Puse en marcha mi nuevo auto, encendí la radio y maneje, maneje hasta perderme de esta ciudad, ¿A dónde iba? No lo sé, solo quiero escapar un momento. Había pasado dos meses desde que mi vida había dado un pequeño giro. Margot decía que extrañaba a la vieja Julieta, bueno, pues yo también extrañaba a la vieja Julieta. Desde que mi papá estuvo a punto de morir me prometí ser la hija que ellos siempre quisieron, y tengo que admitir que mi relación con ellos ha mejorado pero no se siente bien, no me siento bien. Él todavía siguen en mis pensamientos, aunque ahora tenga un relación con Charles. Había prometido vivir mi realidad, y en esa realidad Nate Días ni quiera sabia de mi existencia y nunca la sabría. Por fin había aceptado que yo era sólo un fan más. Desde hace dos meses que no escucho su música, no le escribo cartas, no sé mucho de él ya, no podía seguir torturando a mi corazón. Mis lagrimas cayeron ¿cómo se puede llegar amar tanto a una persona que no sabe que existe y nunca lo sabrás?¿cómo superas a tu primer amor, aunque este sea un amor platónico? ¿CÓMO?
Bajé un poco la velocidad, me encontraba saliendo de Portland, ¿A dónde ir? Miré el retrovisor y un coche negro venía detrás de mí. ¿Era mi idea o ese es el mismo coche que he visto siempre afuera de la escuela? No, no puede ser. Deja de pensar idioteces. Mi celular comenzó a sonar, era Charles. Conteste y puse el altavoz rápidamente.
- ¿Diga?
- ¡Hola, mi amor!
- Hola, Char.
- ¿Dónde andas? He estado llamando pero la llamada no entraba.
- Estaba ocupada, de hecho vengo manejando. ¿se te ofrece algo?
- La cena de mañana con mis padres, ¿no lo has olvidado o sí? –bendita cena, he estado estresada con ella toda la semana-
- No, para nada.
- Bueno, ¿puedo ir a verte, al rato?
- Estaré de compras todo el día –mentí- no quiero causar mala impresión a tus padres, Char.
- Oh bueno – lo oí resoplar- llámame cuando estés desocupada, ¿sí?
- De acuerdo.
- Te quiero, cielo. –oh no- adiós.
- Gracias, Char. Adiós.
La llamada terminó, a los diecisiete años ¿qué tan seria pueda ser tu relación con tu novio de la preparatoria? porque la mía de la de Charles es demasiada y eso es mucho para mí sabiendo que nunca podre quererlo.
Había un retorno para regresar a Portland y di la vuelta, no iba a ir a ningún lado. No iría a buscar a Nate… ¿qué se supone que le diga cuando esté parada enfrente de su casa? ¡Hola, Nate! Soy Julieta y he investigado tu dirección como una psicópata y he enviado cartas diciéndote lo mucho que te amo y de te deseo. Eso sonrisa tan patético justo como yo. La carretera estaba tan vacía que volví a subir la velocidad, pero de pronto el estúpido coche comenzó hacer sonidos extraños y termino por detener. ¿Creíste que tu vida apestaba, Julieta? Pues déjame decirte que te equivocaste, me dijo el karma. Golpeé mi cabeza contra el volante varias veces. ¿Por qué a mí? Ahora estaba en medio de una solitaria carretera, con un coche que no sirve.
Estúpida, ¿por qué no llamas? Dijo mi yo interior, déjate de lamentar de tu estúpida vida y llama a alguien.
Salí de mi auto y saque mi celar, ¡genial! No había señal. El auto negro, se detuvo enfrente de mí. ¿Era el mismo que el de ese rato? ¿Y si sí me estaban siguiendo?
Mis pensamientos fueron desechados a la mierda cuando vi a un hombre bajar de ese auto, no era cualquier hombre, era Nate Días, el amor de mi vida, mi amor platónico, el hombre irreal, ese de cual había prometido olvidarme, Se dirigía a mí con paso firme, creo que de repente olvide como es que se respiraba cuando se detuvo juste enfrente de mí.
- ¿tienes algún problema? –pregunto con vos firme y todo en mi tembló, ¿esto era un sueño?- ¿Puedo ayudarte en algo? –¿cómo se habla? Oh dios también olvidé eso-¿estás bien, mucha?- ¿muchacha? Idiota, soy yo! Julieta!-
- No –ese ‘no’ salí de mi boca? ¡Que estúpida soy!- digo, si..siii.
- ¿Sí o no? – una sonrisa se formo en su cara, oh dios. Creo que me voy a desmayar.
Todo se nublo y lo último que sentí fueron unas manos agarrando mis brazos, adiós mundo cruel. Puedo morir en los brazos de mi amado, ahora mismo. Adiós.
Fui recobrando la conciencia poco a poco, todo se vía borroso ¿qué pasó? No recuerdo bien.
- ¿Estás bien? –pregunto una voz al lado de mi, sostenía mi mano y mi cuerpo se tensó- Muchacha ¿te encentras bien?
Lo miré, era él. Esto no es un sueño, Nate Días está conmigo y se encuentra tomando mi mano. ¡oh dios mío! Es tan hermoso, su ojos color chocolate y ese cabello rizado color negro, si alzaba un poco mi mano podría tocar su cara. Tenía pecas en la nariz, ¿cómo se puede ser tan perfecto y ser humano? Sentir su mano en la mía es estar en otro mundo.
- ¿puedes hablar? –preguntó-
- Si, puedo. –dije esperando que mi voz no sonara tan nerviosa- ¿dónde estoy?
- Adentro de mi coche, te desmayaste. –oh dios, estaba adentro de su coche- ¿segura que te encuentras bien? –asentí con la cabeza, pero es que me encontraba perdida en sus ojos- ¿qué le pasó a tu coche? –apretó mi mano un poco, creo que me voy a volver a desmayar-
- Sólo estaba manejando y de repente hiso movimientos extraños y se apago.
- Llamaré para que vengan por tu coche. –dijo soltando mi mano y tomando su celular y sentí un pequeño vacio-
- No hay señal.
- Tienes razón, no hay. –lo vi hacer una mueca- Soy Nate Días –me miro a mi otra ves- ¿Cuál es tu nombre?
- Ju…Julma –mentí, no podría decirle mi verdadero nombre, no puedo-
- Bien –dijo en tono muy serio- ¿a dónde ibas?
- Regresaba a casa.
- Puedo llevarte, y después hablamos para que vengan por tu coche ¿te parece bien?
- Yo..yoo…no creo que…
- Se va a ser de noche y no podría dejar a una joven sola en la carretera. Vamos, yo te llevo.
- Vivo en Portland.
- Te llevaré –sonrió un poco- ¿de acuerdo?
- Si, de acuerdo.
Si esto era un sueño, ¡por favor! Nunca me despierten.
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POR FIN, NATE Y JULIETA SE HAN VISTO LAS CARAS
No dejen de comentar, por favor. Ahora que se han visto será muy dificil que estos dos se suelten, lo prometo y si mis capitulos son cortos, lo sé y lo siento. Voten y comentan, Como el capitulo es demasiado corto les pongo el otro capitulo más al rato, lo prometo. Un beso y buen inicio de año, chicas. ¡LOVE YA!
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Mi pequeña Obsesión
Teen FictionJulieta Briz una chica de 17 años, a punto de entrar a la universidad, es una chica muy alegre, y cariñosa, aparte de hermosa. Como toda chica de su edad, tiene un amor platónico; Nate Días. Pero últimamente Julieta ha estado sobrepasando su nivel d...