Love on the Wild Side (Nikki Sixx)

Capítulo 23

Volví al hotel caminando, a esta hora no había mucha gente y prácticamente todos estaban dormidos.

Me quite los zapatos y empecé a caminar descalza por el hotel, paso a paso hasta llegar a el ascensor.

—¡Kate! —Noah salió de la nada y se puso en frente mío— Necesito un favor.

—No tengo dinero — dije lo mas triste posible. A lo que el adolescente negó con las manos.

—Por favor acompáñame, el hotel organizo un concurso de alcohólicos.—me hice la ofendida aunque de nada sirvió— Me estás entendiendo mal, mezclaran diferentes tipos de alcohol y el que más resista se llevara un jugoso premio.

—Ok... no —respondí, solté un largo suspiro y luego asentí.

El ya conocido bar por mi tenía ahora una larga mesa donde esperaban muchos competidores, Noah me ubicó en una de las esquinas de la larga mesa.

—¿Por que llegaste con él? —era la voz de Tommy, me di vuelta y lo encontré junto a Mick, el baterista tenía cara de pocos amigos.

—¿Por que volvieron tan pronto?

—Nikki prácticamente nos forzó a volver y a buscarte por todo el hotel —habló Mick despreocupado— Yo solo quiero descansar, que bueno que te encontramos.

Desde la puerta se acercaba Nikki quien detrás suyo llevaba a Brooke, a mi lado llegó Noah emocionado para explicarme las condiciones y restricciones del reto, al notar mi desánimo toco mis hombros.

—No quiero perderme esto —habló Tommy quien luego miro a Noah con cara de querer matarlo.

Ignore totalmente a Nikki cuando se acercó y se sentó a mi lado, como si no existiera, luego sentí su mano encajando con la mía y pronto lo solté. Sus ojos verdes se encontraron con los míos y no pude evitar sonrojarme, no entendía cual era su intención, el por qué su mano encajaba con la mía de nuevo y por qué me miraba como antes.

—Lo siento Noah, no quiero jugar —me deshice de la mano de Nikki y me levante de golpe llamando la atención de mas de uno.

—No seas aguafiestas Kate o ¿acaso eres una cobarde y no podrás con el reto?

Rodé los ojos y volví a sentarme, una chica alzó la voz y todos prestaron atención. Nikki no dejaba de verme, hasta que llegó Brooke y toda su atención fue para ella.

El concurso de borrachos comenzó muy bien, aunque la competencia parecía más entre Nikki y yo, cuál de los dos aguantaba más. Al cabo de un rato llego Noah con una charola llena de vasos de licor se sentó a mi lado quedando en medio de Nikki y yo.

—Pronto habrá un ganador, estás por buen camino.

Sonreí tímidamente y procedí a tomar más y más vasos hasta casi completar la charola mientras que Nikki miraba expectante a qué podría pasar entre Noah y yo, arcadas llegaron hasta mi, comencé a marearme y a casi perder el equilibrio.

—Es suficiente —habló Nikki, saco su billetera y dejo un puñado de billetes dentro de la camisa de Noah, el pelinegro se levantó y tiró de mi debía cuerpo para irnos.

—No quiero irme aún —reproche —Noah...

El chico intentó tomar mi mano pero el bajista se colocó delante mío.