Capítulo 15.

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13 de Mayo, 2021.
Londres, Inglaterra.

Escucho la puerta de mi apartamento cerrarse y puedo jurar que mi corazón se rompe. Me tapo el rostro intentando que mi sollozo no se escuche.

Daniel no merece estas mierdas de una estúpida con complejos y traumas de adolescente, y mierda... Duele mucho.

Siento unos pasos cerca mío y por un segundo temo que sea Damon, pero esto pasa a un segundo plano cuando me abrazan con mucha fuerza. Sin dudarlo me abrazo de su cintura y me escondo en el pecho de a quien reconozco como mi mellizo, ahí me permito liberarme. Parezco una niña.

-¿Qué mierda hice, Dex?-Sollozo.

Pasan unos segundos. Mi hermano suspira y mientras me acaricia el cabello me habla.

-Dejaste que el miedo te gane, Nik... Te estás escondiendo detrás de este y aquí ves los resultados de cuando dejas que pase.

Lloro esta vez más en silencio. Me abrazo al cuerpo de mi hermano con fuerza, él acaricia mi espalda, soy muy consciente de que no sabe que decirme.

-Enloquecí, perdí la cabeza, lo jodí todo porque soy una idiota, ¿Cómo mierda le voy a hacer un reclamo? ¿Cómo mierda le voy a gritar?

Dexter no contesta, estoy segura que sabe que tengo razón. Esto es mi culpa. Venía todo tan bien, venía todo siendo tan ideal y yo, como la cabrona cabeza dura e insegura que soy, la cagué.

-Nik...

-No quería que se vaya-Susurro.

-Le pediste que se fuera, hermanita, se lo exigiste...

Lloriqueo como una adolescente en el pecho de mi hermano y luego de unos minutos, cuando creo que ya puedo estar sin lamentarme, me separo de él.

-Soy una imbécil, Dex, soy una jodida imbécil-Le digo mirándolo a los ojos y poniendo distancia entre nosotros-. ¿Por qué demonios arruine algo tan lindo?

Mi hermano no dice nada, me mira mordiéndose el labio inferior.

-No lo pienses, dilo...-Digo al ver que no deja de buscar las palabras en su cabeza.

Me cruzo de brazos buscando como que alguien me abrace, que alguien me consuele. Lamentablemente nada se siente como estar en los brazos de él y eso me demuestra lo jodida que estoy.

-Te equivocaste muchísimo en esto, Nik...

-Lo sé-Murmuro sentándose en el reposabrazo del sofá.

-Le dijiste que no confías en él-Me habla poniéndose en cuclillas frente a mi-. Soy tu hermano, te conozco a la perfección, y muy bien ambos sabemos que confías en ese hombre con tu vida, no por nada dejas que esté tan presente en la vida de Damon.

Asiento con la cabeza y con lágrimas en los ojos.

-Ver a Gina hizo que el pasado y todo lo que vivimos vuelta a mí, ¿Entiendes? Fue revivir nuestra historia allá en Australia y yo no quiero eso.

-Y por este mismo miedo te estás encargando de arruinar lo que tienes con Daniel, lo que tu hijo tiene con ese hombre.

Sin poder evitarlo lloro cansada, no quería que se fuera, quería que me dijera que estaba sintiendo cosas por mi, quería que me dijera que estaba dispuesto a todo, que me besara y me hiciera dejar de pensar tanto. Soy consciente que ese no es el mensaje que le dí, pero me nació esta actitud inmadura y poco común en mi.

-Yo misma le rompí el corazón a mi hijo-Murmuro secándome las lágrimas.

Mi hermano se levanta y se pone al frente mío para volver a abrazarme.

Última vuelta [Daniel Ricciardo] ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora