La fiesta del té.

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Era una bella noche en el pueblo Nevermore; la luna llena, luciérnagas y la alegre Lenore formaban una buena combinación... y las armas. Lenore se encontraba haciendo llamadas telefónicas para su fiesta, acomodando platos, tazas, jarras de té, muffins y demás; en ese momento sonó el timbre con el tono tradicional de ding dong. La pequeña abrió la puerta con una sonrisa para hacer sentir bienvenidos a sus invitados.

—Hola, ya estamos aquí —dijeron al unísono  sus amigos.

— ¡Yuju! ¡Hola a todos!

—Saludos y buenos deseos, mi joven amiga —exclamó Taxidermy. 

— ¡Hola! —agregó Ragamuffin. 

—Mira, ¡los panecillos! —señaló el Mounstruo de los Muffins.

—Estoy muy feliz —exclamó Lenore—. Todos, tomen una silla —dijo, señalando a la sala del té—. Los quiero chicos, todos nosotros hemos tenido maravillosas aventuras juntos, Ragamuffin... Taxidermy... Mounstruo de los Muffins... Gatito... Ese chico... ¡Esperen un minuto! ¿Quién eres tú?

— ¿Quién? ¿Yo? Bueno... yo... Mmm, ¡mira! Traje galletas para el té.

— ¡Wow! ¡Galletas para el té! Hey... Un momento, no me respondes... ¿Quién eres tú?

— ¡Soy yo! —dijo, sacándose la bolsa de la cabeza, dejando ver la estúpida máscara  de Mr.Gosh.

— ¡¿Qué?! —gritó Lenore.

—Escuché que tenían una fiesta de té y pensé que sólo olvidaste invitarme —se explicó Mr. Gosh.

—Mmm... ¡No estoy muy feliz con esto! —gritó nuevamente, y todos sus invitados –excepto Mr. Gosh- acercaron sus sillas unas a otras, sin hacer comentarios.

—Sólo déjame darte un poco de sabroso té —dijo, calmándose.

—Mmm... Suena maravilloso, me gustaría con un montón de azúcar, por favor —masculló, fregándose las manos. Lenore sirvió el té con mucho azúcar—. ¡Mmm! ¡Se ve bien!

—Así que... —Comenzó a cambiar de tema Lenore— ¿Alguien ha visto esa película?

—Encuentro desde un aspecto cinematográfico es muy placentera, sin  precedentes y es un drama muy bueno —dijo Taxidermy.

—Sí, sí, sí, ¿pero qué tal te pareció? —le preguntó Ragamuffin a Taxidermy.

—Me pareció genial.

— ¡Duele! —gritó Mr.Gosh, apretándose la garganta y levantándose de la silla. 

—En la escena de la pelea, le pegaron al botín —agregó el Monstruo de los Muffins, mientras Mr. Gosh corría frenéticamente.

—Me gustaron los trajes que usaron, muy  brillantes y relucientes —exclamó Ragamuffin. 

—Creo que los efectos especiales estuvieron realmente buenos —respondió Lenore, mientras atrás le explotaba la cabeza a Mr.Gosh –literalmente-, manchando las paredes con sus órganos y sangre negra.

—Oh, sí... ¡estoy de acuerdo! —agregaron Ragamuffin y Taxidermio.

—Yo también —dijo el Mounstruo de los Muffins.

Lenore. (Roman Dirge)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora