Beso

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Su grito probablemente se escuchó por todo el edificio, pero seguramente a nadie de los que vivían ahí le importaría y no tocarían a la puerta para ver si algo malo le había pasado a su vecino.

La persona que estaba sentada en la cama de Taehyung se arrojó velozmente al suelo gritando también, escondiéndose detrás asustado por el grito y la intromisión tan repentina del chico de cabello azul.

Oh no, Jimin y Namjoon no le dijeron nada acerca de un ruidoso chico con complejo de pitufo cuando le prometieron que ya no estaría solo. Ahora estaba asustado y su corazón estaba palpitando muy rápido.

—¡¿Quién eres?! ¡Llamaré a la policía! —amenazó Taehyung tomado del marco de la puerta como si su vida dependiera de ello, bastante patético para alguien tan masculino.

No se atrevía a moverse porque no quería perder de vista al intruso, estaba también asustado y preguntándose cómo había entrado a su departamento sin que alguien lo viera.

—¡No! ¡No quiero que me lleven! —el intruso contestó rápidamente sin asomarse ni un poco, estaba asustado de Taehyung, así como Taehyung de él—. ¡No voy a hacerte nada!

—¡¿Qué haces en mi departamento?! ¿viniste a robar, no? ¡Pues no tengo nada, eh! —gritó. Aún tenía en sus manos su celular, así que sin dudarlo y con el corazón a mil, empezó a marcar a emergencias.

—¡No llames a la policía! —el intruso salió de un brinco de la cama y se aproximó a Taehyung.

El mayor casi muere de la impresión, y soltó otro grito desgarrador. Sin controlarlo dejó caer su celular al suelo, sintiendo su corazón romperse.

—¡Mi celular, estúpido, es lo único que tengo! —el desconocido se arrastró por el suelo hasta atrapar entre sus manos el aparato, lejos de su alcance. Ambos se miraron cuando el intruso se levantó— ¿Q-qué? —se quedó con la boca abierta al ver al desconocido de pie frente a él.

El chico iba a hablar pero lo último que obtuvo de Taehyung fue verlo caer al suelo desmayado. 

Emitió un pequeño grito, ahora sí estaba asustado.

—Ay no, ya lo maté... —murmuró asustado, mirando al peliazul en el suelo—. ¿Qué hago... Qué hago? —empezó a moverse nervioso en su lugar, con sus manos y el celular del mayor en su pecho— ¡Ah! Llamaré a Jimin, sí...

El chico miró la pantalla del celular y recordó los dígitos que Jimin le hizo aprenderse de memoria en caso de alguna emergencia. Deseó que Taehyung desmayado contara como una emergencia, porque sino, no sabía qué más hacer.

—¿Tae? —Jimin contestó después de unos segundos.

—¡Maté a Taehyung! ¡Apenas me vio, cayó al suelo inconsciente! ¡No sé qué hacer, estoy muy asustado! ¡Yo no quería hacerle daño, lo juro! ¡Soy un gato malo!

—¡Kookie, tranquilo! —el mencionado talló su nariz que comenzó a darle picazón por sus ganas de llorar—. No eres un gato malo.

—Pero lo maté...

—Taehyung no está muerto, es normal, siempre le pasa.

Jungkook aflojó un poco la fuerza con la que sostenía el celular sobre su oreja, sintiéndose un poco aliviado por las palabras de Jimin. Miró a Taehyung, tirado en el suelo. ¿Cómo podía eso ser normal?

—¿Estás seguro...?

Él no lo estaba, y si tenía que regresar de donde vino por haber matado a Taehyung, no había problema, con tal de que no se lo llevara la policía o algo así.

—Claro, le pasa en la calle, en el trabajo, en el baño, siempre que algo lo asusta o impresiona.

—¿No es un problema médico? —preguntó curioso, no le parecía muy normal desmayarse por cualquier sobresalto. Además, él solo lo miró, no es como si fuera tan desagradable a la vista para asustarlo, ni tan bonito como para desmayarlo.

—Probablemente, pero es pobre y no va al doctor.

—Ah... —asintió ante la explicación— ¿Y qué hago entonces?

—Si está en el suelo solo súbelo a la cama, en un rato despertará.

—Okay, ¿eso es todo? —se escuchó más seguro ahora.

—Uhm, dale un vaso de agua y un beso.

—De acuerdo, lo haré. Gracias Jimin. —sonrió a pesar de que el otro no lo miraba.

—No hay de qué, cuidalo bien, demonio.













GATO MALO. ➸taekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora