Luck mi Guardaespaldas

¿Que haces tú aqui?

-       Nicki, levántate o llegaras tarde- La voz de Josep se oyó detrás de la puerta, me levante porque hasta que no abriera no se iba a ir.

-       No me encuentro muy bien hoy Josep, no iré a clases, díselo a mi padre

-       ¿ NICKI QUIEN COJONES TE HIZO ESO!!!!???- Dijo gritando.

No me acordaba ni de habérmelo mirado al espejo, estaba tan cansada que se me olvido todo por completo, y como mi suerte no iba a mejorar quien pasaba por el pasillo en ese mismo instante era mi queridísimo padre.

-       Gracias vida por esta suerte tan magnífica que me das.- Dije para mí. 

-       ¿Qué pasa Josep?- Dijo mi padre entrando de una vez en mi habitación, yo estaba sentada al borde de la cama mirando al suelo, tenía en los brazos los dedos de Derek y el ojo y el labio me dolía como el demonio.

-       Nada papa, ayer por la noche antes de llegar a casa me caí.

-      Nicki mírate por dios inventate cualquier excusa, pero he visto estas marcas y no son de una caída, ¿dime quien ha sido el mal nacido que te a echo esto?- Me exigió

-       Que no ha sido nada papa – Le grite me dolía no decirle la verdad, pero era mejor así, no podía dejar que se enterase, mi padre era capaz de mandar a matar a alguien.

-       Muy bien...  no me vas a decir quién es, ¿ verdad ?

-       No, y deja de sobre protegerme, si te sirve de consuelo no ha sido por tu mierda de trapicheo, nadie en la escuela ni en el pueblo saben de quien soy hija.

-       Está bien Nicki, pero tampoco me voy a arriesgar a que te traten así – Me dijo apartándose de mi lado

-       ¿Que vas a hacer papa?

-       Lo que tenía que haber hecho hace mucho tiempo, no vayas hoy a la escuela llamare para decir que no te encuentras bien, no puedes ir con ese aspecto.- Sin mas salió de la habitación dando un portazo.

-       ¿Qué crees que hará Josep? – mis lagrimas empezaron a caer.

-       No tengo ni idea pequeña, pero no puedes dejar que nadie te trate así.- Se acerco a mi me dio un abrazo y salió.

  Me quede toda la mañana en mi habitación. Me desperté y eran las tres y media de la tarde, por lo que decidí darme una ducha y luego bajaría a comer algo.

Cuando Salí de la ducha me mire en el espejo y mi ojo estaba muy morado aun que creo que menos hinchado, me cambien la tirita de la ceja y Salí del baño para vestirme. Cogí unos pantalones cortos una camiseta de manga corta bastante ancha y me seque el pelo y me hice un moño suelto, Para estar cómoda.

Salí de la habitación, baje las escaleras y era raro no ver a nadie por allí, cuando me acercaba al salón podía oír la voz de mi padre como si estuviera hablando con alguien más, pasaría sin hacer ruido.

-       Nicki, ven al salón un momento, necesito que conozcas a alguien.- Mierda,  mi padre tenía sensores o algo para detectarme.

-       Voy – le dije y camine hacia la puerta, cuando entre vi a alguien de espaldas.

-        Nicki te presento a Luck, tu guardaespaldas, no quiero que te separes de él en ningún momento.

Cuando se dio la vuelta juro que casi me caigo redonda al suelo, ¿QUE  HACIA EL AQUÍ?

     -  Qué haces tú aquí ?- Le dije incrédula de lo que estaba viendo.

     -  ¿Os conocéis de antes? - pregunto mi padre algo serio

 -  ¡No señor!, no nos conocemos de nada- dijo el algo alterado pero  serio y muy seguro de él.

 ¿Pero qué le pasaba a este tío en la cabeza?

-       Papá sabes que se me cuidar perfectamente sola – Dije llena de rabia

-       Pues tus golpes no demuestran lo mismo, así que no discutas las cosas que son muy obvias, el a partir de ahora será tu sombra no te separaras de él ni el de ti- me dijo

No podía creer que esto estuviera pasándome a mi encima con este imbécil, y encima tendría que estar pegada a mi culo las 24 horas del día, porque claro el se quedara a dormir también aquí.

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