MDZS One-shot y más (⚠️contenido +18 ⚠️)

Hilos Rojos Y El Destino

Nunca creyó que se convertiría en esa clase de hombre, uno loco al punto de llegar a lo obsesivo, se había vuelto algo irreconocible, pero no podía arrepentirse, no mientras lo tuviera entre sus brazos, ni siquiera sabía cómo es que había empezado todo aquello, pero no podía parar, ya no había vuelta atrás, estaba perdido.

- p..porfavor.. Perdóneme - suplico aquella persona en el suelo arrodillada mientras juntaba sus manos contra las blancas ropas de él

-lo siento pero el que sigas viviendo... Impide que yo sea feliz... - dijo y acarició levemente la cabeza de la persona, le cubrió los ojos y rápidamente corto su cuello

Era la 5 de la mañana, por alguna razón el haber terminado viendo el hilo rojo del destino después de una cacería donde había golpeado su cabeza, era una maldición, siempre que mataba a alguien más notaba que su hilo aún no estaba unido a aquien deseaba, así que se había convertido casi en una rutina, seguir el hilo, buscarlos y matarles, era un homisida, un asecino en serie pero no podía parar, no hasta que notará que su hilo estaba ya unido a quien deseaba.

-has llegado idiota, acaso crees que este es un hotel? - se quejo el menor mientras lo recibía 

Xichen se acercó y lo abrazo y beso dulcemente, amaba a este hombre pero sabía que mientras sus hilos no estuvieran unidos lo perdería, lo sabia y no lo permitiría de ninguna manera. 

-perdóname, había más trabajo esta ves - sonrío mientras lo abrazaba 

-te están explotando, esos idiotas... - Gruñó el jiang mientras caminaba a la cocina y servía la cena 

Xichen fue a la lavadora y metió toda la ropa, se aseguró de que la ropa ensangrentada también fuera lavada, sin que quedara pistas, porque lo que menos quería era que jiang cheng se diera cuenta de lo que él hacía, si eso sucediera definitivamente lo perdería y no podía ser así, respiro profundo y volvió al comedor donde ya estaba la cena y el hermoso hombre esperándolo, se sentó feliz y lo beso de nuevo, tomó su mano y observó el hilo rojo, lo siguió y se sintió genial, el hilo de su amado estaba cortado, quieto pero cuando vio el suyo noto que estaba tensionado, lo que significaba que la persona que sería su destinada estaba cerca, se tenso completamente y luego de cenar, hacerle el amor a su hermoso hombre y dejarlo durmiendo, salió del departamento, camino en silencio por los pasillos llegando frente a la puerta en donde el hilo estaba, su pareja destinada estaba frente a él, suspiro y tocó la puerta mientras esperaba, cuando la persona abrió la puerta se tenso de pies a cabeza. De todas las personas que podían aparecer a la única que menos esperaba era ella, no a esta mujer, no entre todas las personas. 

- pero si es xichen! Hola! - saludo ella con una dulce sonrisa 

- yanli... - saludo el empuñando una mano 

- que haces por aquí? Espera, leíste el mensaje que le envía a a-cheng? - sonrió ella divertida

-así es, vine a preguntar si ya habían cenado, en casa hay cena - dijo el sonriendo lo más amable posible, jiang yanli era madre soltera, su esposo había muerto en la guerra así que solo era ella y el pequeño niño 

- oh eso es lindo de tu parte, pero ya cenamos gracias, es bastante tarde así que creo que es mejor que regreces con mi hermano - recomendó ella y le cerró la puerta 

Xichen volvió a su departamento, se acostó junto a su pareja y rogó porque no tuviera que ser separado, abrazo a jiang cheng y se lanzó a llorar de la nada, maldita sea la hora en la que la hermana del amor de su vida había quedado viuda, porque debía ser ella y no el, porque no el hombre al que amaba. Porque tenía que pasar por esto, no podía matarla, si lo hacía perdería al amor de su vida para siempre así que solo se permitió abrazarlo y llorar.