Bright lights

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La reacción de Yongukk fue rápida y desarrollada por experiencia: ante el sonido de pisadas apresuradas, inmediatamente se giró para enfrentar una posible amenaza mientras ocultaba al Wielder tras su cuerpo simultáneamente. Este simple movimiento fue suficiente para causar que el corazón de Jisoo se acelerara con miedo y contuvo su aliento mientras esperaba lo que fuese a suceder a continuación. Las pisadas se oyeron más fuertes y de la esquina de la calle sale un esbelto chico, corriendo a toda velocidad y los ojos ampliamente abiertos. Jisoo sintió un doloroso pinchazo ante la familiaridad de la situación -sólo que esta vez no era él huyendo. Tan pronto como el extraño alcanzó la zona iluminada de la estación del metro, el Wielder reconoció su llamativo cabello rojo.

"¡Por favor ayudenme, por favor! ¡Me han vinculado a la fuerza!"

El acento del bailarín callejero le recordó a Jun; su estomago se anudó e inmediato trato de acercarse -pero la mano de Yongguk lo sostuvo del brazo. "No te acerques. Podría ser una trampa."

El artista se detuvo, tal vez para recuperar el aliento, tal vez para explicar su situación -pero ante el sonido de pisadas a lo lejos, maldijo por lo bajo y reanudó su huida.

Su aterrada expresión hizo el estomago de Jisoo retorcerse dolorosamente. "¡Espera! Yongguk, no podemos sólo dejarlo así. Por favor," suplicó, dirigiendo sus ojos al chico pelirrojo frente a ellos.

"Jisoo, no sabemos de quién está huyendo y estoy solo."

Por un momento, Jisoo pareció vacilar, pero al final, terminó asintiendo. "Entonces vete primero. Trataré de hacer algo. Al menos no pueden forzarme a un contrato."

"Que-¡Jisoo! Eres un Wielder, ¿cómo vas a pelear contra Forecebearers?" El desconocido había oído su conversación ansiosamente y Jisoo le dedicó una pequeña sonrisa para calmarlo. "Bien, sin lugar a discusión, suppongo," Yongguk suspiró y volvió a posicionarse frente a Jisoo mientras que el pelirrojo se escondía en las sombras.

De la esquina, salieron caminando dos hombres, ambos vestidos en costosos y refinados trajes. El aura de superioridad que exudaban era casi palpable. "Ahí estás, Minghao. Si vienes aquí ahora no te castigaré tanto," el de la derecha dijo dibujando una sonrisa falsa. Por un segundo, Jisoo se preguntó cómo es que siquiera podía ver tras ese largo flequillo, pero se obligó a concentrarse en la situación.

"Sobre mi cadáver," el artista callejero dijo, Minghao aparentemente, antes de moverse más lejos.

"Oh, que suerte la tuya, podemos concederte eso," el otro contestó con una dulce sonrisa en su retorcido rostro. "No creas que no te mataré sólo porque eres de los Otros." El chico a su lado, cuyo corte mohicano combinaba chistosamente con el traje, sonrió ante la amenaza y tronó su cuello.

Jisoo pensó que era tiempo de intervenir pero no estaba del todo seguro de cómo. La decisión le fue arrebatada de las manos cuando un rayo de luz cegador fue lanzado en su dirección desde la lampara más cercana y fue sólo gracias a los reflejos rápidos de Yongguk que salieron casi intactos.

"Woah, ¿qué hicimos para recibir este trato?" el Guerrero preguntó luego de asegurarse de que Jisoo siguiese de una sola pieza.

"No podemos dejar ningún testigo, cierto?" El chico de sonrisa extrañamente dulce dijo con un gesto de mano. "Taeyang, termina esto."

Yongguk asumió postura de ataque mientras Minghao alzó ambas manos. "Detente, ellos no te hicieron nada, Daesung."

La sonrisa de Daesung no tembló y Jisoo se lo imaginó alzando una ceja tras ese espeso flequillo. "¿Realmente te crees en la posición de hacer demandas? Es tu culpa que esto haya terminado así."

The Others | Joshua haremDonde viven las historias. Descúbrelo ahora