Tía Jiang

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El sol calentaba fuerte ese día, el sudor en los discípulos era notable, pero algo que sobresalía eran las lagrimas del joven maestro, jiang cheng no podía evitar que lagrimas brotaran de sus ojos mientras se esforzaba por elevar vuelo en su espada, todo su cuerpo dolía, pero debía esforzarse para alcanzar a wei ying, el cual en esos momentos le estaba pidiendo que se detuviera y descansara un poco, pero el no podía detenerse, no cuando su padre había elogiado al mayor y su madre lo había gritado sobre lo incompetente que era, debía esforzarse mas, sin detenerse hasta que lo lograra, aunque le dolía, aunque quería detenerse ya. 

- con lagrimas en los ojos y dolor en el cuerpo no podrás elevarte mas que eso pequeño - la voz suave llamo la atención de ambos niños, jiang cheng cayo de la espada y se lastimo de nuevo, llorando de la frustración de haber perdido la concentración. 

-a-cheng!!- el grito de wei wuxian se escucho y luego lo sintió agachado a su lado 

-tranquilo lo hiciste bien..- animo el pequeño acariciando su espalda y ganándose ser apartado de un manotazo 

-no! fracase! no logre mantenerme en pie sobre la espada! - grito el menor antes de verse siendo levantado y sus ropas siendo sacudidas por una bella mujer que estaba agachada frente a ellos 

-pero lo intentaste y fue un buen intento, las cosas no se hacer de la noche a la mañana, un loto no florece en unas cuantas horas, todo merece su espera y su tiempo para que se pueda apreciar el esfuerzo de ese algo para ser hermoso, por hoy has hecho un gran avance pequeño - le sonrió ella y sin conocerla el corazón de ambos niños se calentó

-quien es usted?..- susurro wei wuxian sorprendido por como jiang cheng se relajo con esas palabras 

- bueno yo...- empezó pero se vio interrumpida por unos alaridos 

-porque jiang cheng no esta entrenando!? wei wuxian! te dije que no lo distrajeras! ninguno cenara esta noche si no cumplen con lo que deben! - exclamo madam yu llegando al lugar, iba a gritar a la mujer que osaba tocar a su hijo pero cuando esta le dirigió una oscura mirada amenazadora se mordió la lengua y se detuvo 

-pero si es yu ziyuan... la araña violeta, no me digas que le haces honor a tu sobrenombre siendo una mala madre - hablo la mujer desconocida logrando molestar de inmediato a la mujer 

- cierra la boca, que haces aquí? - hablo madam yu mirando a la mujer que sonrió y se puso de pie acariciando el cabello del pequeño jiang que se sentía relajado por el toque y eso a su madre no le gustaba 

-que no puedo venir a la secta a ver a mi hermano y sobrinos? o acaso debo pedir el permiso de moverme por mi hogar? - pregunto ella mirando seria a la dama del muelle pero mirando cálidamente a los menores que no sabían como sentirse al respecto entre el duelo entre estas dos mujeres 

-  aléjate de mi hijo..- ordeno la señora del muelle mirando a la mujer que decidida cargo al pequeño jiang que se vio sorprendido

-vamos pequeño, hay que limpiarte y curarte esas heridas, tu también puedes venir pequeño - dijo ella mirando a ambos niños y empezó a caminar pasando por un lado de madam yu que apretó las manos en puños cuando la invitada solo le dio una mirada de advertencia 

la mujer extraña cargo al pequeño jiang hasta donde recordaba era la habitación del joven maestro, la que una ves perteneció a su hermano, y que ahora era del pequeño en sus brazos que por el dolor en su cuerpecito se dejo llevar sin quejas pero preocupado por lo que su madre pudiera hacer, además no le gusto esa mirada en la mujer que lo trajo al mundo, wei wuxian solo los seguía a ambos algo preocupado y asustado por lo que pudiera pasar, además esta mujer no la conocía de nada, a sus nueve años ya podía decir que conocía todo el muelle pero ella era desconocida.

MDZS One-shot y más  (⚠️contenido +18 ⚠️)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora