Luck mi Guardaespaldas

Estas jodida.

Tenía el cuerpo de Luck sobre el mío, mientras él me tapaba la boca, podía notar como sus músculos estaban tensados.

-       Voy a ver qué ha pasado, no te muevas de aquí Nicki – dijo demasiado serio.

-       Pero Luck ¿Y si cuando tu estas por allí entran por esta ventana? – no me quería quedar sola esto me estaba empezando a dar miedo.

-       Te puedes quedar sola perfectamente no me voy al pueblo simplemente voy a donde se ha escuchado el ruido. – dijo mientras abría las puertas francesas del salón.

-        Pues hombre saber que después de quince años estoy en el mismo sitio  del hombre que asesino a mi madre y que él me ha reconocido no es que me dé mucha seguridad Luck. – le dije rodeando el sillón y acercándome a él.  Suspiro mientras se pasaba las manos por el pelo.

-       Está bien pero estate en silencio y mantén las distancias – ¿Qué mantuviera las distancias? ¿Yo? venga ya este chico le pasa algo en la cabeza, pero ahora no era el momento de discutirle nada.

Fuimos despacio por el pasillo pegados a las paredes, con bastante distancia por supuesto, llegamos a la cocina y pudimos ver un gran agujero en el cristal y una piedra era imposible que lo hubiera roto por casualidad, la nieve estaba empezando a entrar por el agujero asique nos pusimos a buscar algo para taparlo, ninguno decíamos nada porque estaba claro que esto pintaba mal, simplemente por la cara de preocupación de Luck.

-       ¿Esto es suficiente? – en cuanto abrí la boca pude ver como su cuerpo se tensaba aun mas si eso era posible.

-       Si, intenta taparlo, necesito hacer unas llamadas. – y salió de la cocina.

 Estaba demasiada alta la ventana asique tendría que subirme a una mesa.

LUCK.

Lo que había pasado hacia menos de media hora en el salón había sido la jodida cosa más buena que me habían hecho nunca, no tenía que haber pasado pero no me pude controlar, la maldita niña que no sabía cuan irresistible podría ser para mí lo ha descubierto esta noche y esto está mal, yo estoy aquí para cuidarla, o por lo menos intentarlo, tenía que llamar a Charles y contarle todo porque aquí no estábamos a salvo.

-       Trae inmediatamente el culo de mi hija hasta aquí sin perder ni un minuto un avión os estará esperando en el aeropuerto. – no me dio tiempo a abrir la boca cuando ya me había cortado el teléfono, estaba claro que la princesita la había liado hasta en la distancia.

 Salí de la habitación y fui a la cocina a ver si había acabado ya Nicki de tapar la ventana pero cuando llegue vi que tenía bastantes problemas con llegar a tapar el agujero.

-       ¿Todavía sigues ahí? – me burle de ella

-        Me alegra saber que la vista no la has perdido – me respondió irónica – ¿Me vas a ayudar o te vas a quedar mucho rato mirando?

-       No suena mal la segunda opción desde aquí tengo muy buenas vistas.– Contando que solo llevaba una camiseta mía y unas bragas que dejaban poco a la imaginación. Me subí a la mesa detrás de su espalda y se la quite de las manos con cuidado. cuando sus dedos tocaron los míos se tenso y no iba a desaprovechar la oportunidad la gire hacia mí y la bese, sabía que en cuanto llegáramos nada iba a ser igual, yo volvería a ser el mismo gilipollas de siempre y ella la misma niña buena.

-       Luck… - se separo pero no me miraba a la cara

-       ¿Qué pasa?

-       Has… bueno ¿has hablado con mi padre? – dijo con miedo