Freedom

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El silencio que siguió después de su pregunta fue aterrador. Los otros tres estudiantes se habían puesto pálidos y se habían paralizado en su lugar por unos segundos.

Jihoon rompió el silencio con un nervioso "¡Mierda!", su anteriormente relajada postura se había puesto rígida y sus ojos buscaron a sus Guerreros.

Jisoo retrocedió lentamente ante rostro del otro Wielder. Estaba acostumbrado a la indiferente, irritante e incluso a la furiosa expresión de Jihoon -pero esta vez había algo fuera de lugar. Lucia desesperado, a falta de una mejor palabra, como un animal acorralado. Esto hizo el corazón de Jisoo latir violentamente y la sensación incomoda en su estomago se intensifico.

Jisoo retrocedió una vez más cuando Jihoon se encorvó ligeramente, asumiendo una posición de pelea -pero brazos fuertes se enredaron por su cuerpo, previniendo su escape. Esta vez, los brazos de Jeonghan eran para nada gentiles, en su lugar, se sentían como cadenas amarrados alrededor del Wielder, para mantenerlo quieto. La sensación en el estomago de Jisoo se extendió por todo su cuerpo cuando Seungcheol se paró frente a él, cubriendo el pequeño cuerpo de Jihoon tras sus amplios hombros. Su rostro se encontraba inexpresivo y sus ojos contenían una frialdad que no encajaba con el cálido color marrón de sus pupilas.

"¿Qué haremos con él?" Seungcheol consultó, sin desviar su mirada del Wielder quien comenzaba a temblar ligeramente. Le tomo todo su coraje a Jisoo abrir la boca para tratar de decir algo que lo salvara, pero una larga mano le impidió hablar. El miedo le recorrió entero, sintiendo sus extremidades fallarle y frenéticamente trato de imaginar qué haría Chan en una situación así.

"¿Y ahora qué?" Seungcheol preguntó otra vez mientras Jihoon daba un paso al frente para mirar al acorralado Wielder.

Jihoon vaciló antes de decir algo y una chispa de pena brilló en sus ojos. "¿No podríamos sólo enviarlo a casa con una advertencia? Él es bastante bueno para ser un Wielder; no creo que él trate de vincularnos a la fuerza."

"Y él está claramente asustado, Cheol. Está temblando como una pluma. Hay que hablar con él," Saltó la voz de Jeonghan en la disputa, demasiado cerca del oído de Jisoo.

"Si lo dejamos ir y nos delata, nos meterá en problemas, especialmente a ti, Ji," Seungcheol dijo, sin estar convencido del todo. "Y nuestros padres también," finalizó con una expresión agria extendiéndose en su rostro cuando Jihoon trató de refutar una vez más. Eso pareció golpear un nervio en Jihoon pues se quedó callado, destruyendo la ultima luz de esperanza que se había instalado en el pecho de Jisoo cuando Jihoon y Jeonghan habían tratado de defenderlo. Lagrimas escaparon de sus ojos cuando Seungcheol se acercó e inútilmente peleó contra el agarre de Jeonghan -pero el Guerrero era mucho más fuerte que él.

Justo cuando Seungcheol estaba apunto de tocar la mejilla húmeda de Jisoo, la puerta se abrió y golpeó contra la pared, proliferando un fuerte sonido. Apresuradamente, Chan entró con el rostro ansioso. La furia se apoderó de él tan pronto vio a su Wielder acorralado y llorando, rodeado por tres estudiantes. "¡Manos fuera, maldi- ¿Jeonghan? ¿Qué mierda estás haciendo aquí?"

"¿Chan? ¿Qué estás haciendo tú aquí?"

Aunque Chan estaba claramente tan sorprendido como Jeonghan, no dudo en dar un paso al frente y arrebatarles a Jisoo a los otros Forecebearers, quienes habían aflojado el agarre ante la confusión. El Wielder se aferró a su Guardian, hundiendo su rostro en el cuello de Chan, y la familiar calidez pudo calmarlo poco a poco. Seungcheol trato de avanzar hacia Chan pero fue detenido por Jihoon, quien estaba mirando a Jeonghan. Un silencio tenso se apoderó de la habitación, y sólo los sollozos silenciosos de Jisoo resonaban en el lugar.

The Others | Joshua haremDonde viven las historias. Descúbrelo ahora