12 • Ser el primero.

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Hera.

- Hera - habla mirándome y entiendo lo que quiere decir.

- Solo hazlo - contestó volviendo a besarlo sintiendo algo caliente en mi interior.

— ¡Eres increíble! — habla Damián y sonrió —gracias — sonríe.

— ¿Por qué? — pregunto.

- Por darme el privilegio de ser el primero - contesta y me da un castró beso - Ahora vamos a terminar lo que empezamos - habla cargando me en dirección al baño.

(...)

- Te amo papá - hablo abrazándolo.

- Yo también hija y a tú madre - me corresponde el abrazo.

- ¿Por qué si nos amas nos abandonaste? - pregunto confundida.

- No las abandoné, solo me fui temporalmente - contesta sonriendo.

- ¿Por cuánto tiempo?

- No lo sé Hera, todavía no - contesta tomando mi mano.

- Cuando vuelvas aquí estaré esperándote - digo recostando me de su brazo.

Tengo frío.

- Hera despierta - escucho que me llaman pero no sé de dónde proviene.

- Hera - gritan en mi odio y abro los ojos.

Al abrirlos solo veo agua, levanto la vista y me encuentro un Damián preocupado.

- ¿Estás bien?

- Si - contestó mirándo que estoy en la piscina.

Siento a Damián abrazarme pero me quedo inmóvil.

-Me asustaste - habla y siento su corazón latir rápidamente.

- Lo siento - digo sincero.

- Descuida - contesta separándose un poco de mi - vamos arriba - toma de mi mano.

Caminó junto a él hasta dentro de la casa y siento una incomodidad inmensa al caminar y me quejo.

- Molesta - digo en voz alta.

- ¿Qué cosa? - pregunta Damián.

- Caminar.

- Te dije que te entraría todo - contesta mirándome desde el hombro.

- Cállate - contestó.

- Si quieres repetimos - contesta cerrando la puerta de la habitación.

- Quiero dormir - contestó sonriendo le - y tú también debes hacerlo, mañana trabajas.

- ¿Sabes que no es algo obligatorio? - pregunta cubriendo me con la sábana.

- Si, pero lo harás de todas maneras - contestó mirándolo.

- Duerme - contesta dándome un beso en la frente.

- Descansa - digo antes de darle un pequeño beso en los labios.

Y así volvemos a dormirnos.

(...)

Al despertar miro a mi lado pero el lugar de Damián está vacío, me levanto de la cama y bajo a la primera planta escuchando voces desde la cocina.

Me acerco a esta y escucha la voz de Damián y la de una mujer.

Al entrar a la cocina veo a una mujer muy bonita y cerca de los cincuenta y tantos años.

El Trato De Un Millonario. ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora