Hogar. [Varchie]

1. Hogar.

Veronica

Abro los ojos cuando siento unos ligeros rayos de luz colarse por las cortinas de la ventana. Frunzo un poco el ceño e intento enterrar el rostro contra la almohada, pero al girarme para hacerlo, siento el toque ligero de la calidez de una suave piel y el duro pecho de alguien.

Alzo un poco mi vista y sonrío como una chiquilla de dieciocho cuando veo a un apuesto pelirrojo dormir. Archie duerme tranquilo, logro sentir su calmada respiración y dado que estoy recostada sobre su pecho, logro escuchar su corazón. Vuelvo a sonreír al recordar como es mi vida ahora.

Hace ya una semana que decidí divorciarme de Chad, hasta ahorita no soy una mujer divorciada aún, lamentablemente es un proceso muy largo y tardado, por lo tanto, ante la ley sigo siendo "la señora Gekko" pero en mi corazón hace mucho dejé de serlo, y tal vez no sea "la señora Andrews" pero al menos vuelvo a ser "Veronica Lodge" y aunque lleve el apellido de mi padre, la persona que más daño me ha hecho y la que más daño le ha hecho a Archie, la persona que más amo en el mundo, se siente bien volver a decirle a la gente que me llamen "Veronica Lodge" porque a pesar de lo manchado que esté ese apellido, soy una Lodge, diferente a todos los demás y eso es lo que hace que ame más mi nombre, porque demuestro que no por ser una Lodge, soy la misma persona que mi padre, al contrario, soy todo lo opuesto a él, y serlo me hace sentir mil veces más viva.

Sigo observando a Archie, me pregunto que ha de estar soñando, o más bien si acaso está soñando, porque de ser así, imagino que ha de ser un hermoso sueño, sus calmados latidos, su suave respiración y la relajada expresión en su rostro me lo dicen.

Observo su melena pelirroja, y agradezco que el sol haya entrado en el ángulo perfecto que solo me permitió despertar a mí y sólo causa un leve y especial brillo en el rostro de Archie que me permite visualizar a detalle cada milímetro de su hermoso rostro, desde sus cejas, esa extraña pero tierna marca que tiene entre ellas, su nariz, sus párpados tranquilos junto a sus largas pestañas, sus mejillas, tan suaves como la seda, hasta sus labios tan...tan...perfectos.

Sonrío y descubro que por sólo mirar a este perfecto pelirrojo, un no muy leve sonrojo en mis mejillas ha aparecido y me siento tonta por ello, pero a la vez me siento dichosa, porque aún mientras duerme Archie, tiene mucho efecto sobre mí, provoca más de mil emociones y sensaciones en mí y amo eso, porque me hace sentir más viva que un ser inmortal.

Con cuidado de no despertarlo, coloco una de mis manos sobre su pecho y doy ligeras caricias. De a poco bajo mi mirada hacia sus fornidos pectorales y esta vez suspiro como una hormonosa colegiala, y siendo sinceros, me pasa por la cabeza la idea de despertarlo con suaves besos sobre su pecho que poco a poco vayan descendiendo.

Dios, en un segundo mi temperatura aumentó, o la temperatura de la habitación, realmente no sé cuál de las dos, pero ahora siento como ardo y  siento la necesidad de quitarme la camisa de Archie, lanzarla a cualquier lugar de la habitación y sentarme a horcajadas sobre él.

¿Me veré muy egoísta si lo despierto para que me de algo de amor?

No, no creo, seguro él también lo va a disfrutar y preferirá hacerme el amor en vez de dormir.

Pero, por otro lado soy incapaz de despertarlo, no cuando se ve que está descansado realmente, como hace mucho no lo hacía. Todos sus deberes lo tienen tan ocupado que apenas si tiene tiempo de dormir un par de horas al día, y pese a que duerma un poco, nunca descansa, porque aún dormido, su cabeza va a mil por hora y sus deberes invaden sus sueños, provocando que él se despierte antes de lo normal y vaya directo a la estación de bomberos o a Riverdale High.

Suspiro. Siempre he sabido la increíble persona que es Archie, siempre he dicho que es el mejor ser humano, y siempre he creído que este mundo no lo merece, no lo merecemos. Él se desvive por los demás, siempre pone el bienestar de los demás antes que el de él, a él no le importa dejar de comer, dejar de dormir, no contar con un techo para cubrirse, con tal de dárselo a alguien más que lo necesite. Archie podría dormir debajo de un puente y comer las sobras de la basura si con eso lograra rescatar a todas las personas que necesitan de un techo y alimento.