El viento que se colaba por la ventana de Kate soplaba nuestras caras y despeinaba un poco nuestros cabellos, entusiasmados emprendimos rumbo por las calles desoladas de los Ángeles de vuelta a nuestra casa o el apartamento de Kate, llevábamos comprometidos una hora a penas y a la castaña no se le había borrado la gran sonrisa que tenía impregnada en su rostro desde que se había convertido en mi prometida, no pensaba que lo tomaría así pero verla feliz incentivó también mi felicidad. La euforia disipó mi cansancio, pretendía convencer a Kate de pasar la noche juntos y esperaba con ansias tenerla junto a mi nuevamente, 'Dancing Queen' de ABBA sonaba en la radio y la mirada de la castaña se dirigía al frente del volante, no quería dejar de verla y así fue en todo el camino.
Kate estaciono mi auto delante de su edificio, yo seguía observando los delicados y bellos rasgos de la británica, una mujer de ensueño. La castaña bostezo y apoyo su cabeza al volante, suspiro con pesadez y volvió a levantar la cabeza.
—Fue un día largo —dije, ambos nos miramos— Yo no quería dormir.
—¿Aún tienes fuerzas? —dijo pícaramente, enarque una ceja ante su provocación.
Kate y yo no concretamos nada pues a penas tocamos la cama quedamos profundamente dormidos, horas más tarde a penas desperté entre la oscuridad de la habitación, estaba dándole la espalda a Kate así que di media vuelta y note que la castaña no estaba. Un ligero rayo de luz se colaba por el costado de la cortina e iluminaba el anillo de compromiso que yacía en la mesita de noche, me levanté de la cama y busque mis zapatos, no llevaba camisa y no recordaba cuando me la había quitado, tambaleando me dirigí a la puerta, antes que llegará, la castaña se asomó con una linda sonrisa que despertó un cosquilleo en mi estómago. Mis ojos fueron directo a sus labios rosados y algo hinchados bueno no algo si no mucho lo que despertó curiosidad y algo de celos en mi.
—Tus labios se ven algo hinchados.
Kate abrió los ojos.
—Siempre me levanto así Nikki —dijo con tono suave pero mis celos crecían un poco más
— No hay algún hombre más en este departamento ¿verdad? —dije en broma y mi chica negó.
—Primer día de comprometidos y ya es un loco celoso —la voz de Emma se escuchó de fondo.
—¿Por que te metes en lo que no te importa? —dije con algo de molestia, la rubia apareció delante mío y me mostró su dedo medio a las que solo chasquee la lengua.
Kate colocó sus manos en mi pecho y me empujó para adentrarnos a la habitación, llegamos a la orilla de su cama y se me avalanzo quedándo encima mío, nuestras miradas coincidieron por un corto momento y cerré instantáneamente mis ojos al sentir sus calientes labios en los míos, mis manos viajaron hasta su cintura y empecé a jugar con el final de su playera intentando poco a poco quitársela.
—Kate, tienes una llamada —la horrible voz de Emma se escuchó del otro lado apagando el momento de pasión que comenzábamos a sentir.
La castaña se levantó de mala gana y salió de la habitación, la seguí hasta la puerta y desde ahí se veía a Kate en el teléfono, se sentó en el sillón y dirigió cortamente su vista hasta mi. Aproveche ese pequeño lapso de tiempo para buscar en mi bolsillo un pequeño envoltorio de papel que contenía cocaína, sonreí por instinto al presentir lo que seguía, cerebro apagado y cuerpo despierto, tiré lo poco que había en la mesa de noche y como pude hice una línea de cocaína y la aspire de un solo golpe. Después de un breve momento el alucinógeno empezaba a hacer efectos en mi, Kate entro y al verme su rostro se tornó en confusión, solté una gran risa al verla así, no me resistí y besé sus labios con pasión, la castaña nada sorprendida siguió con el beso hasta que la voz de la rubia se oyó nuevamente interrumpiendo nuestro acto pero esta vez era para despedirse de la mi chica, una sonrisa provocativa y perversa se formó en los labios rosados de mi Kate, despertando más mis deseos de estar con ella.
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Love on the Wild Side (Nikki Sixx)
FanfictionMis ojos se llenaron de amor cuando vi a Nikki sonreír.