Sistema De Trabajo

Capitulo 4: "Caballero de Brillante Armadura"

POV Fernando

Tras orientarme un poco decidí que mi primera prioridad seria conseguir un nuevo conjunto de ropa y un baño... de preferencia en ese orden.

Si bien sabía qué destacaría entre la multitud, digo... soy un niño de 5 años con ropa rasgada y rastros de sangre, si eso no levanta banderas no se lo que lo hará.

Y como dije paso, casi al instante que llegue al distrito comercial para un cambio de ropa, las personas empezaron a rodearme, si bien aún nadie se había acercado para preguntar, sabía que solo sería cuestión de tiempo, así que sin perder tiempo me dirigí a la tienda de ropa más cercana para no hacer más escándalo de lo necesario me escabullí por la puerta trasera.

Agarrando rápidamente un par de jeans junto con una camisa, me dirigí directo a un vestidor sin que nadie me viera gracias a mi tamaño.

Una vez que estuve cambiado guarde mi anterior ropa en mi inventario y me dirigí por donde vine.

Ahora más presentable decidí entrar por la puerta principal y comprar unos cuantos conjuntos de ropa, ya que sabia que uno no sería suficiente.

Inmediatamente que entre sentí las miradas de las personas que estaban comprando, cosa que me extraño ya que debería de ser un poco mas normal sin toda esa suciedad, junto con mi ropa rasgada en palabras simples no entendía el porque destacaba

{NOTA: SE LIMPIO TODA LA SUCIEDAD Y MUGRE CON UN TRAPO HUMEDO, CUANDO SE ESTABA CAMBIANDO}

Ni un momento después de que estuviera parado sin hacer nada una, se me acerco una empleada la cual tenia una cara de curiosidad la cual supongo que era por mí.

-Se te ofrece algo niño- dijo con una voz amable.

Ya que no se le veía con las intenciones de echarme le constaste con la historia que había creado para este momento.

-Oh nada especial señorita solo quería comprar un par de juegos de ropa, ya que pues vera ayer fue mi cumpleaños y las madres del orfanato como regalo me dieron un poco de dinero para poder comprarme la ropa que yo quisiera- dije con mi cara más inocente que podía cosa que al parecer funciono.

-Ok que bien pues... felicidades, pero... acaso no hay nadie que te acompañe- dijo mientras veía a la calle si había alguien más.

Esto no estaba afuera de mi cuartada así que le respondí.

-Oh si la Madre María, fue a la herbolaria que esta dos cuadras más adelante, ya que me dijo que se le había acabado el abono para el jardín del orfanato, me dijo que me reuniera con ella en la heladería de la esquina dentro de una hora para poder regresar al orfanato- dije mientras señalaba donde estaban ambas tiendas.

Si, bien lamentablemente ya no existía la Madre María, me di la tarea de recorrer el área para poder crear una historia mas creíble para pasar desapercibido, y como lo imaginé la empleada callo.

-Oh esta bien pues, dime que te gusta para así te pueda ayudar a elegir algo- dijo con una sonrisa mientras agarraba mi mano, y me dirigía por la tienda.

Tras unos pocos minutos de elegir 4 mudas de ropa nueva y unos 400 dólares, Sali de la tienda con una sonrisa, ya que mi plan funciono.

Entrando a un callejón cercano guarde mis compras en mi inventario e incinere mis antiguas mudas, me dirigí a un McDonald cercano para disfrutar de una comida.

A pesar de no necesitar comer jamás le diré no a una comida, además de que se me antojo una...

Después de estar toda la tarde de compras ahora necesitaba un lugar para quedarme, y sin más dilación me dirigí al hotel más cercano.