DayDream (En Emisión).

VERDAD - Capitulo Diez

Los Rivermanes de Zack no cayeron al suelo, en un principio levitaron con mucha lentitud, hasta que comenzaron a vibrar un poco.

—Creó que deberías reformular la pregunta, debes ser un poco más especifico para tener una respuesta favorable.

Zack escuchó a Abraxas mientras que tomaba las pequeñas rocas con sus manos, después concentró sus pensamientos en lo sucedido en la mansión de los Bocanegra.

—¿Alguno de ellos posee DayDream-ya?

Esta vez los Rivermanes cayeron directamente al suelo para darle cómo respuesta un sí rotundo.

—Algo que olvide mencionar es que todo ser humano posee DayDream-ya, sin excepción de nadie pero puedes probar preguntando si tienen acceso a DayDream.

Zack miró un momento a su guía para después respirar profundamente, la sensación que teñía en esos momentos era casi igual a la euforia pues nunca antes había tenido tanta energía.
El chico preguntó lo que Abraxas le sugirió y esta vez los Rivermanes le dieron un sí dudoso.

—Entonces sí pueden tener habilidades sobrehumanas, aunque ¿quien?

—Creó que lo que te debería preocupar es su propósito, pues no todo es cómo parece.

Zack sintió su cuerpo más pesado y un poco cansado, su aspecto metálico desapareció junto con el pequeño campo de DayDream-ya que lo rodeaba y conectaba con su Guarda.

—¿Que pasó?, de repente siento demasiado cansancio.

—Eso es porque estuviste bastante tiempo con tu DayDream-ya activada y no liberaste esa energía pero ven.

Abraxas abrió otro portal de color naranja que los condujo a una cueva oscura y fría.
En el interior de la cueva habían varias rocas pequeñas y brillantes, unas cuantas de color dorado, otras de color plateado y una que otra de color negro.

—¿En dónde estamos? –preguntó Zack mientras se acercaba a observar mejor aquellas rocas– y ¿que son estas cosas?

—Estamos en el bosque de las energías, cerca de aquí pasa el flujo de la DayDream-ya en estado puro, cuándo tiene contacto con la naturaleza pues transforma unas cuantas rocas en orbes que contienen energía para restablecer la salud de un DayDreamiano.

—¿Se pueden tomar así sin más?

Zack se agacho para tomar un orbe de color dorado brillante pero al recogerlo del suelo perdió su brillo.

—Sí, puedes tomar los que necesites pero debe ser un orbe compatible contigo –Abraxas le señaló un orbe de color plateado– Yo no podría tomar ninguno de estos orbes porque mi DayDream-ya no esta aquí.
Pero la tuya es compatible con el metal, toma uno y verás.

El chico tomó esta vez el indicado, cuándo el orbe estuvo en su palma la pequeña piedra que parecía ser un pedazo de acero se derritió y cubrió toda su palma. Zack se sacudió un poco pues sus energías se restablecieron.

—Siento cómo si pudiera destruir el castillo de la unión por completo.

Ambos se rieron por el comentario de Zack y regresaron al castillo de la unión, pero en la entrada principal habían un par de personas impidiendo el paso pues parecía que había algo llamando mucho la atención.

—¿Que sucede ahí? –Preguntó Zack.
—No lo sé, pero debe ser algo grande para que tantas personas estén reunidas.

Abraxas tomó el brazo de Zack para volverse intangible y pasar a través de todos los DayDreamianos que estaban ahí, en el centrjoven la multitud pues había un chico tirado en el suelo retorciéndose del dolor, al parecer su brazo había sufrido de un ataque.