𝓿𝓮𝓲𝓷𝓽𝓮

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"Nuestro nombre" de Natalia Lacunza, su alarma, no sonó esa mañana. Llevaba despertándose con esa misma canción unos meses, y gracias a ese inicio tan movido, empezaba los días de buen humor. Abrió los ojos, desperezándose poco a poco, y sorprendida de sentirse tan descansada. Tomó su móvil, y miró la hora, frunciendo el ceño. Hacía diez minutos que había empezado su primera clase.

O no había sonado la primera alarma, o la había apagado en sueños, pero hacía más de hora y media que tendría que haberse levantado. Tenía dos opciones: o apurar e ir hecha un desastre para llegar a la segunda clase, o saltárselas y tomarse una mañana de descanso.

Decidió que la segunda no le vendría mal. Había quedado con Javier para comer. La iría a recoger a la facultad y tomarían algo por ahí, lejos del barrio de la muchacha. Tomó el móvil y sonrió al ver el último mensaje del chico. ''Descansa'' acompañado de un par de corazones. Pensó en avisarle de que no había ido a la facultad, pero no quería molestarle sabiendo que ya estaría en clase. Iría hasta ciudad universitaria para encontrarse con él, y le contaría entonces que se había quedado dormida.

Caminó descalza hasta la cocina, y disfrutó de su imprescindible infusión mientras leía un artículo para clase. Al menos iría al día para las clases de la tarde. Acabada la infusión, tomó una manzana del frutero y la fue comiendo mientras abría las ventanas de la casa para que se airease. Ese día no iba la asistenta, y su padre siempre olvidaba abrir aunque fuese un poco las ventanas.

Hacía tiempo que no tenía una mañana tranquila, sin nada que hacer. Últimamente todo su tiempo libre era para escribir y para Javier. Echaba de menos sumergirse en una lectura que no fuesen sus palabras, y disfrutar de una historia que no sabía cómo acabaría.

Tomó un libro de la pequeña estantería geométrica que adornaba su habitación. Recordaba haber comprado ese libro, pero nunca había tenido tiempo de ponerse con él. Era una lectura ligera, que prometía una bonita y sencilla historia de amor. Aunque ella ya estaba viviendo la suya propia, decidió sumergirse en el libro.

Tras varios capítulos, no podía quitarse la sonrisa de la cara. Sus protagonistas parecían condenados a encontrarse por obra del destino, casi como Javi y ella. Las primeras palabras eran tímidas, pero las miradas ya eran cómplices.

Se acomodó más en la cama, abrazando una de sus almohadas y descansando su cabeza en la otra, sin dejar de leer en ningún momento.

Unos metros más abajo, los tres chicos entraron en el portal sin ser vistos. La llave maestra que tenía Antón había funcionado, y sonreía victorioso. Aquellos portales viejos solían abrirse con una llave genérica y un poco de maña. Fuera, dos de sus hombres portaban inhibidores que desactivaban todas las cámaras de seguridad de la calle a setenta metros a la redonda. Tenían quince minutos, antes de que se activasen de manera automática.

Antón subió las escaleras de dos en dos, prácticamente babeando, pensando en lo que haría con su parte del botín. Los otros dos mantenían la cabeza más fría. Ninguno había buscado llegar a esa situación, pero no veían ninguna otra salida.

La gran puerta de roble era el reto principal. Sacó de su espalda la radiografía, mientras Javier agradecía porque solo hubiese una vivienda por piso. Encontrarse a vecinos ahí lo haría mucho más complicado.

Antón forcejeó con la radiografía de su mano rota, hasta escuchar los clics necesarios. La puerta se abrió, y Javier caminó directo a la alarma. 7043. 7043. 7043. Frunció el ceño al ver que en el panel no ponía que se introdujese el código.

Alessia escuchó un ruido y pegó un salto en su cama. Por un momento, parecía que habían abierto la puerta de su casa, pero eso no podía ser. Su padre estaba trabajando, y Pablo estaba en el instituto. Se tranquilizó, convenciéndose de que habría sido en otro piso. Aquellos edificios viejos, aunque fuesen hermosos, no dejaban de ser viejos. Cuando la casa estaba en silencio, podías oír hasta a tus vecinos tirando de la cadena.

Philosophy ; [Bnet] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora