Narrador omnisciente.
Los días habían pasado, sin nada interesante para contar, aunque lo que Caro no sabía era que este día, cambiaría algo muy importante, pero no precisamente de manera positiva, si no, todo lo contrario. Estaban en la primera hora, y como la maestra no iría, todos se encontraban conversando, hasta que Chiara habló.
- Ana, ya les dijiste? - Le preguntó a la susodicha.
- Amm... no - Dijo ella algo triste.
- Que pasa Ana? - Preguntó Lena.
- Si, no nos asustes - Habló Carolina.
- Emm... lo que pasa es que... chicas, esta es mi ultima semana, bieno, mis ultimos días aquí en la escuela y en la ciudad - Soltó, y Lena y Caro abrieron los ojos como platos sorprendidas por la noticia.
- ¿Que, que? - Preguntó Caro sin poder creerlo.
- Si, chicas... desde hace tres semanas me dijeron que nos iríamos a vivir a Estados Unidos, pero no sabía como decirles a ustedes dos... Chiara ya lo sabía desde mucho antes, pues es mi prima, y a Ori, digamos que tenemos poco siendo amigas y no fue tan complicado, ya que un día simplemente se me salió decirle, pero... a ustedes dos... las conozco desde antes que a ella, somos amigas desde hace mas tiempo, era mas complicado decirlo - Dijo desanimada.
- No, no te creo, Es una broma ¿Verdad? - Dijo Lena sin creerle, ya que comúnmente solíamos hacer varias bromas.
- No, es enserio... se los juro por nuestra amistad y por el cariño que les tengo - Dijo ella con los ojos cristalizados.
Fue ahí cuando... Caro perdió las esperanzas de que fuera una broma, ya que siempre que una de las cinco decía eso, era por que era enserio.
- Amiga - Fue lo único que la morocha logró articular, para después lanzarse a los brazos de Ana y unirse en un tierno abrazo.
Al separarse, Ana y Lena se abrazaron, y cuando se separaron todas se sentaron.
- Tengo la esperanza de que en algún momento digas que es una broma - Dijo Lena divertida pero con una cara triste.
- Que mas quisiera decirles "Es una broma!" - Dijo y ambas abrieron los ojos como platos - No, si es encerio, solo que quisiera poder decirles eso - Dijo y ellas volvieron a poner cara triste.
- Y... cuando te vas? - Preguntó Carolina.
- El sábado - Soltó y ellas abrieron los ojos como platos.
- Que? Ana, ya es martes y el viernes no ay clases - Dijo Lena reprochando.
- Lo se... solo nos quedan tres días juntas - Dijo Ana a punto de llorar.
- Nos hubieras dicho antes - Dijo Lena con cara larga, mientras que Carolina mantenía su mirada fija en la nada con cara triste.
- Para que? Para que estuvieran tristes desde antes? - Preguntó retoricamente.
- Pues... - Lena suspiró - Ok, te entiendo - Dijo poniendose como Caro.
- Ya chicas, no se pongan así, ay que aprovechar el poco tiempo que nos queda y disfrutarlo - Dijo Ana tratando de animarles y pasando su mano por los rostros de ambas, sacándolas de su trance.
- No te vallas - Dijo la morocha y volvió a abrazarla.
- Que mas quisiera yo - Contestó ella con una sonrisa triste al separarse y se quedaron viendo unos cuantos segundos.
- Ay no, neta... voy a llorar - Dijo Caro con los ojos llenos de lagrimas - Ahora imagínate como voy a estar el jueves - Volvió a hablar.
- Yo también - Contestó Ana nostálgica.
Las horas pasaron, por suerte algo lentas, y ya se encontraban a la hora de salida, por lo tanto cada quien se dirigió a su casa.
Al llegar a su casa, la morocha tiró su mochila a la cama y se acostó en esta boca arriba, minutos después de ver el techo pensando en lo que había pasado ese día, se dirigió al baño, y después de hacer sus necesidades se miró al espejo.
- No te vallas Ana, eres una de mis mejores amigas - Dijo con los ojos inundados de lagrimas - Ahora quien me ayudara con Bernasconi? - Dijo algo divertida con una sonrisa triste y al decir eso, un recuerdo se le vino a la mente.
Flashback.
Las chicas iban caminando, se encontraban en la kermes de la escuela del día 16 de septiembre. La morocha era la que iba al frente, y en eso al voltear al frente, logra observar a Agustín con sus amigos caminando en su dirección, y justamente, el también era el que venía en frente, en eso sintió que alguien la empujó al frente, justo cuando Agus estaba a uno o dos metros de distancia, si, efectivamente, había sido su querida amiga Ana Jara.
- Ay wey - Fue lo único que los dos dijeron.
Ella no logró caerse, solo se tropezó.
Y él, había extendido sus brazos para sujetarla, pero eso no había sido necesario, ya que no había caído.
- Que te pasa? - Le preguntó Carolina a Ana cuando ya estaban lejos de Agus y sus amigos.
- Awww viste lo que hizo? - Preguntó Ana ignorando a su pregunta.
- Ver que? - Preguntó aún algo "enojada".
- No viste como extendió los brazos para agarrarte? Imagina solamente que si te hubieras caído, el te hubiera agarrado de la cintura y tu del cuellos para no caerte, quedando muy cerca del otro, se quedan mirando fijamente y muah... se besan! - Chilló lo último creándose en la mente una escena de una novela romántica.
- Si Ana, sigue soñando - Dijo la chica divertida por lo que había dicho su amiga - Eso nunca pasará - Dijo algo "triste".
Fin del flashback.
Una lágrima salió de su orbita y se deslizó por la mejilla de la chica, y de inmediato la limpió con la manga de su sueter; como extrañaría a esa maldita loca la cual amaba con todo su corazón, de hecho... ella era la que más la apoyaba al respecto sobre ese tema, de hecho, digamos que era "Shipper" de Aguslina, Agus y Caro, shipp que había inventado Oriana un día el año pasado.
De hecho, Ana una vez le contó que había soñado con que Agustín y Caro se besaban en la escuela, pueden creerlo? A lo que ella dijo que era una señal de que ellos terminarían juntos? Por lo que la castaña solo había reído a causa de las fantacías que su amiga se hacia en la cabeza sobre ellos dos; era la que mas los shippeaba.
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MYA♡
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Descifrando miradas [TERMINADA]
Novela JuvenilHISTORIA AGUSLINA. Ambos se conocen desde preescolar, especificamente, desde los cuatro años, todo iba bien, eran compañeros, tal vez hasta amigos, hasta que todo cambia por un mensaje, empiezan las miradas y las confuciones, las cuales Carolina no...