-Discúlpenme chicos, los dejare con Zayn, no me siento bien. –Informo.-No hay problema. –Respondieron al unísono.
El ojiazul se sentía muy avergonzado por lo que le había pasado, mientras caminaba a su cuarto, escuchaba los murmullos y risas, provenientes de todas partes, sentía que las tenía dentro de la cabeza, solo quería dormir, no quería pensar, no quería preocuparse, solo desaparecer, dormir parecía una buena solución.
-Buenas noches, mi nombre es Zayn, y esta vez compartiremos la clase. –Se presentó el pelinegro de forma amable.
Empezó a dar las indicaciones, se sentía un poco incómodo pues un chico de pelo castaño no le quitaba la mirada de encima. Liam.
El tiempo parecía eterno para el pelinegro, pero al fin, se dieron por terminadas las clases, mientras esperaba a que todos salieran, un chico se le acerco.
-Hola, soy Liam. –Murmuro extendiendo su mano.
El moreno quedo bastante confundido, era el chico que lo había incomodado toda la clase, ¿Cómo se atrevía a acercarse a él? Cuando escucho que alguien se aclaraba la garganta, vio que había dejado al castaño con la mano extendida, rápidamente reacciono y lo saludo de manera formal.
-Un gusto conocerte, Liam, pero, ya me tengo que ir, hablamos luego. –Y sin más abandono el lugar.
A él realmente le gustaba conocer nuevos seres, pero nunca trataba de relacionarse muchos con sus estudiantes, pues le parecía incorrecto, pero tampoco los trataría de mala manera.
Había conocido a Louis cuando llego como estudiante, eran compañeros de curso, al principio le pareció una desgracia ese chico era una verdadera molestia, y sus padres mucho peor, a veces creía que de ser posible Ross guardaría a su hijo en una caja de cristal, para que cuidarlo, pero mayormente para controlarlo, para tomar todas las decisiones que fueran necesarias, hasta que vestir, como caminar, literalmente todo.
Obviamente Louis encontró libertad por medio de él, y aunque al principio le incomodo, debía admitir que habían logrado encajar perfectamente, era su complemento, siempre estaban acompañándose en los momentos más difíciles, pero también en los más felices, a veces lo sentía como un hermano, no se había permitido tener otros amigos cercanos, pues sentía que era como faltarle al respeto y cariño que le daba Louis, ellos dos podían contra el mundo y nada contra ellos.
Presencio como su amigo era obligado a estar en esa relación tan forzada, que lamentablemente rápidamente fue muy nombrada, no solo, por los seres de esa academia, la noticia había llegado las academias de Italia y España, era mucha presión para él, entonces encontró una salida cuando empezaron a fumar, se podían desconectar del mundo por un momento, era todo lo que necesitaban, afortunadamente pudieron controlarlo no se convirtió en adicción, y aun lo siguen haciendo, pero con menos frecuencia.
Cuando menos lo notó, ya se encontraba entrando a la habitación del ojiazul.-Hola, ¿Estas mejor? –Pregunto cerrando la puerta.
-Maldita sea, tienes toda la razón Zayn.–Vocifero sentado en la orilla de la cama con las manos en su cabeza, lagrimas bajaban por sus mejillas.
- ¿En qué? Tranquilo, ¿Qué pasa? –Dijo sentándose al lado del chico, recostándolo en su pecho, mientras le abrazaba por la espalda. –Respira, todo va a estar bien.
-Tienes razón en todo, es que… -Consiguió hablar el ojiazul. – ya lo leí todo, ya investigué, Harry puede ser condenado a muerte, por decir mentiras. –Tomo aire aun estando en el pecho del moreno y prosiguió.– No puedo permitir eso, simplemente no.

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Deadly Romance
FanfictionDónde Harry es un principiante en la escuela de vampiros y Louis su instructor