Cuentos de una seductora[Libro 1] Y Cuentos De Una Hechicera[Libro 2]

Capitulo 68

"¿Cuánto tiempo van a durar las conversaciones de paz?" le preguntó un hombre al demonio con cola que estaba junto a él.

"Escuché que podría ser otro mes. Seguro que está tenso, ¿no?

"Las líneas de sangre de los demonios se han debilitado a lo largo de los años. No hay nuevos demonios, mezclados con demasiada sangre humana ... ya ves ... No pueden permitirse una guerra. Son demasiado débiles ahora ".

"Bueno, escuché que el rey demonio no luchará en el frente. No tiene un heredero, así que si moría, las tierras demoníacas caerían en el caos ".

"Los humanos probablemente están tratando de explotar esto".

"Uno de los nobles humanos proviene de un país que fue destruido por un demonio. Está aquí por venganza ".

"El demonio y los nobles humanos en realidad están peleando por una mujer. Dicen que su belleza fue suficiente para caer reinos ... "

"Los monstruos últimamente están actuando de manera extraña. Se han estado reuniendo y luchando en mayor número ... "

"Las mujeres son secuestradas todos los días, dicen que es demasiado peligroso irse. Los agricultores vienen a la ciudad por seguridad ...

"Hay un problema con las líneas de sangre de los demonios ..."

"Hay un problema con la magia ..."

"El laberinto está consumiendo más maná últimamente ..."

"Los monstruos son más violentos últimamente ..."

Mientras caminaba por las calles de la ciudad, escuché varios rumores a mi alrededor. Algunos eran sobre demonios. Algunos eran sobre los humanos. Algunos eran, sorprendentemente, sobre mí. Era un momento tenso en este momento, y como el semen, los rumores terminaron donde menos esperaba. Los que tenían algo que ver conmigo eran los más difíciles de escuchar. Simplemente mantuve mi capucha baja y rápidamente me alejé de los que hablaban.

Mi único consuelo era que había tantos rumores, que por cada rumor que era correcto, había un rumor que refutaba todo eso. Los que tocaron el laberinto y mi ejército que se estaba formando lentamente fueron los que me dejaron más cauteloso. ¿Me estaba moviendo demasiado rápido? No, no tuve más remedio que seguir construyendo. Afortunadamente, esos solo inventaron algunos de los rumores, y por lo que pude decir, los rumores de que el laberinto se volvía loco o que los monstruos se volvían anormalmente amenazantes eran comunes sin importar la hora que fuera.

La mayoría de la gente parecía consolarse con el hecho de que los dos ejércitos estuvieran presentes. Bueno, se sintieron tan cómodos con eso como pudieron. En pocas palabras, cualquier grupo creciente de monstruos sería incapaz de esconderse de los humanos y demonios, y sería fácilmente derribado por ellos. Al menos, esa declaración parecía acompañar siempre a quienes la hicieron. Me hizo sentir feliz de que nadie sintiera la necesidad de investigarlo.

Por lo tanto, la mayoría de los rumores se centraron en las conversaciones de paz. Ya han estado sucediendo durante casi un mes, y parecía que se llevarían a cabo durante toda la primavera y tal vez incluso hasta el verano. Cuando pensé que este tipo de charla terminaría en una semana, resultó que ese no era el caso cuando se trataba de demonios y humanos. Cuando consideré que cada oferta debía ser revisada por algún consejo y enviada al extranjero a las tierras humanas, recordé lo lentas que eran las cosas en el pasado. Un mes parecía optimista según algunas estimaciones. No importaba, eso me venía bien. Me dio más tiempo para prepararme.