MDZS One-shot y más (⚠️contenido +18 ⚠️)

Mi Bello Durmiente

*Ya no les esta gustando mis one-shot? Sean sinseros y si serás porfavor, se que ya no les esta gustando. Es normal.. Soy rara*

Otro día de rutina, se levantaba a las 5 de la mañana, comprobaba que su amado respiraba y luego organizaba la casa, se duchaba y daba de comer a los conejos, luego preparaba su propio desayuno y lo consumía, antes de encaminarse de nuevo a su habitación quitar la sabana blanca del cuerpo de su amado y desnudarle para luego llevarlo a bañar con mucho cuidado, ya se había acostumbrado, a bañarlo, ponerle el pañal par adultos, vestirle y darle la bebida llena de vitaminas por medio de una jeringa, insertaba el líquido en su boca y le movía la cabeza suavemente invitándolo a tragar y luego se encargaba de esperar que lo se ahora en su propia saliva, lo acomodaba en una posición adecuada y arropaba par que siguiera durmiendo.

Era un trabajo muy arduo y un que le dolía verlo en aquel profundo sueño, seguía esperando a que despertará. Wei ying era su esposo desde hace 4 años y a sus 25 años su amado wei ying sufrí del síndrome de la Bella Durmiente, un problema que provocará que durmiera en largos plazos de tiempo, pero no como cualquier persona normal dormiría después de no descansar en días, wei ying tenía una vida activa y descansaba bien, comía bien y se ejercitaba de maneras diferentes al sexo, pero sufría de esa condición en donde caía dormido y no despertaba en días, podía ser menos de una semana o en ocasiones más de 20 días, lan zhan lo sabía, al confesarse wei ying le dio las razones y le permitió que estuviera allí mientras el estaba en su profundo sueño, no importaba cuanto lo moviera, sacudiera, hiciera cosquillas o golpeara, wei ying seguía en su bunker interno que no le dejaba estar en el mundo real.

Wei wuxian había empezado a sufrir de esto desde los 9 años, muchos pensaban que era un discapacitado y evitaban muchas cosas pero lan zhan sabía que su esposo era talentoso, siempre que despertaba le sonreía y la casa se ponía patas arriba de sonidos, risas y travesuras, aventuras y muchas hojas de borradores, wei ying despertaba emocionado con una nueva historia en mente la cual plasmaba en hojas y creaba historias cortas que se habían convertido en obras maestras que a los niños les encantaba, lan zhan agrupaba cada historia corta y esperaba para cuando wei ying despidiera publicarla. Ese era su trabajo el mayor tiempo.

así que permanecía la gran mayoría del tiempo cuidando de su amado, esperando a que despertara para volver a la hermosa y colorida rutina en la que permanecían cuando el menor estaba despierto, solo debía ser muy paciente y esperar a que reaccionara de aquella burbuja fantasiosa en la que permanecía muchos días.

-wei ying.. están presentando tu programa favorito - le hablo mientras acariciaba su siempre suave cabello, debía esperarlo con mucha calma para que despertara de buen humor 

mas el menor no reacciono, solo lo abrazo mas y siguió durmiendo, lan zhan sabia que esta enfermedad era un gran obstáculo, se sentía mas solo que nunca cuando su amado caía dormido y no despertaba hasta después de largos días y nada podía despertarlo, el solo quería verlo bien, feliz y el temor a que un día decidiera no abrir mas los ojos lo tenia aterrado, así que siempre que podía rogaba a las deidades porque su amado permaneciera con vida y a su lado. 

-lan zhan..- escucho después de unas horas y al mirar a su lado los ojos color plata pertenecientes a su amado lo observaban con atención, como si esperara que algo le dijera que no estaba soñando 

-bienvenido de nuevo wei ying te extrañe..- le dio la bienvenida el mayor inclinándose y dejando el mas dulce beso en los labios logrado sacarle la mas hermosa sonrisa en los labios al menor después de un largo sueño de una semana completa.

-es bueno volver lan zhan .. -sonrió el menor volviendo a sujetar el rostro del mayor y atraerlo para un mejor beso

Lan zhan no se negó, se inclino hasta el punto de estar casi sobre el menor besando sus labios y tocando todo a su paso, respirando su delicioso aroma, tocando su exquisito y suave cuerpo, haciéndolo suyo a su antojo. Porque lo hizo, le hizo el amor con pasión diciéndole todo lo que lo amaba, afirmando que estaba allí para el y que nunca lo abandonaría. Al terminar su dados jadeando wei ying se estiró y le sonrió feliz mirándolo.

-que buen ejercicio - afirmó sonriendo y besando los labios del mayor se coloco de pie y camino con soltura en dirección al baño, estirando su cuerpo cual gato y lan zhan no despegó su mirada de él. Lo amaba, lo deseaba y adoraba. Wei ying era su todo.

Si perder tiempo fue detrás de su amado y lo alcanzo antes de entrar a la ducha donde lo beso e hizo suyo de nuevo con pasión, no perdería tiempo. Al terminar, secarse y vestirse, comieron y cada uno se puso a trabajar, wei ying había tenido un grandioso sueño y escribiría sobre eso. Mientras que lan zhan trabajaría en lo de siempre, concentrados en sus mundos juntos los dos, en silencio, compartiendo la tranquilidad, la quietud y el estar juntos.

Las horas pasaron y cuando ya la luna estaba en su punto más alto en la noche decidieron salir a comer algo en el restaurante favorito de wei ying, el mejor pollo picante de la ciudad según palabras del menor.

-amo estas salidas, es increíble ver de nuevo las luces de la ciudad - alego el menor mirando por la ventana la ciudad

-dormiste toda la semana, mañana deberíamos ir a darle el feliz cumpleaños a yanli - le indico el mayor y el cuerpo de su joven esposo se tenso, odiaba perderse las fechas especiales debido a su enfermedad

-lo siento, siento dormirme.. - se disculpo el menor con un puchero pero lan zhan le acarició la mejilla

-no es tu culpa, es inevitable pero mañana iremos y podrás celebrar, puedo comprar un pastel y licor para ustedes... - indicó el mayor y wei ying se lanzó a abrazarlo feliz, después de todo tenía al mejor esposo del mundo

- te amo locamente lan zhan - confesó el menor y lan zhan se sintió glorioso

-y yo te amo a ti wei ying, eres el mas hermoso de todos... - lo beso suavemente mientras el semáforo permanecía en rojo

Después de cenar y volver a casa se acomodaron en la cama, lan zhan de nuevo tenía miedo, no quería que al dormir wei ying no despertará hasta mucho después o simplemente no despertará jamás.

-esta bien lan zhan, tengo energía, no me dormiré - prometió abrazándolo y mimándolo, el primero en caer dormido fue  lan zhan sin soltar al menor, en la mañana su corazón latía con mucha velocidad esperando de que su amado despertará.

-wei ying... Mi amado... - le llamo y el menor empezó a despertar, abriendo sus lindos ojos para mirar a su esposo

-buenos días lan Er-gege - llamo el menor y como cada que despertaba , le hizo el amor apasionadamente.

El miedo no le abandonaba, solo quería a su lado pero con esta enfermedad, viéndolo ir y venir del mundo de los sueños el miedo a perderle nunca lo abandonaba, pero seguiría esperando, a verlo despierto y aprovechar todo el tiempo que tuviera con el, hasta que el tiempo les dijera que todo acabaría.

**bien allí está, espero les guste y si no pues lo siento mucho... La situación en mi país me tiene tensa**