12 | Vuelve

89 23 2
                                    

( . . . )

"Buenos días, mis niños.

De verdad siento mucho no haberme despedido de ustedes, pero era muy tarde cuándo me marché.

Por favor, no estén tristes.

Fue una decisión algo precipitada, pero entiendan, esto tampoco es fácil para mí. Hay una situación que no me deja quedarme, algo que debo arreglar.

No quiero que lloren por mí, voy a estar bien y ustedes también lo estarán. Quiero que sigan siendo los hermosos niños que conocí, que sonrían todos los días, que sigan trayendo esas boletas con buenas notas.

SeoHo, tú eres el más grande de tus hermanos, cuídalos mucho y cuídate a ti también. Sigue jugando, porque eres muy bueno en eso, cariño.

GeonHak, ¿recuerdas la cajita que te regalé? Cada vez que tengas un mal sueño, escucha su melodía, eso siempre me tranquilizaba a mí.

KiWook, mi niño. Por favor, sigue con tu terapia; yo sé que muy pronto vas a volvera hablar, tienes que hacerlo, puedes hacerlo, mi niño.

KeonHee, vi tu dibujo antes de irme, y no hay nada que perdonar. Por favor, sigue siendo un buen niño y sigue dibujando, dibujas muy lindo.

DongJu, no comas muchos dulces, bebé. Come todo lo que te dé YeonJun y pórtate bien con tus hermanos y tu padre.

Jamás olviden que los quiero mucho, con todo mi ser.

Espero volver a verlos algún día.

Atentamente,
HwanWoong"

( . . . )

Los niños se empezaron a mirar entre ellos.

— Él... Se fue... —sollozó, el niño más pequeño.

KiWook se fue corriendo a su habitación.

HwanWoong no se podía ir, él se lo prometió, le prometió que siempre estaría con él

( . . . )

HwanWoong despertó casi a medio día.

Se había quedado con un viejo amigo, KiHyun.

— Te juro que tengo ganas de ir con él y... ¡Agh! —gritó, Yoo, molesto en cuanto Yeo le contó todo.

— Tiene razón... Era mejor que me fuera. Si YoungJo lo descubría después... —HwanWoong cubrió su rostro.

— HwanWoong, podías explicarle las cosas a YoungJo. —dijo, KiHyun, mirándolo.

— Yo lo conozco, él me hubiera corrido en cuánto se enterara. —dijo avergonzado.— Mira, ya no me digas nada, necesito ir a buscar un nuevo empleo. —dijo levantándose.

Su teléfono sonó. Era Kim, otra vez.

LLAMADA:

YJ: HwanWoong, por favor, necesito hablar contigo.

HW: Lo siento, señor, pero yo ya tomé mi decisión.

YJ: Te ofrezco el doble, si así van a ser felices mis hijos, te
doy lo que me pidas.

HW: ...

YJ: ¿Y bien?

HW: ... No puedo...

FIN DE LA LLAMADA.

— ¿Te das cuenta de que esos niños no van a estar bien sin ti, verdad? —dijo.— Ni siquiera les dijiste adiós.

— Les dejé una nota.

— No es lo mismo. El más pequeño te va a intentar buscar. El más grande tal vez incluso hasta se atreva a salir a buscarte. —dijo mirándolo.

— Son unos niños. En menos de una semana se van a olvidar de mí y tal vez ya tengan otro niñero. —dijo caminando a la puerta.

( . . . )

Puede que KiHyun no estaba tan equivocado.

Una semana después de que se fue, SeoHo no dejó de buscarlo en redes sociales junto a GeonHak.

KeonHee y DongJu le habían pedido a SooBin que los llevara a pasear y, aunque lo buscaron, no lo encontraron.

Así mismo; tres personas habían ido para trabajar cómo sus niñeros, pero eran groseros y desobedientes con ellos. Tanto, que en un día se iban. A YoungJo le empezaba a molestar la situación.

— ¡Queremos a HwanWoong! —gritó, KeonHee.

— ¡No queremos otro niñero que no sea él! —gritó, GeonHak.

— No puedo hacer nada, ¿de acuerdo? —habló, el mayor.— HwanWoong renunció, yo no puedo obligarlo a volver.

Los cinco le miraron enojados.

— Mejor regresa a tu trabajo, ¿no se te hace tarde? —preguntó, SeoHo.

YoungJo soltó un suspiro pesado.— Regresaré por la noche. —dijo tomando sus cosas.

Los niños lo ignoraron y se fueron a sus habitaciones.

A la mañana siguiente, faltaba un niño.

no te acerques a papá. ㅡ youngwoongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora