Emma’s Pov
Abrí la puerta de la pequeña casa a la que llamaba hogar. No era como aquellas con gran sala e inmensas habitaciones. Era pequeña, pero acogedora, era simple, pero reconfortante.
Subí los escalones al segundo piso y me dirigí a mi habitación. Revise el reloj que posaba sobre la mesita de noche a un lado de mi cama y marcaba las diez y media.
Mientras buscaba el móvil en el bolsillo de mi chaqueta para dejarla en el armario, sentí un pedazo de papel dentro, junto al móvil. ¿Yo guarde eso ahí?
Cuando lo saque, me di cuenta de que era una servilleta, una de la cafetería. Con el entrecejo fruncido la desdoble, y una de mis manos llego directamente a mi boca cuando analice lo que había ahí.
Era yo. Yo estaba dibujada en ese pedazo de papel, sentada en la cafetería, mirando a través de la ventana. Mis manos cubrían la taza de café casualmente, mi cabello sin gracia logro verse de alguna manera natural y hermoso, mis ojos aportaban cierto brillo que jamás supe que tenia.
Era lo más hermoso del planeta, hecho por un anónimo.
Ya habían pasado veinte minutos y yo seguía admirando el pequeño dibujo que tenía en mis manos, mientras estaba sentada al borde de la cama.
Aun con todo el tiempo que he admirado aquel dibujo, no podía creer que alguien haya dibujado eso. Era tan natural, pero al mismo tiempo tan irreal.
No me veía distinta, era tan claro como verme en un espejo. Pero la delicadeza de cada rasgo era impresionante. Admiraba el dibujo y al dibujante, aunque no supiese quien era.
Doble la servilleta y la deje a un lado de la lámpara de lava que Niall me había regalado hace algunos meses. Y ahí fue cuando me alarme un poco.
¿Debería contárselo a Niall? Quiero decir, el es mi mejor amigo, pero podría volverse demente si sabe que algún desconocido estaba dibujándome a escondidas. Lo tomaría como acoso y no me dejaría ir sola a ningún lugar sola.
Y después de pensar mientras rodaba de un lado a otro tratando de conciliar el sueño, tome la decisión. No se lo contaría a Niall. Odiaba mentir, pero si él no veía el dibujo, no le estaría mintiendo. ¿Cierto?
Y así, una pequeña servilleta se convirtió en un hermoso tesoro que guardaba en un cofre debajo de la cama. Era extraño, pero era cierto. Me encantaba ese dibujo, y no podía evitarlo.
Pero, enserio, ¿Quién no amaría un retrato de si mismo hecho con tanto amor y delicadeza?
No conocía a la persona que, irónicamente, si me conocía a mí. Pero eso se convertiría en mi nuevo propósito. Era optimista.
La vida me estaba restregando en la cara, que me hace falta conocer a más personas. Y que una de ellas, que al parecer era un anónimo muy apasionado, llegaría a dejarme sin palabras y a llenarme la vida.
Y lo primero ya estaba hecho.
(***)
Harry’s Pov
Era un demente. Estaba nervioso, inquieto y eufórico. Lo que había hecho me dejo desconcertado el momento en que regresé a casa.
¿Le gustará? ¿Pensara que es un lindo detalle? ¿La habré dejado sin aliento? ¿Se habría sentido feliz?
Si se sintió feliz con ese detalle, yo sería feliz el resto del mes. Ese fue el primer paso que de verdad di, darle un pequeño trocito de lo que hacía. Mostrarle lo que ella me motivaba a hacer, aunque no lo supiese.
Cuando comencé a dibujarla no pensaba en ir a hablarle. La dibujaba como siempre hacia cuando ella estaba cerca de mí, la dibujaba por que las palabras no eran suficientes para describir lo que me hacía sentir cuando se sentaba en frente de mí a respirar.
No deje firma. Por favor, ¡mi mano tembló con solo dejar la servilleta en su chaqueta! Dejar ese pequeño misterio en ella se me hizo divertido. Me gustaba pensar que entre más intrigada se encontrara, mas fácil seria llegar a ella.
No se han dicho, ¿Por qué rayos admirar a alguien que no sabe de tu existencia?
Pues, ¿Quién sabe? El sentimiento nace en ti antes de que te des cuenta. De alguna manera, esa persona hace mejorar tu mundo y tu vida de una manera extraña pero hermosa. Sentimientos nunca conocidos llegan a ti de una manera tan inesperada, que te sientes perdido y completamente desconcertado.
Pero lo que yo hice, fue dejarme llevar. Por ella. No me iba a quedar ahí, dibujándola, aunque era lo que más amaba y amo hacer. Iría tras ella, porque seguir mis impulsos era lo que mejor hacia.
Ella obtuvo mi atención desde el primer cruce. Yo captaría la de ella como si fuese la última vez que nos viésemos.
Ella es la primera en adueñarse de mi corazón, y me aseguraría de ser el último en amar desjuiciadamente el suyo.
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Anonymous Love - h.s
Hayran Kurgu«No sé si existe el amor eterno, pero si sé que existe el amor verdadero, porque el mío es uno de esos».