La mesa del comedor era de madera oscura. Justin y Pattie hablaban animadamente sobre las nuevas canciones de Justin, de su cumpleaños y de no se cuantas cosas más... La madre de Just a veces me hacía algunas preguntas tratando de introducirme en la conversación, pero yo tenía la cabeza en Selena.
-Cielo, ¿estás bien? Estás muy callada.- me dijo Justin cuando Parttie entró en la cocina para buscar el postre.
-Yo... Justin, ¿me quieres?- tartamudeé.
Mi pregunta lo cogió totalmente por sorpresa. Lamió sus labios y curvó una ligera sonrisa mientras acercaba su mano a mi mejilla, la acarició.
-Lamento interrumpir.- dijo su madre con una enorme tarta en las manos.
-No pasa nada mamá. Solo estaba a punto de decirle a Destiny que la quiero y que me estoy enamorando de ella y sus estupideces.
Mis mejillas comenzaron a arder, ¿como pudo decirle eso a su madre? Y conmigo delante. Pattie y Justin me miraban sonrientes, como esperando a que dijese algo.
Justin'sPOV:
Destiny había estado toda la cena callada y eso no era típico de ella, ahora lo entendía, era por Selena, verla hablando con mi madre, como si nada hubiera pasado entre nosotros también me había dejado a mi en shock.
Seguía mirándonos fijamente, con la boca ligeramente abierta y las mejillas rojas.
-Yo también te quiero Justin.- dije imitando su voz.
-Yo no hablo así...- se quejó ella entre risas. Por fin, parecía que iba recuperando a mi Des.
-¿Como que no? ¿Estás insinuando que no sé hacer imitaciones?- pregunté haciéndome el ofendido.
- No cariño...¿coml crees eso de mi?- dijo con una voz dulce- No lo insinúo, lo afirmo.
Mi madre comenzó a reír a carcajadas, contagiándonos a los dos.
-Me gusta esta chica Justin- dijo sonriendo.- Pero sabe lo tuyo...
Sabía a lo que se refería, mi problema con las drogas, llevaba dos meses sin consumir, quería ser un buen hombre, por Destiny. Ella no se merecía más drama en su vida, ya había tenido suficiente. Debía cuidarla y tratarla como se merecía. Era una gran chica.
-Mamá, mis problemas con las drogas son de dominio público, pe...
-Pattie, quiero a tu hijo.- interrumpió Destiny.- Aunque en ocasiones se haya comportado como un estúpido, lo quiero. No puedo evitar hacerlo, y tampoco quiero. Es un buen chico, pese a que mucha gente no lo vea... Él me ha apoyado cuando no tenía a nadie, no me refiero a lo económico, jamás he aceptado un sólo dolar.- rodé los ojos. Estaba empeñada en que nadie pensara que se aprovechaba de mi o de mi fama.- No pongas los ojos en blanco, quiero que tu madre sepa que te quiero a tí, a Drew, no al famosisímo Justin Bieber. Te quise sin saber quien eras y casi te asesino cuando lo descubrí.- Mi madre puso una mueca extraña, jamás le había contado nuestra historia.- Justin, ¿no le contaste como nos conocimos?- preguntó Des alzando una ceja.
-No, me daba vergüenza...- susurré y vi como Destiny suspiraba.
-Esto es perfecto, lo vas a castigar de por vida.- estaba sonriendo, me encantaba verla así de feliz.- Fue el 10 de Enero.- se acordaba de la fecha, yo también, pero jamás lo admitiría...- Yo había tenido un día horrible, había suspendido el examen de conducir por enésima vez, casi atropello a una señora, había cortado con Jack, mi ex novio, habíamos estado saliendo durante dos años y medio, y aún por encima había discutido con mi madre. Así que estaba de un humor de perros... Justo estaba a punto de matar a alguien cuando me llegó un mensaje de un desconocido haciéndo chistes estúpidos y típicos.- agaché la cabeza riendo.
-Le dije que era su destino.- dije.
-Justin fue muy pesado... Me dijo que se llamaba Drew...y se enfadó conmigo porque me metí con Justin Bieber.- rio con nostalgia.- Nos hicimos amigos... Hablabamos a todas horas, sobre cualquier cosa... Empecé a sentir cosas por él, y aunque creí que jamás lo conocería decidí dejarlo con Jack.
-Tiene una obsesión por las J, como puedes apreciar. Su madre se llama Jessica, su padre James, su ex Jack, su novio Justin, y lo que nos unió también se llama Jack.- reí al ver la cara de confusión de mi madre.- Me dí cuenta de que la quería más que a una amiga cuando esta tonta se pilló una borrachera de Jack Daniels y casí cojo el jet para ir a buscarla.- Mamá sonrió y me dio un beso en la mejilla.
-Sigue cariño, mi hijo tiene esta horrible manía de interrumpir constantemente.
-No hay mucho más que contar... Me fui de casa y como no tenía a donde ir me alojé en casa de Jack. Justin se puso celoso y me confesó que quería ser más que amigo, pero yo no estaba segura de poder soportar todo lo que venía con él así que decidía esperar a que mi vida estuviera en orden... Cuando llegué a Canadá me vino a buscar al aeropuerto, no sabía nada... Me emocioné mucho... Y poco a poco, me di cuenta de que no eramos amigos, yo quería ser algo más que eso...- vi como unas lágrimas rodaban por sus mejillas, se las sequé con el pulgar y deposité un suave beso en sus labios.
Me giré para observar a mi madre y ella también estaba llorando.
-¿Mamá?- dije entre risas.
-No te rías de mi, ha sido una historia muy bonita, no sabía que pudieras ser tan... príncipe azul...- me abrazó.- Siento fastidiar este momento, pero necesito preguntarlo.- me iba a preguntar si me había acostado con ella. Me preparé para la vergüenza...- ¿Cuanto llevas sin consumir? Y sé sincero.- Su pregunta me sorprendió, no era la que me esperaba en absoluto.
-Dos meses, mamá. Ahora, si nos disculpas... Voy a enseñarle la casa a Destiny...
-Claro, yo me tengo que ir. Cuando os vayáis cierra la puerta.- Asentí lentamente.
Ya habíamos recorrido toda la casa y ahora estabamos en mi habitación.
-Es preciosa Justin.- dijo distraída.
-Destiny, ¿que pasa?- pregunté.
-¿Aún la amas?- su voz temblaba.
-No Destiny, no la amo. Te quiero a ti, entiendelo.- contesté.
Sus brazos rodearon mi cuello y su boca se junto con la mía. Nos besamos en esa posición durante mucho tiempo, besarla era una sensación única, podría hacerlo durante horas. Poco a poco nos fuimos dirigiendo hacia la cama hasta caer en ella.
N/A: HOLAAAA!!!!!! SIGANME EN EL TWITTER DE LA CUENTA: @21AnonymousGirl
MUCHOOOOS BESITOOOOS :))
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Virtual.
RandomDestiny Evans es una chica normal de pueblo de 19 años, que hace las cosas típicas de una chica de su edad, hasta que un desconocido pretende cambiar su vida.