras para abastecer el refrigerador. Aunque Harry solía salir a comprar todo, ya que Draco le gustaba comprar muchos dulces.
Entraron a un pequeño supermercado, ambos chicos vestían joggers y camisas holgadas, dando un aspecto de vestir pijamas. El lugar estaba iluminado por bombillas blancas, algunas personas paseaban por los pasillos y los empleados de las cajas estaban enfrascados en sus celulares.
—Dragón ¿Puedes tomar un carrito, por favor?.
Draco asintió y jaló uno de los carritos metálicos, cuando volvió no encontró Harry por lo que asumió que había ido a buscar los vegetales y las frutas. Apoyó un pie en la parte de abajo del carrito, se impulsó con su otro pie y empezó a desplazarse con un pie en el metal y otro en el aire.
Draco miraba aburrido los estantes, metió en el carrito unas cajas de cereales, sus galletas de limón favoritas y chocolate en polvo, mientras seguía desplazándose en el aire.
—Chico...— el rubio se espabiló y miró a quien hablaba.
Era una chica de su edad, tenía el cabello rubio largo hasta la cintura, los ojos castaños y un vestido rojo hasta los tobillos, le sonreía avergonzada y con un exagerado rubor en sus mejillas. Le preocupó que hubiera pescado una fiebre o algo parecido.
—¿Nos conocemos?— preguntó bajando su pie y parando su caminata en la sección de refrigerados, donde estaba buscando el helado.
—No, pero me gustaría... Me pareciste muy guapo y... No sé, pensé que podríamos salir.
Draco frunció en ceño levemente y movió su cabeza, provocando que su cabello suelto cayera sobre sus hombros. Carraspeó pensando en una manera para rechazarla de forma suave.
—No estoy interesado.
—Pero... podrías decirme que te interesa— la chica caminó hasta quedar cerca de él y le acarició el brazo.
—Voy a ser más claro. No me interesas.
Draco subió el pie al carrito para continuar su camino, contrario a lo que todos pensaran él no había tenido más parejas además de Harry. Por otro lado, no sabía lidiar con los coqueteos de las chicas, nunca le atrajeron, algunos chicos les parecieron lindos, pero pasaron a ser segundo plano cuando conoció a Harry y años después se dedicó a conquistarlo.
La chica parecía no rendirse, ya que se puso frente del carrito evitando que se moviera y jugó con su cabello.
—Me llamo Sharon ¿Y tú?...
—No me interesa.
—¡Vamos! Un chico tan guapo debe tener un nombre ¿O tienes novia?— se inclinó en el carrito y se apoyó en sus codos en un intento de pronunciar su escote.
—Eso no te interesa, ten algo de respeto y acéptalo.
Draco gruñó disgustado, empezó a mirar los refrigeradores mientras ignoraba a la chica. Tenía hambre, ¿Cuál helado era mejor? Siempre sufría ese dilema, le gustaba el de limón, el napolitano y el de fresas... podría comprar uno para Harry, quién era fanático del chocolate y dulce de leche.
—Puedo complacerte guapo, hablo en serio— la chica continuaba hablando como cotorra.
Draco estaba apunto de insultarla, pero se quedó callado al sentir una mano en su cintura y como Harry lo pegaba a su costado.
—Hola Dragón— su novio le dió un beso en los labios, Draco sonrió inconsciente y se separó luego de unos segundos.
—Hola cielo.
—Oh... perdón. Adiós— la chica se fue avergonzada y con el rostro sonrojado.
—¿Quieres helado de chocolate?.
—¿Quién era esa?.
—Una chica necesitada de atención y al parecer ciega, no vió mi anillo.
Harry entrecerró los ojos sin perder de vista a la chica hasta que salió del lugar. Draco mientras tanto, abrió el refrigerador y sacó un bote de helado de limón, otro napolitano y por último dulce de leche, para luego meterlos en el carrito.
—¿Qué buscaste?.
—Comida real.
—Entonces, sigamos viendo.
Draco subió su pie al carrito para continuar su camino, pero fue detenido por Harry, quién lo abrazó por la cintura escondiendo su cabeza en su espalda.
Tomó los muslos del moreno y lo impulsó, haciendo que saltara para enrollar las piernas en su cintura y cargarlo en su espalda. Draco sonrió al sentir como Harry besaba su nuca, por lo que agarró el carrito para continuar caminando.
—¿Ahora quién es el mimado?.
—Tú, siempre serás tú.
Continuaron su recorrido, ignorando las miradas de la demás personas, quienes parecían más extrañados por qué Draco estuviese cargando a Harry, que por sus besos y bromas cariñosas.
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-ˏˋ Momentos ˎˊ-
Roman d'amourMomentos en dónde Draco y Harry demuestran su amor. 。゚・ ☆ ° 。。゚・ ☆ ° 。。゚・ ☆ ° 。 ୭ Capítulos cortos. ୭ Amor homosexual (chico x chico). ୭ Situaciones sacadas de mi cabeza, todos los créditos son míos. ˖˚Basada en los personajes de las películas de Ha...