Lenore. (Roman Dirge)

La cosa que vino del retrete.

En un laboratorio mal cuidado, se hallaban dos científicos y una gran piscina con un experimento. Ambos hombres saltaban de alegría.

- ¡Sí! ¡Lo hemos logrado! ¡Lo hemos logrado! -gritaban, mientras hacían un baile extraño.

-El más perfecto limpiador de retretes jamás inventado -exclamó el científico con cabello marrón, algo canoso, levantando victorioso los brazos-. ¡Disolverá todas las bacterias muertas! -su vista se fijó en unos ojos saliendo del limpiador de retretes- Hey... ¿qué mier...? -ambos fijaron su vista en la cosa verde, la cual dio un disparo hacia el techo y se escabulló por las alcantarillas- Ohh, qué poca madre...

- ¡Qué hemos hecho! -gritaron repetidas veces, ambos arrodillados.

La cosa verde del retrete se escabulló por las alcantarillas hasta llegar al retrete de una casa y seguir su camino por el techo de esa misma casa. La cosa vio a una niña rubia durmiendo, con baba y miga de galletas cubriendo parte de su mejilla y se acercó a ella para tocarle la cara.

- ¡Aaaaahhhh! -gritó Lenore al notar que en toda su cara tenía una cosa horrible. Gritó y corrió hasta revolear la cosa lejos de su cara- ¡Oye! ¿Por qué me quemas la cara?-le preguntó a la cosa.

-Estoy programado para atacar materia muerta, y tú eres materia muerta.

-Pero yo sólo dormía -sonrió la niña.

-Escucha, pequeña, yo tengo que regresar a tu retrete, ahora estoy muy hambriento...

- ¿Viniste del caño?

-Pues, sí, y no estoy muy orgulloso de ello...

-Yo conozco un artefacto para regresar las cosas que vinieron del caño...

-Que... ¿qué? ¿Y qué es? ¡Dámelo! -se alegró la cosa.

- ¡ESTO! -mostró su artefacto.

-Parece inofensivo... ¿qué podrías hacer con eso?

14 horas más tarde...

La cosa que vino del retrete apareció en el fregadero de donde se hallaban los científicos.