— ¿Te podemos ayudar? —preguntó, GeonHak, acercándose a ver lo que HwanWoong hacía en su computadora.
— ¿Terminaron su tarea? —preguntó viendo a los cinco que, formados en fila, traían algunas hojas de papel, colores, y palitos de madera. SeoHo y GeonHak traían una computadora y sus tabletas.
— DongJu no. —respondió, KeonHee, señalando a su hermano.
HwanWoong se cruzó de brazos, dándole una mirada condicional.
— Chismoso. —susurró, el niño pequeño.— Igual no sé leer. Yo hago mi tarea, te hago compañía, y mis hermanos te ayudan. —propuso mostrando su libro de actividades que traía en manos junto a sus colores.
HwanWoong soltó una pequeña risa, viéndolos; sí que estaban dispuestos a ayudarle.
— Si nos dices que no, igual nos vamos a quedar. —dijo, KiWook, acomodando el espacio donde él estaría.
— Bien. —respondió, HwanWoong.— Pero sólo Honnie y Hakki pueden ayudarme y yo les daré las notas. —dijo condicional.
— ¿Por qué nosotros no? —preguntó, DongJu, en desacuerdo.
— Tú no porque no has hecho tu tarea y ustedes dos son muy pequeños para entender esto. Así que ustedes pueden hacer... Dibujos, muchos dibujos para mí. —dijo dándoles su teléfono para que pudieran buscar algo que dibujar.
— ¿Y si mejor hacemos algo para tu bebé? —preguntó, KeonHee.
— Me encantaría que mi bebé tuviera algo de cinco niños maravillosos a los que amo tanto. —dijo, HwanWoong, con una sonrisa y pegando una pegatina en la frente de KeonHee.
( . . . )
— Señor, su abogado está aquí. —indicó, la secretaria de Kim.
— Que pase. —respondió, Kim, volteando a verla.
El abogado entró.
— ¿Cómo van los trámites de mi divorcio? —preguntó, YoungJo, realmente era en lo único que pensaba.
— No te puedes divorciar. —respondió dándole algunos papeles.
YoungJo los tomó con confusión y empezó a leerlos.
— Porque hace dos semanas, el señor SangYeon se divorció de ti. —respondió.— Esta mañana me visitó su abogado con los papeles correspondientes al divorcio y aquí están sus condiciones, sólo falta que firmes estas.
— Esto es demasiado. —dijo, YoungJo, viendo la cantidad que le pedía.
— Es poco si agregas que indicó que no deberás algún tipo de indemnización a sus padres por el divorcio, si le dabas esa cantidad. —señaló.
— Me va a dejar en la ruina si no lo hago. —dijo soltando un suspiro.— Pero sigue siendo demasiado. —YoungJo se quedó en silencio durante un momento mientras seguía leyendo.— ¿Dónde está?
— Te está esperando afuera, junto a su abogado. —respondió.
Kim llamó a su secretaria, indicando que los dejara pasar y que cancelara todos sus compromisos para las siguientes horas. Esto sería algo largo.
— ¡¿No es lo que quieres?! ¡El divorcio! —gritó, SangYeon, levantándose de su lugar.
— Es lo que quiero, pero me pides demasiado. —respondió, Kim, señalando los papeles.— Relájate, siéntate, y hablemos bien de esto. Sabes que no estás en condiciones para ponerte así. —intentaba calmarlo.
— Pues esto es lo que yo te pido, ¡y me lo vas a dar si no quieres que te quite todo derecho sobre mi hijo y que no puedas verlo! —gritó dándole un golpea la mesa.
— ¡Silencio, ambos! —gritó, el abogado de SangYeon, intentando calmarlos.
— ¡Tú no puedes hacer eso! —gritó, YoungJo, levantándose también.— ¡Es mi hijo y tengo derecho sobre él!
— ¡Pues yo soy-... ! —SangYeon empezó a sentir un horrible dolor en su vientre.
Su bebé estaba por nacer.
( . . . )
— Señor... —llamó, HwanWoong, llegando a su lado.
Kim levantó la mirada.
— ¿Qué haces aquí? —preguntó, YoungJo, sorprendido.
— SooBin me dijo que usted lo había llamado diciendo que su hijo estaba por nacer. Me dijo que estaba solo. HaRin me trajo. —dijo con una sonrisa.
Kim le dedicó una cálida sonrisa y le ofreció asiento frente a él.
— ¿Ha sabido algo ya? —preguntó, HwanWoong.
— Nada desde que entró. —respondió soltando un suspiro.— Siento que ya pasó una eternidad...
— Bueno, es normal, está ansioso. —respondió, HwanWoong, soltando una corta risa.— Supongo... Que estaría igual si estuviera en su situación. —HwanWoong sacó su teléfono y le mostró algunas imágenes.— Sus hijos también están muy emocionados por su nuevo hermanito... O hermanita, no sé lo que será.
HwanWoong se levantó y se cambió a un lugar a su lado, para que viera mejor las imágenes.
Los niños también habían hecho varios regalos pequeños para su hermanito, desde dibujos hasta figuras de papel, y algunas cositas más que brillaban o hacían algún sonido.
— ¿Ya pensó en un nombre? —preguntó mientras le mostraba las imágenes.
— Aún no. —respondió con una sonrisa mientras veía las imágenes.— Tampoco sé si será niño o niña.
— Cuando estaba esperando a mi bebé, todas las tardes me sentaba a la ventana y escribía tantos nombres cómo se me ocurriera. Me imaginaba cómo sería; sus manitas... Sus ojitos. —HwanWoong sonrió con melancolía.— Pero cuando me enteré que sería niño, tenía una visión más clara de cómo sería. Compré muchas cosas sólo para él. Incluso le hice su propia habitación, la pinté cómo creí que más le gustaría. Sólo contaba los días para que él llegara, para que lo tuviera entre mis brazos y... Entonces... —la emoción de Yeo se desvaneció, recordando el accidente.
YoungJo tomó su mano con dulzura, envolviéndola con ambas manos suyas.
— Si yo me hubiera ido del lado de ese hombre... —volteó a verlo.— Él estaría conmigo... Fue mi culpa que me lo quitaran... —susurró.
— No, no, no, nada de eso. —dijo, Kim, dándole un abrazo.— No fue tu culpa lo que sucedió. Lo que te hizo no tiene nombre, tenías miedo, no sabías qué hacer.
HwanWoong finalmente le correspondió al abrazo.
YoungJo tomó el mentón del contrario y lo levantó
ligeramente.— Te juro que de mi cuenta corre que tú y tu hijo vuelvan a estar juntos. Te prometo que volverán a estar juntos. —dijo, Kim, acercó su dedo pulgar a la mejilla del más bajo y empezó a limpiar sus lágrimas.
Yeo le sonrió ligeramente, tomando su mano.
Estaban tan cerca uno del otro. Es tan lindo ese momento para ambos.
YoungJo no lo pensó dos veces y se acercó lentamente a los labios de HwanWoong, apenas rozándolos. HwanWoong cerró los ojos ligeramente y se abrazó al cuello de YoungJo, juntando finalmente sus labios en un fugaz beso tan necesitado y deseado por ambos.
Poco le importaba a HwanWoong si más tarde se arrepentía. Ese beso era todo lo que ambos deseaban, la única forma de gritarse que se amaban sin necesidad de palabras que, por miedo, no decían.
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no te acerques a papá. ㅡ youngwoong
Fanfiction🎐 | ❛ No vamos a dejar que reemplaces a omma. ❜ ❲ 🧧 ❳ ───────────╮ 𝘆𝗼𝘂𝗻𝗴𝘄𝗼𝗼𝗻𝗴 ! adaptación. 𝗿𝗼𝗺𝗮𝗻𝗰𝗲, 𝗱𝗿𝗮𝗺𝗮, 𝘁𝗿𝗮𝗴𝗲𝗱𝘆, 𝗺-𝗽𝗿𝗲𝗴 : © 𝗖𝗵𝗮𝗲𝗟𝗿𝗱𝟮𝟭 . ──...