Capitulo 3

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Siguiente a esto la mujer abrió lo que sería un portal, las hojas de los árboles, empezaron a revolotear por todas partes de una forma brusca.

-Formen una fila, de dos. -les informo con frialdad en su voz.

Todos empezaron a formarse, obviamente Harry hizo pareja con el castaño, cuando estuvieron listos, empezaron a avanzar hacia el portal de dos en dos iban desapareciendo de la vista del rizado.

- ¿Esto es seguro? -Harry pregunto mirando a su compañero, sus ojos llenos de preocupación y nerviosismo.

-Tranquilo. -Respondió Liam, tratando de parecer seguro y tranquilo, al ver que restaban dos parejas para su turno, el castaño le dirigió la palabra. -Harry mírame. -el chico le dio una mirada sin brillo alguno, totalmente llena de miedo, prosiguió. -toma mi mano, y no la sueltes, todo va a estar bien, vamos a estar bien, respira y cierra tus ojos, confía en mí, ¿sí? - El ojiverde solo asintió, quedando a cargo de su nuevo amigo.

Posterior a esto sintieron como todo a su alrededor daba vueltas, y un leve dolor de cabeza se hizo presente, seguido de un mareo, y en menos de dos minutos cayeron frente a una gran puerta de metal, de color negro, aproximadamente tres metros de alta y en la parte superior ovalada con unos objetos puntiagudos, parecidos a flechas, apuntando hacia el cielo.

Cuando Harry recupero su estabilidad, Electra ya se encontraba frente a la gran puerta.

-Detrás de esta puerta, se encuentra su futuro, bueno o malo, eso lo decidirán ustedes. -Comento la mujer antes de abrir la puerta, con una facilidad sorprendente.

El rizado no podía creer lo que estaba viendo, era como si existiera otra ciudad justo ahí, habían muchos árboles, y varias construcciones desde edificios hasta casas aparentemente comunes, empezaron a caminar siguiendo a la chica, se dirigieron a una plataforma bastante amplia podía compararla con cuatro campos de futbol juntos, allí los esperaban dos chicos de su edad aproximadamente, llegaron allí y se formaron en una hilera uno al lado del otro, hasta ese momento miro a Liam, que parecía sorprendido, pero de alguna forma acostumbrado o familiarizado.

- ¿Estas bien? -Pregunto el castaño, al sentir la mirada de su compañero.

-Si. -comento cortante.

-Bienvenidos, espero que se sientan bien, supongo. -Hablo el joven de ojos azules que los estaba esperando, mientras alzaba las cejas y mostraba una sonrisa, con cierto toque de burla, en ademan de ironía.

En ese momento Electra llego al lado del ojiazul, y lo beso en frente de todos, mantuvieron una pequeña charla por unos minutos, y volvieron la vista, a los estudiantes.

-Bien, los vamos a repartir en tres grupos, esos serán sus grupos durante el resto del año, ¿entendido? -Esta vez hablo el chico pelinegro.

-Entendido. -Respondieron al unísono.

- ¿Cómo los elegiremos? -Pregunto dirigiéndose a la pareja.

-Yo elegiré mis 10 personas, luego Louis, y las que queden van contigo Zayn. -Se adelantó a decir la chica, los dos jóvenes aceptaron.

-No quiero quedarme con ella, uhg, ojalá quedemos en el mismo grupo. -Le susurro el rizado a su amigo.

-Espero que sí. -Respondió este con simpleza.

-Bien, acabe, me quedo con seis chicas y cuatro chicos, dale Lou, sigues tú. -Hablo la mujer.

-Bueno, yo elijo al chico castaño de ahí. -Soltó Louis señalando a Liam. -Vale, vamos nueve solo falta uno, umm, tú el chico de rizos.

-No bebe, déjale ese desastre a Zayn. -Comento Electra mientras se acercaba al ojiazul, fulminando con la mirada a Harry.

- ¿Qué te pasa? ¿estás bien?, como se te ocurre expresarte así de los demás, -Le reclamo dejándola atrás, acercándose al ruloso que empezaba a sollozar por lo bajo. -Tranquilo, ¿Cómo te llamas?

Deadly RomanceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora