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—¿Estas segura de ésto?.

—Si Estela... T-Tengo que hacerlo.

—Suni, tal vez quieras pensarlo mejor, puedo borrarte a Jungkook y olvidarás que lo amaste, pero... No puedo borrarle la memoria a él.

—¿Por qué?

—Porque ella solo puede borrar la memoria a una persona solo una vez, ya que una segunda vez podría matarlo.—De pronto contestó Taehyung.—Suni, sabes que te amo y que me encanta la idea de que estés conmigo, pero, ¿Tú de verdad deseas esto?.

—Taehyung... No quiero estar con Jungkook, no quiero vivir mi vida con peligros por su culpa, no quiero amarlo, no quiero estar a su lado... Odio estar a su lado. —Suni mintió al respecto, pero no se dio cuenta de un pequeño detalle.

Jungkook estaba justo entrando a la habitación y había escuchado todo, el los miró anonadado y sus ojos estaban acuosos. Suni se congeló al verlo ahí.

—¿Qué estas tratando de hacer?.—Cuestionó él.—¿Y que hace esa perra aquí?. —Apuntó hacia Estela.

—Jungkook...

Mefistofeles se acercó a Suni a paso apresurado, exasperado y a la vez confundido.

—¡Callate!... ¿Crees que así vas a dejar de estar en peligro?...

—Jungkook, por favor dejala.—Suplicó Taehyung tomando su hombro pero este se quitó la mano de encima bruscamente.

—Eres una maldita egoísta Suni.—Dijo Jungkook.—Lo único que he hecho es tratar de protegerte ¿Odias estar a mi lado?... Pues has lo que se te venga en gana, quedate con Taehyung... Pero por favor, te lo suplico... No me borres de tu mente.

Los ojos de Jungkook comenzaron a derramar lágrimas lo cual hacian que fueran más brillosos, su nariz ya estaba roja y sus labios temblaban, verlo en ese estado encogió el corazón de Suni, era verdad, no quería hacerlo, pero si no lo hacía, Jungkook iba a morir, Taehyung sería peligroso y tal vez todo acabaría muy mal.

No habría un futuro, no existiría un Jeon Jungkook y Suni no podía vivir en un mundo donde no existiera él.

—Lo siento mucho Jungkook... Por favor, respeta mi decisión.

Jungkook se dejó caer de rodillas frente a Suni y la abrazó de las piernas con fuerza, comenzó a llorar en ellas, estaba presenciando por primera vez los sollozos de un demonio suplicando piedad, suplicando que Suni no lo olvidará y cada vez hacia más difícil la situación.

—Por favor Suni, no lo hagas, por favor no me olvides, no me borres de tu mente, te lo suplico, no me borres, eres lo único que tengo... Eres la única que me ama, te prometo que voy a protegerte, te prometo que voy a luchar por ti, haré lo que sea para que seas feliz, pero no lo hagas.

—Ya sueltame Jungkook y deja de llorar...

Dijo Suni con la mirada hacia el frente, luchando por no llorar.
Esto sin duda era una total mierda, todo era un total caos, Suni no sabía que hacer, cuando de pronto Jungkook calló dormido en el piso.

—Duerme—Dijo Jimin.

—¿Q-Que pasó?.—Cuestionó Suni.

—He dormido a Jungkook con un viejo encantamiento, despertará en una hora, así que si vas a seguir con esto hazlo ya Suni.—Contestó Jimin.

Suni asintió y tragó saliva, no sin antes mirar a Jungkook ahí dormido por última vez, observó su rostro porque sabía que no lo reconocería más.

—Lo lamento Jungkook.—Susurró ella.

Jin cargó en sus brazos a Jungkook con ayuda de Jimin disponian a llevarlo a su casa.

𝑯𝑶𝑹𝑵𝑺- Jungkook. (+18) TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora