Capítulo 21 «Dorian»

144 16 5
                                    

Durante una semana estuvimos recolectando todos los ADN de estudiantes que pudimos. Mis dolores de cabeza comienzan con más fuerza y las investigaciones para encontrar alguna de las pistas en relación con la ley de los primogénitos están estancadas. Austin aún no tiene respuestas y no estamos ni a un paso de acercarnos ni a una cosa ni la otra.

—Hola, Allison —habla el profesor levantando la cara del microscopio, pero frunce el ceño al ver mi cara—. ¿Estás bien?

—No, profesor. No estoy nada bien. —Presiono la sien con los dedos.

—¿Qué ocurre?

—Estoy un poco preocupada por dos cosas. Primero el tema de estas bestias mutantes y en segundo lugar, Chris.

—¿Christopher Gray? —Asiento frustrada—. ¿Qué pasa con él?

—Chris es el mayor de la familia Gray, Cameron es el del medio y Celine es la menor. Chris cumple los 18 años, y estoy pensando en encontrar una forma para salvarlo de esa ley tan absurda.

—Pero eso no está comprobado.

—Mis padres me dijeron que hay una solución. El padre de Austin hizo una investigación referente a eso, pero aún no la encuentra.

—Además, si fuera cierto, el hijo de Dorian se volvió tan loco como para quitarse la vida.

—Le quiero demasiado como para perderlo, Isaac. —Dejo escapar un largo suspiro apesadumbrado—. No importa el precio que tenga que pagar.

—¿A pesar que tu vida dependa de ello? —Cruza sus brazos y posa sus ojos en mí con una mirada de ternura.

—No te imaginas las locuras que podemos hacer los McKenzie por amor. —Respiro con profundidad y toco el colgante por encima de la camisa para darme fuerzas y mantenerme lúcida—. ¿Ya tienes los resultados del ADN?

—Sí. —Se quita los guantes de látex y me entrega un sobre. Niego con la cabeza al instante.

—Al punto, por favor. No me gusta leer informes que no entiendo.

—Ninguno coincide con el ADN de los mutantes. —Gruño por lo bajo—. Ve a descansar. Ya es tarde.

—No es justo, Isaac.

—Solo llevas un par de semanas, Allison. No puedes pretender resolver este problema tan rápido, y ahora sumaste ayudar a Chris. Es demasiado. No puedes cargar con eso sola

—No estoy sola, profesor. Mis amigos me están apoyando y ayudando en esto.

—¿Desde hace cuánto les conoces?

—Cuando entré al colegio el año pasado. Pero me apoyaron desde el principio.

—Pueden ser un fraude y estar a tu lado por interés.

—No lo creo. No tengo nada para darles, además de dolores de cabeza. Esos vienen gratis. Casi mueren por ayudarme el año pasado al encontrar la tumba de Raquel. Una chica estaba obsesionada con ella y la detuvimos a tiempo. Estuvo convirtiendo chicos cold en el colegio. Fue una locura.

—¿Convirtiendo chicos cold? —pregunta, asombrado—. Eso es imposible.

—Ya sé, pero lo logró, y más de 10 chicos fueron convertidos en cold. Algunos estaban en proceso. Brenda y yo lo descubrimos a tiempo. Soportaron el solsticio de invierno para detener esa locura. Dudo que nuestra amistad sea un fraude. Además, en el Torneo regresaron por mí cuando una bestia de esas atacó.

—Deben ser muy valientes o tontos.

—Es posible. Tenemos nuestras diferencias, pero no los cambiaría por nada del mundo. ¿Sabías que Talia Sprouse me odiaba a principio? —Él niega con la cabeza—. Pues sí. Esa pelirroja me odiaba con el alma. El día que los chicos de Mary Weathers llegaron a nuestro colegio, un grupo de cold atacó el colegio. Talia casi muere, pero llegué a tiempo. Después de eso, nuestra relación fue mejorando y aquí está.

El Quinto Elemento (Elements II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora