Ambos eran una pareja unida por el mismísimo destino, pero, ¿y si ellos no querían estar juntos?
**
Para escapar de un pasado que lo ahogaba, Eiji se inscribe en una de las mejores universidades de Londres mientras lucha por ocultar quien es y que h...
La Universidad de Order of Rose era una de las instituciones de mayor calidad y de exuberante tamaño. ¿A que me refiero con esto? ¡El lugar es tan jodidamente gigante, que no podías cruzarte por "azar" con alguien! ¡Podrías llevar años aquí y nunca conocerías a todos!
¡Y aún así...!
Miré con odio a Jules, quién también se había percatado de mi presencia. Sólo nos separaban un par de metros de distancia y alumnos o profesores, pero incluso ciegos podríamos encontrarnos.
Era la tercera vez en el día y ya había perdido el número de veces en la semana, ¡no tenía sentido! ¡Ni un jodido!
<< Jules y tú son una pareja destinada, unidos por el destino. Aunque él o tú no lo quieras, se mantendrán unidos hasta la muerte. >> Habían sido las palabras de Isidora.
¡No lo soportaba! ¿No podía sólo dejarme en paz?
— ¡Aléjate de una buena vez de mí, maldito parásito! — Sin quererlo y a pesar de odiar ser ojo de la atención, un grito se me escapo de la garganta.
Él abrió los ojos, sorprendido. — Eiji, yo... no lo hago porque quiera...
— ¡Mentira! ¡Sólo quieres torturarme! — Dije, apretando con fuerza la correa de mi mochila. — ¡Te odio, te odio, te odio! ¡No quiero verte nunca!
Mis palabras parecieron actuar como una bofetada para Jules, porque lo único que hizo fue retroceder con una mueca de dolor. Para luego apretar sus manos en firmes puños y también gritar: — ¿Sabes qué...? ¡Yo también te odio! ¡Te odio, Eiji! — Confesó, pero su forma de actuar era diferente a sus palabras; tapo su rostro y ante un publico de chismosos, comenzó a llorar.
Intentaba secarse con su camiseta, pero las lágrimas se escapaban sin parar de sus ojos. Muchas personas comenzaron a detenerse para consolarlo o mirarme de mala forma.
Sólo me quede allí, estancado en mi posición y sin poder quitar mi mirada de la horrible escena de Jules llorando.
Lo había hecho llorar... y no lo disfruté.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
