GATO MALO. ➸taekook

¡Jungkook eres muy bonito!

Taehyung se despertó esta vez por culpa de la cola de Jungkook, que estaba sobre su cara, picándole la nariz y cubriéndole los ojos; además también del sonido de la puerta siendo tocada. 

A regañadientes, apartó la cola del híbrido de su cara haciéndola a un lado, y se levantó de la cama. Miró al menor dormido con sus pies donde debería ir su cabeza. Se levantó, soltando maldiciones acerca de qué clase de persona desconsiderada hacía visita un domingo a la mañana, y también de cualquier cosa que se le ocurriera solo porque ya no estaba dormido.

—Buenos días, Taehyung... —Jimin y Namjoon entraron al departamento, dejando al peliazul adormilado aún en la puerta, demasiado lento— Te ves tan radiante en las mañanas.

Taehyung no contestó porque no estaba prestando atención, y en su mente aún estaba soñando con una quinta pata en un burro, o algo así. 

—¿Jungkook aún no despierta? —Namjoon preguntó curioso.

El de cabellos teñidos cerró la puerta y se estiró, miró entonces a Namjoon, que tenía en sus manos una serie de libros o revistas.

—No... Sigue dormido. —contestó tallando sus ojos.

Si no fuera domingo por la mañana y las nueve, ya les estaría reclamando su presencia, pero ahora mismo no tenía muchos ánimos para pelear, solo quería caer muerto.

—Qué extraño, siempre se levanta muy temprano... —comentó el más alto.

Jimin caminó hasta la cocina y Taehyung lo vio revisar entre las alacenas y sacar cosas.

—Pues ha dormido muy bien todo este tiempo, a mi parecer. —le contestó, recordando la ocasión en la que despertó con el híbrido enroscado a su cuerpo, y ahora, que había despertado con su cola en la cara. 

—Debe dormir mejor ahora que tiene compañía. —comentó Jimin desde la cocina. 

Taehyung ya podía percibir el olor a café que su amigo estaba preparando. Caminó hasta sentarse en una de las sillas del comedor, y Namjoon se sentó a su lado.

—Te he traído unas cuantas cosas que te servirán. —puso sobre la mesa la pila de papeles que había estado cargando.

El peliazul frunció el ceño y se recargó en su mano, observando cómo Namjoon revisaba las cosas esas.

—¿Son revistas porno? —soltó un bostezo.

—¿De qué te serviría eso? —Jimin llegó, con dos tazas de café. Una se la dio a Namjoon y la otra la dejó frente a su amigo.

El aludido estuvo a punto de responder la pregunta, pero el mayor de ellos se le adelantó.

—Ciertamente eso no me interesa. Ahora, esto es muy importante y más vale que lo tomes seriamente, más por tu bien que por el de Jungkook.

—Sí, ajá, te escucho —le dio un sorbo a su café, viendo cómo Namjoon tomaba una revista y se la mostraba. En la portada estaba la foto de un gato de color gris, y el encabezado decía "mundo felino". Tomó la revista con una mueca—. ¿Son revistas porno para gatos? 

—No imbécil, es información que tienes que tener para poder cuidar de Jungkook, en caso de emergencia y para que estés informado —intervino Jimin, tomando otra revista—. ¿Ves? Dice: "¿pueden llevarse gatos y perros?", "¿por qué mi gato ataca a las visitas?"

—"10 cosas que pueden matar a tu gato", "¿cómo tratar la tuleramia en gatos", también es importante "¿cómo saber si mi gato es alérgico a las pulgas" — Namjoon siguió a su primo, abriendo y pasando páginas de la revista, donde Taehyung solo podía ver fotos de gatos—. No todo es tan sencillo.

—En especial porque Jungkook es un híbrido, esto es solo lo básico porque no hay muchas revistas sobre híbridos... —el más bajo dejó la revista y miró a su amigo, que los había estado mirando sin saber qué pasaba.

—De acuerdo... —el peliazul abrió la revista que tenía en sus manos y leyó el índice— Dice... "¿cómo tratar el embarazo psicológico en gatas?", "¿cuánto dura el celo de un gato?", "cómo tratar a un gato en celo" —leyó y luego miró a Namjoon, curioso—. ¿Qué me quieren decir, eh?

—Obviamente no lo que piensas, depravado... —rodó los ojos ante la risa de este— Ese tema en especial, es de hecho el más importante; también el de la alergia alimentaria, así que deberías leerlos.

—¿Por qué? —Taehyung dio vueltas a las hojas de la revista, de nuevo encontrándose con fotos de más gatos.

—Porque en los híbridos es más compleja la alimentación y la reproducción, así que debes estar informado. —habló Namjoon. 

El de cabellos teñidos hizo una mueca y dejó la revista.

—Pero no quiero leer... —se quejó dándole un sorbo a su café. Luego miró detrás de Namjoon cómo Jungkook aparecía tallando sus ojos por el pasillo

—Buenos días. —saludó el híbrido. Se acercó hasta Namjoon, parándose detrás de él, con una sonrisa.

—Buenos días, Jungkook —Jimin sonrió, se levantó de su silla y sacó algo del bolsillo de su chaqueta—. Te traje las cosas que pediste, ten. —le dio un papel, un pequeño frasco que parecía ser medicina o algún jarabe, y un cepillo.

El menor sonrió, era todo lo que necesitaba.

—Gracias. —tomó el pedazo de papel y lo revisó, soltó un suspiro.

—Oye tú, ¿qué es eso? —Taehyung preguntó señalando el frasco. Tomó una revista y la abrió— ¿Tienes panleucopenia, rinotraqueítis o calicivirosis? —leyó.

Jungkook negó.

—Este es mi calendario —señaló el pedacito de papel que tenía en manos—, este jarabe es para el malestar —se refirió ahora al frasco que tenía—, y el cepillo es porque me gusta cepillarme.

Taehyung asintió, sin tener todas sus dudas aclaradas.

—Soy un gato muy sano. —habló nuevamente.

—Y muy feo… —Jimin golpeó a Taehyung en la nuca, recibiendo un quejido por parte de este— ¡Los golpes en la mañana duelen más, cachetón!

—Jungkook no es feo —le remarcó—. Dile bonito —exigió. El peliazul bufó y negó—. ¡Dile a Jungkook que es bonito!

—No le diré que es bonito. —respondió entre dientes, sintiendo la mirada del híbrido sobre él.

—Ahora mismo puedo mandar un mensaje a Hoseok diciéndole que quieres salir con él, y lo tendrás persiguiéndote todo el mes...

—¡Jungkook eres muy bonito! —se rindió, haciendo sonreír a Jimin.

Jungkook también sonrió, porque sabía que Taehyung no pensaba que era feo aunque lo dijera.