Amor En Invierno [Geldris] [Libro 1]

Capitulo XX

Gelda entro llorando al departamento de Orlondi, Melascula la acompañaba hasta el sofá abrazándola por la cintura. Orlondi cerraba la puerta después de entrar.

Suspiro.

Su hermana se había acercado a él aguantando las lágrimas y le pidió que la sacara de la gala, tuvo que avisarle a su padre que Gelda no se sentía bien que la llevaría a su departamento, que luego volvería. Melascula los acompaño para ser de apoyo para la rubia.

Durante el viaje en el auto, Gelda les conto lo que habia sucedido.

Zeldris se había enterado de que Gelda era una Salvatorre y que el pelinegro tenía dudas acerca de su relación.

¿Por qué Zeldris y Gelda eran tan dramáticos?

-No lo entiendo, ustedes se aman ¿Por qué no pueden ser personas normales y están juntos sin armar tanto escándalo?-dijo Orlondi acercándose hacia las chicas.

Gelda sollozo aún más alto y Melascula le dio una mirada furiosa, si las miradas matasen. El estaría dos metros bajo tierra en ese momento.

-Yo lo amo pero no entiendo que sucede.-dijo Gelda entre lágrimas.

-Tranquila, tal vez no se explicó bien.-dijo Melascula dándole un pañuelo a la rubia.

Gelda lo tomo y se limpió sus lágrimas pero mancho el pañuelo con su maquillaje.

-Lo siento, manche tu pañuelo.-

-No importa.-le dijo la de pelos lavanda.

-Gelda, si las cosas serán así. Mejor sepárate de Zeldris.-le dijo su hermana, sinceramente estaba algo harto por todos los dramas de la pareja.

-Te lo juro, esta vez yo no hice nada. Él dijo que me daría tiempo para hablar pero... no sé qué ocurrió.-dijo Gelda entre lágrimas.

-Mejor tranquilízate, ¿quieres dormir aquí por esta noche?-le pregunto Orlondi. Por el momento era mejor que no viera a Zeldris, primero debía calmarse.

Gelda asintió.

-Bien, yo tengo que volver a la gala asi que volveré pasada la una asi que no me esperes despierta.-dijo Orlondi y luego miro a Melascula-¿Te quedas a hacerle compañía?-

-Sí, yo me quedo.-dijo.

-Bien, nos vemos más tarde.-dijo Orlondi y se fue del departamento.

-Ay no, no tengo ropa que ponerme.-dijo Gelda-.quiero quitarme esto-

-Mira, cerca hay una tienda de ropa. Voy a ir a comprarte algo y mientras te tomas una ducha. ¿De acuerdo?-dijo Melascula.

-No es necesario, no quiero molestarte y aparte no tengo dinero. Solo un par de billetes.-

-Yo pago y luego me devuelves, no podrás dormir cómoda con ese vestido.-

Ante la insistencia, Gelda asintió.

-Gracias.-le dijo con una sonrisa sincera.

Melascula sonrió, se levantó y se acercó a la puerta.

-Ahora vuelvo.-dijo y se fue.

Gelda se dispuso a ir a ducharse, el agua caliente la tranquilizaría.

No tardo ni diez minutos, salió del baño vestida solo con una bata.

Al volver a la sala vio que las luces estaban apagadas, eso la extraño. No recordaba que hubiera apagado las luces. Llevo su mano a al interruptor para encenderlas pero al presionar el botón de encendido las luces no encendieron.