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Narra Carolina.

Todo había sido muy rápido, cuando llegamos hasta este punto?

Sé que no tienen idea de lo que hablo, así que se los contaré.

Hace varias semanas, mi hermano y yo habíamos ido a la papelería que estaba cerca de mi casa, sí donde trabajaba aquel señor que tan mal me caía. Era la primera vez que iba a ese lugar en algunas semanas, tal vez meses.

Lo interesante fue que, al llegar, mi sorpresa fue muy grande, no era aquél señor que tanto evitaba el que se encontraba ahí, era... un chico.

Admito que al verlo me puse nerviosa, tanto así que no lo pude ver bien, pero parecía lindo, pero intentaba evitar su mirada a toda costa.

Después de que me diera lo que iba a comprar, mi hermano y yo volvimos a casa, con la novedad de el "nuevo empleado", cosa que, no sé por que, le terminamos contando a mi mamá.

- A que no sabes que? Tu amigo el de la papelería ya no está ahí - Mencioné al entrar a la casa.

Mi madre hizo una mueca de desagrado, sí, a ninguna de las dos nos caía bien aquel señor, era bastante metido y en pocas palabras... chismoso.

- Y ahora quien está? - Preguntó.

- Un chico - Respondí tratando de sonar normal.

- Mmh... un chico - Respondió. Ok? Creo que no fui lo suficientemente convincente.

En eso, subí a mi habitación para comenzar a hacer mi tarea. Obviamente no me pensaba guardar esto, así que le conté a Lena y a dos de mis primas. Empezaron a hacerme preguntas, pero no sabía que responder, no sabía como describirselos, ya que no lo había visto detenidamente.

Incluso, una de mus primas había sugerido el tomarle una foto! Están locas? Ni de broma.

Pasaron varios días y no lo había vuelto a ver, mas que nada porque yo ya no había ido de nuevo.

Pero al parecer hoy lo aría, Lena vendría a mi casa y ambas iríamos a la famosa papelería.

Así fue, rato después, mi amiga llegó, salí y ambas nos dirigimos a ayá, técnicamente el que viniera tenía doble intención: conocer a aquel chico lindo.

Por suerte, al llegar al lugar, vimos que efectivamente, se encontraba ahí. Lena y yo nos volteamos a ver y solo asentí a lo que ella sonrió.

Ese día no pasó en sí algo interesante, solo que pude verlo mejor, ah... y que al parecer a Lena también le había parecido lindo, incluso creo que le gustó.

No la culpo, era bastante lindo, era alto, mas que yo, su cabello era algo largo y ondulado, su piel era blanca y... Dios! Su voz.

Pero no sabíamos nada mas, ni su nombre, ni edad, nada!

[...]

Ya habían pasado varias semanas desde que eso había pasado, y ahora sabía otros datos útiles sobre aquel chico, su nombre era Jean, al parecer era un año mayor que yo, y se preguntarán, como lo sé? Pues un día que Lena y yo volvimos a ir, él la reconoció, al parecer conocía a Violeta, la hermana mayor (por un año) de Lena, había estado con ella en primaria, pero desde la secundaria ya no había sabido nada de ella. Hablaron un poco, y después de eso nos habíamos ido. Lena estaba en shock, no lo podía asimilir, al principio le había parecido algo conocido, pero lo ignoró. Ahora sabía el porque. Lo peor, era que recordaba como aquel chico, al ser niños, molestaba a Lena. De verdad que el mundo es bastante pequeño.

[...]

El día de hoy era lunes, y por alguna maldita razón, estábamos en la escuela, por suerte, esta vez, Lena estaba conmigo.

Ya nos encontrábamos en la tercera y penúltima clase. La maestra nos había pedido de tarea imprimir unas hojas para trabajar, las cuales había mandado al grupo que teníamos de su clase, y justo cuando había dicho eso, Lena y yo volteamos a vernos con una sonrisa, sabíamos lo que eso significaba.

Y efectivamente, cuando la maestra se retiró, aun faltaban veinte minutos para que la próxima clase iniciara, así que ambas tomamos nuestras mochilas y salimos de la escuela.

Comenzamos a caminar en dirección a la papelería, sí, donde estaba el chico lindo, quiero decir, Jean, mientras conversabamos animadamente y esperando a que él estuviera ahí.

Al llegar, sonreí. Estaba ahí. Y aquí empieza lo interesante.
Yo era la que casi siempre hsblaba, si, lo se, raro.

Le pregunté si podía imprimir unas imágenes de mi celular, a lo que él había respondido que sí. Luego, borró algo en la computadora y... OMG!

Escaneo con su celular su whatsapp en la computadora, eso significaba que...?

- Te paso mi numero - Dios! Yo solo asentí y comencé a anotar en mi celular los números que me dictaba y... listo! Tenia su numero!

Le pasé las fotos, y mientras el las imprimía y acomodada todo, yo miraba la foto que tenía de perfil. Después de que nos diera las hojas, ambas salimos, y si... emocionadas.

Comenzamos a caminar nuevamente a la escuela, en el camino, no dejábamos de hablar de Jean, de lo que había pasado y de lo que, al parecer... no había notado.

Al parecer, Jean se había puesto nervioso cuando llegamos, incluso las manos le habían temblado al devolvernos el cambio y darnos aquellas hojas. Todo esto lo había dicho Lena, ahora la pregunta era...

¿Por que? O mejor dicho, ¿Por quien? ¿Lena? O ¿Yo?

Cuando al fin llegamos a la preparatoria, entramos a nuestro salón y minutos después, la maestra llegó.

[...]

Cuando al fin terminó la clase.

- Oye, y si... vamos otra vez a la papelería? - Preguntó Lena.

A lo que yo, claramente, asentí con una sonrisa. En realidad no teníamos a que ir, así que cuando llegamos, mi amiga pidió dos plumas, una para ella y una para mi.

Cuando Jean nos las dio, cada una le pagó, y en eso, Lena salió, ya que le estaban llamando, yo tomé mi cambio y ambas plumas.

- Agarra mi dinero - Pidió ella, así que tome el cambio de ella.

Estaba a punto de salir, cuando en eso, la voz de Jean me detiene.

- Oye - Yo volteo a verlo - Tu eres a la que le pasé mi numero, verdad? - Yo asentí, tratando de no sonreír.

- Como te registro? - Preguntó con una sonrisa. Dios! Creo que voy a morir.

- Me llamo Carolina - Respondí con una leve sonrisa y salí de ahí casi corriendo.

Ven? Ligar definitivamente, no es lo mío.

Cuando me encontré nuevamente con Lena, nos sentamos en unas bancas cerca de ahí, estabamos esperando a que llegaran por ella, y como mi casa quedaba a una cuadra, me quedé con ella a hacerle compañía, mientras tanto, hablábamos de él, desde hace unas semanas, se había convertido en el tema de conversación principal, incluso le conté lo que acababa de pasar recién.

[...]

Minutos después su hermano mayor llegó por ella, así que nos despedimos y caminé a mi casa. Abrí con mi llave y entré.

Después de saludar a mis padres, y hablar un poco con ellos, subí a mi habitación, claro que les tenía que contar esto a mis primas, bueno, terminar, por que les había empezado a contar algo, aunque no muy claro.

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Jolisss!

Como que ando muy activa por estos rumbos jajsjkjka

Espero les estén gustando los capitulos, y si es así no se olviden de votar y dejar sus comentarios, saben que amo leerlos ❤

Chauu 💕.

MYA♡

Descifrando miradas [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora