𝐈𝐭 𝐰𝐚𝐬 𝐚𝐥𝐰𝐚𝐲𝐬 𝐲𝐨𝐮| Remus Lupin #2

De vuelta a casa

Seguía media dormida, pero con el ruido que hace Snape es imposible volver a dormir, arrastraba las maletas por el piso, así que solo decidí levantarme.

Tomé una ducha de treinta minutos, lavé mis dientes y me vestí rápidamente para salir a ver que desastre tenia el hombre.

—Sev, ¿Qué mierda haces?

—Los muggles hacen esto cuando... Se van de viaje

—Pero no eres un muggle—reí

—Bien... Da igual, revisa si te falta algo

—No me falta nada, así que ya podemos irnos—di un suspiro

Pensar en Hogwarts revolvía mi estomago de los nervios, ya estábamos a nada de volver, a Severus como siempre no se le nota ninguna pizca de felicidad, normal en él. Desayunamos y revisamos por última vez si algo faltaba, los nervios eran muchos, volver significaba recordar cada parte de mi pasado.

—¿Prefieres irte de manera normal? o... Ya sabes—preguntó Severus

—Solo vámonos

Puse mi mano en su brazo y automáticamente aparecimos en la entrada del castillo, todo se veía igual, era como si nada hubiese cambiado. Severus se quedó viéndome un poco preocupado.

—Voy a casarme con Remus—dije como si nada

—¿Estás segura?—arqueó una ceja

—Lo estoy

—Entonces... Me alegra, Mila

­—Entremos...—dije nerviosa

Caminamos hasta estar dentro del castillo, había niños por el pasillo corriendo y jugando, tal vez era lindo estar aquí de nuevo. Entramos un día después de que dieran la ceremonia, así que no nos perdimos de tanto.

—Iré a hablar con la profesora Mcgonagall—me avisó Severus, antes de dejarme sola en los pasillos

Mientras caminaba recordaba todo lo que había pasado, tantas cosas venían a mi mente, los momentos con Hestia, discusiones con Riddle y bueno, mi padre. Los niños me miraban con extrañeza, perdida en mis pensamientos sin darme cuenta choqué con alguien.

—Mila

—¡Remus!

—¿Qué haces aquí?

—Era una sorpresa, pero ya me viste—rió

—Me alegra que estés aquí, Rem

—Tendrás que aguantarme todos los días linda, digo... Profesora Dumbledore

Te aguantaría todos los días de mi vida

—Hoy Severus me presentará ante los niños, te juro que voy a morir de nervios

—Eres increíble, lo harás bien—se acercó más a mi

—No es un lugar apropiado para que quieras hacerme cochinadas—lo miré a los ojos

—Tal vez podamos vernos por la noche

—Tal vez... Si es que el murciélago no anda por los pasillos

Hablando de Snape, ahí venia caminando hacia nosotros, que aguafiestas es Severus.

—Severus—saludó Rem

—Lupin—respondió sin darle importancia

—Debemos arreglar algunas cosas, vamos a la oficina.... Mila—habló con más seriedad de la normal

—Te veré más tarde Rem, te quiero—me despedí y luego caminé junto a Snape hacia la oficina

De camino a la oficina comencé a recordar cuando estaba espiando a mi padre porque Draco había faltado unos días, tantas cosas pasaron aquí, y no necesariamente malas, estar con Hestia era lo mejor de tener dieciséis. Llegamos rápidamente y Severus abrió la puerta, al entrar vi que todo seguía casi igual.

—¿Qué ocurre?

—Lucius Malfoy volvió a ser parte del consejo escolar—ese nombre me dejó pálida, era como si hubiesen traído un muerto a la vida.

Merlín no

—Hoy se van a reunir todos para conocer a la nueva maestra, Mila

—Severus... No puedo verlo luego de cinco años, eso solo traería problemas

—Lo siento... Pero debes estar presente

—Él piensa que yo estoy muerta—escupí

—Lo tengo claro... Pero debes enfrentar tus problemas

—Bien, voy a estar aquí—me resigné

—Vienen en dos horas

—Hasta dentro de dos horas entonces—antes de abrir la puerta, Severus se adelantó

Salí corriendo de la oficina para buscar a Remus, fui a una de las salas y ahí estaba sentado en la mesa mirando el piso. Entré y cerré la puerta con seguro, me acerqué a él con cuidado.

—¿Qué te dijo Snape?

—Hablemos de eso luego—me acerqué más para besarlo

—Ocurre algo... Estoy seguro de eso—dijo entre besos

—No ocurre nada, Rem

Bajé mi mano hacia su entrepierna y comencé a frotar mi mano, Rem se puso de pie sin dejar de besarme.

—No aquí—murmuró

Me separé de él un poco desanimada, en qué me había metido, ahora debía ver a Lucius Malfoy, mi pasado.

—El consejo viene en dos horas, quieren conocerme

-Malfoy está en el consejo, es eso... ¿No?

—Sí Remus, pero es porque no quiero verlo, no quiero tenerlo presente en mi vida

—Te veo luego, debo dar una clase—se despidió

—Remus...—susurré

Creo que no le agradó para nada el que viera a Lucius de nuevo, a estas alturas de mi vida Lucius solo era un pequeño recuerdo del pasado, un pasado que no me gusta recordar. Habían pasado las dos horas y yo seguía sola en esa aula, indecisa por ir, pero no podía quedar mal con Severus así que me encaminé hacia la oficina, al estar frente a la puerta podía oír unas voces, tenia los nervios a mil, mi estomago se revolvía, sentía como mi presión subía, todo lo que evité estos cinco años fue verlo o que él supiera de mi, pero aquí estoy.

Del otro lado de la puerta está él, el hombre que fue mi primer amor estaba detrás de una maldita puerta.  

¿Qué harían ustedes si se reencuentran con alguien luego de tanto tiempo?:00

Yo me pondría igual o peor que Mila sinceramente.