Habíamos llegado ya al Instituto, mis hermanos conversaban felices al igual que todos los demás, pero yo estaba metida en mis pensamientos, aún no lograba comprender la investigación de ayer, por lo que estaba viendo a un punto fijo.
Estaba viendo a la nada, en dirección al bosque, pero no había nada, hasta que los Cullen llegaron, Edward y Jasper me miran serios, como si supieran de lo que pienso apesar de que me confesaron de que no ven y sienten nada emanar de mi.
Camino en dirección a ellos aún sin mirarlos, estos se hacen un poco de lado y paso en medio de ellos, estos miran hacia donde voy para después empezar a seguirme.
Todos los demás entraron a clase, sólo las miradas del clan Ferrero y del clan Cullen se hacían presentes en ellos tres, sin decir nada entraron también al Instituto.
Endra se adentro más al bosque, sabiendo que Edward y Jasper la seguían un poco más atrás de lo que ella avanzaba, a una considerable distancia, se detuvo, en medio de muchos árboles, unos caídos, alrededor una neblina que ocultaba más haya a distancia.
-Son demasiado rápidos- empezó hablar sin voltear- su piel es palida, y es helada- se escuchaban los pasos, acercandose- sus ojos cambian de color, y aveces hablan, como si fueran de otra época- se dejaron de escuchar los pasos, sólo el canto de unos pajaros- no comen ni beben nada- sintió dos presencias detrás de ella, pero no volteó- que edad tienen.
-17- los dos contestaron viéndola fijamente.
-Durante cuanto tiempo?- el miento de los dos en su cuello le erizo la piel.
-Casi un siglo- estos coincidían con sus palabras, hablaban al mismo tiempo y sin confundirse verbalmente como gramaticalmente.
-Se lo que son- aún sin voltearlos a ver, ella miraba al frente a veces bajaba la cabeza.
-Dilo- la voz de Jasper aún más cerca sólo hacían que se pusiera más nerviosa.
-En voz alta- ahora la voz de Edward, su aliento cerca de su cuello fue la que la puso aún más nerviosa.
-Dilo!- alzaron la voz, no tan alta para decir que gritaron pero si para que ella mirara esta vez sólo al frente, sin bajar la cabeza, hasta si no estuviera en esa situación diri a que sono más como una orden.
-Vampiros - solito por fin, dejando escapar con sus palabras un suspiro.
-Y te asusta?- sonaba como pregunta, pero con afirmación a la vez, la voz de Edward era la que más agresiva sonaba, Jasper alzaba la voz pero se mantenía controlado.
