51 | Mami

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SeoHo llegó corriendo a la biblioteca de su casa, sacando una caja con algunas hojas y otras cosas.

Hace poco más de un año, y antes de que llegara HwanWoong, el adolescente había sufrido una lesión en su rodilla donde, al tiempo que estuvo en el hospital, pudo aprender un poco de la enfermedad que padecía DongYoung. Después de preguntar y preguntar, e investigar poco más, Ilegó a la conclusión de que su mami no había muerto por la enfermedad que tenía; debía haber otra cosa.

Sin embargo, SeoHo aún era muy joven para entender muchas cosas, aunque sí había un cerebrito en la casa, y ese era GeonHak.

— Ya estoy aquí. ¿Qué quieres? —preguntó, GeonHak, tomando asiento frente él.— Y rápido porque no he terminado mi regalo para MiYeon y hoy voy a su casa para ir por un helado.

— "Que bueno verte, hermanito, te quiero mucho y es un placer ayudarte." —dijo, SeoHo, con un tono de sarcasmo.— Algo así no vendría mal, ¿sabes?

— Que desgracia verte, hermanote. Realmente no quería venir, pero, si no lo hacía, me acusarías con HwanWoong. Además, me gusta el chisme, así que dime qué quieres. —respondió con un tono amable.

— Supongo que eso fue más amable. —dijo pensativo.

— Bueno, ¿qué quieres? —preguntó, el menor de ambos.— Oye, estos son los estudios de mami.

— Pues de eso quiero hablar. —respondió.

GeonHak vió que habían muchas hojas más y algunos libros, sin duda no le daría tiempo para su cita.

— "MiYeon, ¿te importa si vamos otro día por el helado? Acaba de pasar algo, nada grave, pero estaré ocupado." —dijo enviando un audio.— ¿Qué más tienes?

— Me encontré con su expediente en los cajones de papá y ya llamé a JeongIn para que nos explique... Bueno... Que él haga todo. Le dije a papá que venía por una tarea de biología, así que no habrá problema. —dijo, SeoHo, enseñándole los mensajes.

— Pues-... —tocaron la puerta.— Debe ser él. Yo voy.

( . . . )

Por la tarde, YoungJo subió al tercer piso, entrando en la oficina de DongYoung.

— ¿Por qué te fuiste? —preguntó en un susurro y tomando una foto donde estaban juntos.— No sabes la falta que me haces... Ya no sé qué estoy haciendo con mi vida...

Tomó algunas fotos y empezó a limpiarlas con su misma camisa, para después acomodarlas.

Se llevó una foto con él, tomando asiento al escritorio mientras veía la foto.

— Estaremos juntos toda la eternidad. —DongYoung sonrió, besando su mejilla.

— Nada me haría más feliz que eso. —respondió, YoungJo, abrazándolo.

YoungJo se hundía en el alcohol mientras millones de recuerdos venían a su mente.

La vida le quitó al amor de su vida injustamente, tenían tantos planes, tantas promesas y cosas que hacer.

— No, señor juez, quiero que se adelante directamente al "puede besar al novio" porque ya no aguanto ni un sólo segundo más sin ser el esposo de este maravilloso ser. —dijo, YoungJo, tomando sus manos.

— Señor, no podemos-...

— Si usted no puede, entonces yo lo haré. —dijo, DongYoung, con gran emoción.— Kim YoungJo y Kim DongYoung, nos declaro unidos en matrimonio... Y... En realidad no sé qué estás esperando para besarme. —dijo acercándose a él.

no te acerques a papá. ㅡ youngwoongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora