48 • Gracias por todo.

7.9K 531 16
                                    

Damián.

— Tú padre.

Mi cerebro está procesando su respuesta, ¿Mi padre?

Me detengo a pensar y me doy cuenta de algo.

¿La abran obligado?

Pero quién sería, mi madre lo dudo, Jonathan menos, Maddie no lo creo.

¿Mi padre? No dudo mucho, el nunca a sido una persona que le interesen otras cosas que no sean su trabajo y menos después de lo de Lina.

Miro a Hera y recuerdo lo sucedido con Maddie.

— Tú padre me dijo que quería hablar conmigo — contesta.

— ¿Para qué? — preguntó sin entender.

— No lo sé — contesta levantando los hombros.

Ese día en la noche la pasé muy bien con ella, mejor que todos los días a decir verdad pero el recordar sus palabras me remueve el estómago.

— Gracias por todo — me dice antes de besarme con ternura pero pareció un beso de despedida.

Siempre lo pensé.

Duré años pensando que Maddie era una persona interesada cuándo no, pasó lo mismo por lo que ahora pasa Hera. Pero está vez no dejaré que nadie la alejé de mi, no ahora que lo sé.

Pero provoca rabia.

— ¿Por qué diablos haría algo así? — preguntó levantado me del asiento.

— ¡Damián por favor! — Hera se levanta igualando mi acto.

— ¡NO! — contestó levantando la voz — el no lo volverá a hacer.

— ¿Lo sabías? — pregunta está al escucharme a lo que le respondo con otra pregunta.

— ¿Tú lo sabías? — preguntó confundido.

— Siéntate y te explicaré todo.

Eso hago y me muevo hasta el sofá y me acuesto en espera de ella.

Está se sienta a mi lado tomando aire.

— Cuando estuviste en coma estuve hay hasta que saliste del hospital, el día que despertaste llamaste a tú novia, ¿Sabías quién pensabas que era?

— No — contestó sincero.

— Maddie, pensabas que era ella.

Toma un respiro antes de seguir hablando.

— Antes de que despertarás la llamé y le pregunté el porque se había separado de ti, porque sabía que no fue por su elección.

— ¿Qué te respondió?

— Me siguió insistiendo en que ya no te amaba pero la enfrente y le dije que tanto ella cómo yo sabemos que no es así, que ella realmente si te ama aunque no lo admita — ríe falsamente — le pregunté cuál había sido su razón para terminar contigo si se amaban y todo iba bien y me dijo lo mismo que tú padre me dijo a mi.

— ¿Qué te dijo? — preguntó.

— Me puso a elegir entre tú o mi madre — contesta empezando a llorar.

— ¡Hera! — me acerco para abrazarla.

— No sabía que hacer era una decisión difícil, lo pensé todo pero no salía con la victoria.

— Te entiendo hermosa.

— Me sentía ridícula en ese momento, no quería terminar contigo pero aunque mi madre sea como sea conmigo es mi madre — contesta sollozando.

El Trato De Un Millonario. ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora