Las partes donde el alambrado electrocutado había raspado su piel, dolía y Jisoo las sobo mientras se enfocaba en seguir a Mingyu entre los arbustos, quien -como el más familiarizado con el lugar- guiaba el camino. Pegó un brinco y se giró de golpe cuando una mano agarró su brazo pero la sensación familiar de la habilidad de Seokmin calmó su palpitar salvaje. Corriendo bajo la tenue luz de la nublada noche, acompasó su paso al del más alto.
"Deberías guardar energía," Jisoo susurró, y Seokmin sonrió.
Se inclinó y su aliento cálido golpeó el oído del Wielder, provocándole escalofríos recorrer su piel ante el contraste de la lluvia helada. "Lo siento, no puedo evitarlo." Los escalofríos se convirtieron en corrientes placenteras cuando el Healer depositó un pequeño beso en su lóbulo antes de enderezarse y seguir al alto Guerrero como si nada hubiese pasado.
La oscuridad ocultó el sonrojo de Jisoo bien pero, aún así Mingyu alzó una ceja cuestionando la sonrisa mareada del Wielder luego de detener su caminar, bien escondido tras un roble a solo unos metros de la mansión, y se había girado para un breve revisión. "¿Estás bien?"
"Si-si. Sólo un poco nervioso."
Zelo, su guardia designado, se paró junto a ellos y les sonrió brevemente, no había signos de nerviosismo visible en el rostro del menor. "No te preocupes, todo estará bien -y si no, aún tenemos refuerzos."
Negando con su cabeza ante el optimismo del menor, Mingyu se colocó enfrente del pequeño grupo. "Bien. Todos conocen el plan. Nosotros-" Su voz fue cortada por un estruendoso trueno y le bufó al cielo.
"Sí, sí, lo sabemos. La mayor parte consiste en seguirte de todas formas; no necesitamos repetir eso," Zelo descartó, ganándose una mala mirada. "Una pregunta mucho más interesante es: ¿Cómo haremos para entrar a la casa?"
"Bueno, probablemente tengamos que explorar un poco..." Mingyu replicó vacilante y rascó su cuello ante las incrédulas miradas que recibió.
"¿No sabes cómo entraremos?" Seokmin preguntó y Zelo se cruzó de brazos por primera vez viéndose inquieto.
El ligero sonrojo que cubrió el rostro de Mingyu era visible a pesar de la oscuridad y Jisoo pudo sentir el enfado y actitud defensiva de su Forecebearer crecer en su pecho. "El plan era solamente llegar a la base. Nunca hablamos de cómo entraríamos."
"Okay, okay, callense todos; estamos cerca de la casa," el Wielder finalmente intervino cuando Zelo trató de seguir la discusión. "Ya estamos aquí, así que sólo deberíamos intentar. Tal vez podamos encontrar una ventana abierta o una puerta o algo."
Zelo lucía como si tratara de no mofarse de sus palabras. "Hay seguridad en todo el lugar; ¿realmente crees que dejarían una puerta abierta?"
"Nunca lo sabremos hasta que lo intentemos," el Wielder dijo con toda la determinación que poseía y comenzó a dirigirse hacia los oscuros edificios, todos los Forecebearers fueron corriendo tras él en un instante.
Luego de diez minutos de pelearse con arbustos y ensuciarse de lodo, finalmente llegaron a unas enormes paredes de piedra cuando sus auriculares vibraron y la voz de Daehyun resonó en sus oídos. "¡No se muevan!"
"¿Puedes parar, por favor?" Me estás volviendo loco," Minghao siseó y Chan lo miró antes de detener el movimiento errático de sus piernas. En su lugar, tocó su auricular, esperando por un sonido que confirmara su conexión.
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The Others | Joshua harem
FanfictionJisoo estaba satisfecho con ser un don nadie; sin contar su falta de poder, vivía su vida de estudiante aburrido en paz. Eso es hasta que conoce a Chan, el primer Forecebearer de una prestigiosa familia de Wielders, quien ha huido de casa y ahora...