Libídine |G.Weasley Smutfic| |+18| [2]

XVI: Prueba y error

George abrió los ojos con pesadez, para girar sobre su cuerpo y darse cuenta que su hermosa novia no estaba en la cama, soltó un bostezo y se tallo el rostro para sentarse y parpadear tratando de acostumbrarse a la luz solar que se colaba por el gran ventanal de la habitación.

Busco a Lys con la mirada, pero no había ni rastro, e incluso la puerta del baño estaba abierta, se sentó en la cama y alcanzo a distinguir una pequeña nota sobre el mueble que estaba junto y reconoció la caligrafía de Delacour.

"Georgie:

Cuando despiertes ve a la terraza de la suite.

Te amo.

-Lyssane"

Sonrió, y se levantó para tomar su bóxer que estaba en el suelo y colocárselo para ir al baño a lavarse el rostro y los dientes, una vez hecho eso salió de la habitación, en toda la suite sonaba una canción que no reconoció, pero resultaba demasiado dulce, causando que todo el ambiente fuera más romántico y acogedor.

Camino hasta la puerta de la terraza y al abrirla se encontró con la rubia que terminaba de arreglar una pequeña mesa, observo todo y la emoción lo recorrió, la mesa tenía sus platillos de comida favoritos, decorado de forma sutil con flores de distintos tamaños, una botella de vino junto con dos copas.

Pero lo que más disfruto, fue ver a Lys con un delgado vestido color rosa claro, el cabello suelto y no llevaba nada de maquillaje, la luz del sol golpeaba su cabello dándole un brillo especial, su clara piel contrastaba y una sonrisa demasiado tierna adorno su rostro al distinguir al pelirrojo.

—Bonjour chéri

La perfecta pronunciación de la rubia provocaba en George una sensación de éxtasis.

—Buenos días, pequeño sol —se acercó para tomarla de la cintura y besar sus labios de forma corta — ¿Qué es todo esto?

—Quería darte una sorpresa, prepare el desayuno y adorne un poco la terraza para hacerla lucir más acogedora —acaricio los desnudos y masculinos hombros de George — ¿Qué tal dormiste?

—Muy bien ¿y tú? — el pelirrojo llevo los labios a las marcas rojas que tenía Lys en los hombros para dejar pequeños y cariñosos besos—, por cierto, hoy te ves demasiado hermosa, preciosa, bueno, siempre lo estas.

—También dormí bien —Lys sintió como George bajaba las manos hacia su trasero por lo que se separó mientras reía por el puchero del Weasley —...ven, vamos a desayunar, amor.

Tomo su mano para guiarlo a la mesa.

—Pensaba en desayunarte a ti —respondió con voz sufrida para sentarse y ver la comida que preparo la rubia —, aunque no lo niego, esto también se ve delicioso.

—Obvio, yo lo prepare — agrego egocéntricamente sentándose a su lado para tomar la botella de vino y servir el líquido sin pasar un tercio de la copa—, por cierto, sobre lo que te pregunte ayer —le extendió la copa que George acepto —...creo que todo fue culpa de la adrenalina de haber escapado.

—¿Qué? —George la miro confundido — ¿Quieres terminar tan pronto?

—No — Lys negó repetidamente dejando la copa sobre la mesa y tomar algo que estaba detrás ella —...quiero hacerlo bien.

—¿Qué cosa? ¿Quieres que yo te lo pregunte? — la rubia soltó una pequeña risa nerviosa.

—No, solo déjame hablar —George asintió y guardo silencio sin dejar de verla —, George Weasley, creo que me gustas desde hace bastantes años, desde que en la boda de Bill y Fleur me enseñaste ese truco de magia muggle —el pelirrojo soltó una ronca risa al recordar eso —, y me terminaste gustando completamente por medio de las cartas que me mandabas contándome cualquier cosa, no sabes cómo me emocionaba el recibir tus pequeños regalos...nos volvimos a reencontrar en el cumpleaños de Victoire, y bueno, pasaron muchas cosas, demasiado sexo pero me enseñaste tantas cosas nunca creí volver a querer una relación después de lo que paso con Cormac, así que a un inicio te vi como un desahogo sexual no existían sentimientos de por medio pero conforme fui conociéndote y pasando tiempo contigo me di cuenta del perfecto hombre que eres —ambas miradas se conectaron —, siempre siendo tan respetuoso, educado y cariñoso conmigo, a pesar de que solo éramos amigos siempre estabas ahí para todo no solo para tener sexo, podíamos estar horas acostados en tu cama platicando sobre cualquier cosa e incluso dejabas que practicara algunos hechizos contigo —ambos soltaron una pequeña risa al recordar todos esos momentos juntos —, poco a poco fui queriéndote y todo lo que paso con Katie, Cormac y Pierre me hizo ver que mis sentimientos hacia ti son más fuertes de lo que esperaba... me enamore completamente de ti, George Fabian Weasley — la sonrisa de George creció más al aceptar el ramo de girasoles que Lys le entrego —...así qué ¿Serias mi novio?