Sinopsis.

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Según lo que he escuchado, de voces ajenas, ser madre es el sueño de toda mujer. Aprender a cuidar a tu hijo con ayuda de tus padres, amigos o familiares junto a tu amado esposo. Trabajar para mantenerse, tener casa propia y ser toda una familia ejemplar.

Ok, pero eso es totalmente falso.

Porque, ¿Que haces cuando tienes diecinueve años, quedas embarazada, tu familia no te apoya, no tienes a nadie más que te sirva de ejemplo, ni siquiera te casas con el padre de tu hijo y viven en pecado, y no saben nada sobre tener niños? Nadie te dice que hacer en ese caso.

¿Pero saben que es más difícil? Ser todo eso, y además, padres primerizos. Es que, si nuestras familias no nos apoyan y nuestros amigos no tienen experiencia con eso, ¿Como vamos a saber que hacer? ¿Como mierda se yo como se pone un pañal? ¿A que edad debo quitarle el pecho?

Ser madre no es un sueño, es una pesadilla, pero no por eso decidí abortar. No lo voy a negar, fue todo un reto, incluso mi novio (el padre del bebé) llegó a perder al bebé, bueno, también fue mi culpa. Pero, en todo caso, también depende de cómo lo veas, en mi ejemplo, yo lo vi como una historia totalmente divertida.

Existen muchas personas que han pasado por esto o que llegarán a pasar por esto, y no sabrán que hacer o como evitarlo, sinceramente, yo tampoco, pero dicen que se aprende de los errores del otro, y yo definitivamente no le deseo a nadie pasar por todos los sustos que yo pase como madre primeriza, así que... Amiga o amigo mío te invito a aprender de mis errores.

Y es por eso que te traigo;

Relatos de una madre primeriza.

Relatos de una madre primeriza - MelizabethDonde viven las historias. Descúbrelo ahora