Damián.
1:30
¿Por qué no abra llegado Hera?
Quiero dejar que disfrute la fiesta pero me está empezando a preocupar.
— Solo llámala — habla Jonathan sentándose a mi lado.
Después que llegamos de su casa de quedó conmigo.
— No lo haré — digo serio.
— ¿Por qué no? — pregunta.
— No quiero verme como un novio celoso — contesto tomando de mi vaso.
— Deja de decir estupideces, se que estás preocupado y lo único que puedes hacer en estos momentos es llamarla para estar más tranquilo.
Buen punto.
Tomó mi teléfono y marco su número poniéndolo en alta voz.
— ¡Necesito que vengas urgentemente! — escucho la voz de una mujer.
— ¡¿Qué?! — pregunto poniéndome nervioso y miró a Jonathan — ¿Dónde está Hera?
— ¡Yo! — hace una pausa y luego responde — ¡Es muy complejo solo ven rápido!
— Dame tú ubicación ¡Voy enseguida! — contesto levantando me del sofá.
Minutos después estoy en el auto con Jonathan conduciendo, los nervios no me dejaron hacerlo.
— ¡Por Dios acelera! — hablo poniendo la mano en mi frente en forma de frustración.
— ¡Voy lo más rápido que puedo! — contesta y segundos después llegamos a una discoteca la cuál reconozco.
Es de Maddie ¿Cómo diablos no la recordé cuando me dijo dónde estaba ubicada?
Bajo del auto Jonathan siguiéndome y puedo ver a la chica del parque, con ella salió Hera.
— ¡¿Dónde está Hera?! — preguntó una vez cerca de ella.
— Ella.. — hace una pausa mirando a ambos lados — ella.
— ¡Habla! — contesto alzando la voz por los nervios.
— ¡Está dentro! — contesta mirándome.
Entro rápidamente y todas las luces de colores hacen que mi cabeza de vueltas.
— Tú busca allá arriba — ordena Jonathan poniendo su mano en mi hombro.
Visualizo las escaleras y subo rápidamente.
Hay un muy largo pasillo donde se ve todo negro, solo muchas puertas, empiezo a abrir una por una interrumpiendo algunos actos sexuales de algunas personas, algunos drogándose y otras solo durmiendo intoxicados.
Entro en una de las habitaciones y veo un chico tirado en el suelo con sus manos en su parte baja retorciendo de dolor.
Miro la cama y veo el vestido que llevaba Hera puesto y siento mi sangre arder.
Sujetó al chico de la camisa haciendo que se levanté.
— ¡¿Dónde está?! — pregunto pegando lo a la pared.
— ¡¿Dónde está quién?! — pregunta intentando soltarse pero lo tomó de cuello volviendo a pegarlo aún más fuerte contra la pared.
— ¡Mi paciencia es poca! — contestó apretando mi agarré en su cuello.
— ¡De verdad no sé de quién hablas! — contesta poniendo sus manos en mi brazo.
Levanto al chico aún con mi mano en su cuello y vuelvo a hablar.
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El Trato De Un Millonario. ✓
Romance- ¿Piensas quedarte ahí parada todo el día ? - pregunta con tono arrogante. - ¡No, señor! - digo antes de sentarme en una de las dos sillas frente a el. - Buen modo de dar una primera impresión - dice mientras tiene su vista en unos papeles para lue...